por Jorge A. González
Periodismo de Opinión
Periodismo Freelance

Autoridades de comercio del municipio del Ayuntamiento de Guadalajara levantan instrumentos de la cantante Flor Amargo en el parque central y la detienen por alterar el orden público.
Habría que explicar a los empleados del Ayuntamiento de Guadalajara lo que es CULTURA URBANA.
Para su conocimiento es el mecanismo más efectivo para acercar las manifestaciones culturales a la sociedad.
Lo mismo sucedió en diversas ocasiones en la ciudad de Xalapa.
La sensibilidad de las autoridades es urgente, no se puede aspirar a un país cultural con estas actitudes.
Sobre todo la pena de no comprender el proyecto sensibilizador y social de la músico y cantante Flor Amargo, que deja su energía en cada una de sus presentaciones en las calles de las ciudades de México y el extranjero.