
+ Reincorporar a Salinas en el PRI, significa que el partido no quiere cambiar.
+ En las próximas elecciones ganará un gobierno de izquierda
+ Un honor ser atacado por el presidente más desprestigiado de la historia reciente, dice.
+ El PRI ya no tiene poder de convocatoria entre los intelectuales.
+No es casual la visita de Lula a México; es una opción a considerar de la izquierda.
+ Salinas ni veía ni leía a la izquierda, pero bien que la reprimía.
Entrevistado ayer por Carmen Aristegui, en su noticiero matutino, Enrique Krauze, a propósito de la difusión de su libro “Redentores, Ideas y poder en América Latina, y otras cosas”, fue aprovechado por la periodista para que preguntarle acerca de los ataques de Carlos Salinas en su contra en su más reciente publicación, a lo que el historiador respondió que Carlos Salinas, cuando fue presidente, solo tenía un proyecto, tener el poder durante 24 años y que era un honor para él ser atacado por el presidente mas desprestigiado y impopular de la historia del México reciente.
Krauze, que había hablado, al filo de las ocho de la mañana de la temática principal de su libro que aborda cien años de la historia en México, en la que aparecieron notables hombres y mujeres que pueden ser catalogados de líderes y de redentores, tuvo que amoldar su tesis a la situación actual que vive México.
Dijo que cuando Salinas de Gortari llegó al poder, en 1988, muchos intelectuales creyeron en él, entre ellos Octavio Paz, porque consideraban que iba a ser el líder que transformaría a México desde dentro del poder. No lo hizo, recalcó Krauze, y decepcionó a muchos intelectuales que creyeron en él, sino formo un grupo de poder para apoderarse de México.
Entonces Carmen Aristegui le comentó que en la entrevista que le hiciera a Miguel de la Madrid en años recientes, que provocó una virulenta respuesta de Carlos Salinas en contra de ambos, el ex presidente se lamentaba que Salinas volvía a aparecer en público aparecía ya en público nuevamente y ya no pasaba nada. “Lo decía De la Madrid con mucha amargura”, recalcó Aristegui.
“Pero los intelectuales tenemos memoria y debemos recordar a los jóvenes de hoy, lo que fue Salinas”, dijo Enrique Krauze; quien agregó que los intelectuales no olvidan “la caida del sistema, la quema de las boletas en la elección del 88, que a la izquierda no la veía y no la oía pero bien que la reprimía; no vamos a olvidar que el se jactaba de hacer la Perestroika pero no la Glasnot, no vamos olvidar que sondeó seriamente la posibilidad de reelegirse, no vamos a olvidar que abandonó a Colosio, no vamos a olvidar que se olvidó a promover una reforma política y que solo actuó cuando el sistema se estalló con el levantamiento zapatista y el asesinato de Colosio”
Ya lo dije yo en mi libro “La Presidencia Imperial”, prosiguió Krauze, y también en dos capítulos de la serie documental “El hombre que quiso ser rey”, que Salinas pudo haber sido el líder que llevara a México a la modernidad, pero su proyecto, así se dijo, era perpetuarse 24 años en el poder.
Carmen Aristégui acotó:
“Eso lo dijo Gurría”
A lo que Krauze replicó:
“Si, lo dijo Gurría, que esa generación del cambio se quedaría 24 años. Bueno pues muchos mexicanos de izquierda, de centro izquierda, liberales y hasta de centro derecha pensaron que ese proyecto era inadmisible y por eso estalló el movimiento zapatista y sobrevino el turbio asesinato de Colosio”.
Mas adelante, enfatizó que el PRI ya no tiene intelectuales de su lado, como antaño, cuando incluso llegaron a crear la ideología del nacionalismo revolucionario los más notables intelectuales de México que, a cambio, recibían embajadas y puestos de funconarios en el gobierno. Al paso del tiempo, después de la actuación del PRI en el poder, fue perdiendo capacidad de convocatoria entre los intelectuales de valía en el país, a tal grado que ser intelectual y pertenecer al PRI ha resultado en los últimos años algo vergonzoso.
Expresó a continuación:
“El PRI necesita una restauración, y para ello necesita un ideólogo. Beatriz Paredes confesó hace unos días. Nuestra indefinición nos coloca como un partido gelatina porque nos amoldamos al poder en turno. Bueno, entonces sale el señor Salinas y dice yo estoy aquí, yo puedo ser el intelectual orgánico”
Entonces reutilizó lo que Salinas mismo dice en su libro, de lo que es un intelectual orgánico:
«Intelectuales orgánicos son aquellos que pueden abonar ideas o argumentos a favor de ciertas ideas o proyectos para convertirlos en dominantes»
Eso es lo que busca ser en el PRI Carlos Salinas, insistió Krauze
A ello atribuye esa insistencia de Salinas de publicar libros que incluso, como el actual, son refritos de otros anteriores. Este más flaquito que el otro, dijo con desprecio.
Cuando Aristegui le preguntó si existió fraude en las elecciones del 88 que llevaron al poder a Salinas, situación que Octavio Paz negó, Krauze le respondió que él en lo personal junto con Gabriel Zaid, siempre pensaron que hubo fraude, pero Octavio Paz hasta escribió que él no tenía elementos para pensarlo así. Por eso Zaid y Krauze se fueron de la revista “Vuelta” para escribir sobre ese fraude en otras publicaciones. Zaid en Contenido y Krause en La Jornada, y más tarde Reforma.
Dijo que en el futuro de México hay tres impulso para llegar a la presidencia: impulso de la continuidad, el impulso de la restauración y el impulso de la redención. Los tres sumamente negativos. Sobre el primero aludió que se refería el no cambiar el modelo neoliberal que ha significo un fracaso económico total en el pais. Respecto al segundo hizo referencia del PRI que quiere la restauración de su forma antigua de gobernar, con el pretexto, que ellos antes lo hicieron mejor, llevándonos otra vez al dinosaurio del carro completo; y en el tercer impulso, sin mencionara nombres, a la corriente de López Obrador, de tipo redentorista, capaz de instaurar el culto a la personalidad y el rompimiento con las instituciones del país.
No queda más que esperar que la izquierda recapacite, aseguró Krauze, porque debe ser de izquierda el próximo gobierno que gobierne al país. No es casual que Lula haya venido aquí a dar el paso que dio con su pequeño regaño a la izquierda, remarcó.
“No estoy redescubriendo el hilo negro. Lula nos está dando el ejemplo. Se puede promover el gran crecimiento publico y privado de petrobas, y seguir siendo un gran lider mundial de la izquierda”, abundo Krauze.
Quien se asumió como un liberal que piensa que el próximo gobierno de Méxco será de izquierda, comentó que ojala Lula haya inoculado, aquí, en las plática con nuestros lideres de izquierda con ese gen que combina de justicia, crecimiento economico y democracia, sin recurrir a esa serie de desplantes , ataques o posturas redentoristas.
Respecto al PRI y su candidato Enrique Peña Nieto, remató que el hecho de que estén reincorporando públicamente a Carlos Salinas en la foto del partido, es una muestra de que ese partido no puede o no quiere cambiar, y solo quiere la restauración del pasado.
Puntualizó:
“Que México regrese a ese pasado, sería muy vergonzoso en un marco latinoamericano y mundial de democracia. Nos alejaría mucho del modelo brasileño que te estoy proponiendo”
Entonces advirtió:
“Si el PRI busca una restauración de lo que ya fue, entonces los intelectuales ejerceremos una oposición nuevamente, como la ejercimos en aquellos años,porque la democracia de México tiene que irse perfeccionando”
También hablaron de que hasta el momento, Gabriel Zaid ya refutó todas las argumentaciones económicas de Salinas que publica en sus libros, revelando, incluso, que el cuestionado ex presidente de México fue el verdadero culpable del error de diciembre, después atribuido al gobierno del presidente Ernesto Zedillo. Carmen apuntó: «Salinas no le ha contestado aún». Enrique Krauze reviró: «Ni le contestará»
Todo ello en el marco de una entrevista radiofónica que Carmen Aristegui le realizó en su programa de MVS sobre su próximo libro “Redentores, Ideas y poder en América Latina, y otras cosas”, que se desvió al tema de Carlos Salinas y la situación política actual de México, lo que orilló casi al despedirse que Enrique Krauze le dijera a la periodista:
“Eres tremenda, Carmen”
Carmen Aristeguí se rió y le contestó:
“Fue leve”
(La entrevista completa puede escucharse en los enlaces de abajo)
