
Buen día. Raro, demasiado raro es que tanto priístas, panistas, perredistas y líderes de los demás partidos en México, no hayan hecho gran alharaca, hasta la noche de ayer, por el cambio o ratificación de María del Carmen Alanís Figueroa, como presidenta del TRIFE.
Su período de 4 años, feneció legalmente ayer a las 24 horas. El magistrado Alejandro Luna Ramos, tendrá a su cargo la conducción del proceso de elección del nuevo presidente o, en su caso, como lo escribimos antes, la re—elección de doña María del Carmen.
Tenemos registrados como posibles sucesores a Constancio (¿por constante?) Carrasco Daza y a Pedro Esteban Penagos López. Será designado, quien gane los 4 votos de los 7 magistrados.
Hay mucho hermetismo, en el desarrollo de esta elección. Consideramos viable la re—elección de María del Carmen Alanis. En caso de que no lo lograse, bien puede quedar Penagos López, marcado como favorito de la señora magistrada.
Al filo del mediodía de hoy, se darán las primeras señales de quién quedará en este Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, institución clave e influyente en el proceso electoral del próximo año y algo así como el fiel de la balanza, para declarar electo al próximo presidente de la República, para el período 2012-2018.
Nos parece muy raro –insistimos–, que ningún polaco, líder del partido, legislador, líder social, grupo empresarial y demás, no se hayan pronunciado por tal o cual candidato o emitido alguna crítica en pro o en contra de este proceso de elección.
¿Será porque ya cada uno de ellos, da como ganador a los precandidatos presidenciales mencionados con insistencia en los medios de comunicación?
Mucho “fuego amigo”, contra Ernesto Cordero
El todavía secretario de Hacienda, Ernesto Cordero Arroyo, recibe y resiste un intenso “fuego amigo” político, de muchos de sus adversarios que compiten con él, para la elección presidencial, a desarrollarse dentro de 11 meses.
Desde antier, ayer y en medio de la crisis financiera internacional y nacional, Cordero “capotea” señalamientos y críticas, por su permanencia en la SHyCP y no se decide a renunciar para dedicarse a su precandidatura panista para la presidencial del 2012.
Los más le exigen definiciones para atender adecuadamente el conflicto en puerta que la crisis de la deuda estadounidense ha generado en las economías del primer mundo y emergentes, y se olvide de una vez de sus pretensiones políticas.
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