Los candidatos solo ofrecen
retórica: Carlos Fuentes.
*CAOS VIAL GRACIAS
AL SERVICIO URBANO.
Una de las facetas que encara la ciudad en su congestionamiento vehicular es precisamente la cantidad de cien líneas autobuseras recorriendo las calles de la ciudad y metiéndose al casco histórico, las que sumadas al taxi y los inconscientes que manejan como locos hacen de esta capital un pequeño infierno todos los días.
Las complicaciones del tránsito y la vialidad en nuestras arterias públicas, en apariencia no tienen para cuando verse resueltas.
Xalapa, conserva las mismas arterias públicas de hace cien y 200 años, solo que hoy la cantidad de automóviles y camiones que la circulan, se antoja de consecuencias impredecibles.
Propios y ajenos, saben que entrar a las calles de la ciudad, es meterse a una boca de lobo y que librarlas no es para menos, se puede salir raspado en el menor de los casos. Empero, la capital del estado veracruzano, sin dejar lugar a la menor duda, es de las que observan las peores condiciones de vialidad y tránsito en la república.
Mucho de este síntoma de descomposición en el rubro, lo exhibe el transporte público, representado por las cien líneas autobuseras que se disputan a los miles de pasajeros diarios, que hacen uso de sus unidades automotrices.
En diferentes ocasiones, hay quienes presumen que convirtiendo los enormes autobuses en microbuseros, mucho del congestionamiento vehicular puede encontrar su vía de solución.
Los intereses creados entre concesionarios y autoridades de tránsito, siempre los ha habido, pero un día cualquiera, se tendrá que ver por el interés superior de la ciudad, y entonces, el servicio de transporte público tendrá que cambiar, echando fuera a los estorbosos autobuses de nuestras calles y relevándolos con microbuses.
Esta es una de las soluciones que no encuentran los expertos en urbanismo y menos para Xalapa, que hace mucho no ve la suya. Hasta aquí.
*VOTO DEL EXTRANJERO,
CON CARTAS Y CHEQUES.
No crea usted que el voto de los electores mexicanos y que residente en algún lugar del extranjero lo van a rendir haciendo eco de su nacionalismo, el amor a la patria o lealtad a los candidatos a la presidencias de la república.
No nada de eso.
Muchos o los más, de quienes siendo aztecas y residen en el exterior aprovechan mandar su voto acompañándolo de cartas, cheques y hasta bufandas, aprovechando que el IFE paga el porte que ampara el paquete en cuestión.
Quizá se ignore que hay mexicanos viviendo en ciudades cuando menos 105 países y para aquellos el árbitro electoral (IFE) ya envió los paquetes electorales y en respuesta, el grueso de todos aquellos ciudadanos regresarán su boleta electoral cruzada por el candidato de sus preferencias, a los que en ocasiones ni siquiera conocen por fotografía, pero a dicha paquetería le anexan ropa, cheques, placas vehiculares y otros efectos menores incluidos los de uso personal.
Esta es una constante que se repite cada que se celebra un proceso electoral en el orden federal sobre todo. Ya dirán los partidos políticos, que la convocatoria de esos membretes ha sido suficiente para atraer la atención de varios cientos de miles de ciudadanos, y hasta se dirá, que son tan patriotas, que no olvidan su deber como tales.
En ese paquete electoral, que recibirán los ciudadanos mexicanos en el extranjero contiene la boleta para elegir presidente de la república, un sobre, donde se deberá depositar el sufragio y un sobre postal de tamaño mediano con porte pagado, en el que se debe enviar el voto.
Junto con el paquete, van videos y material suficiente, a través de los cuales se narran las propuestas de los candidatos en la pelea presidencial.
Cabe destacar que el total de votantes en el exterior, representa el 0.52 por ciento de compatriotas habitando fuera del país, que a decir del Instituto de Mexicanos en el Exterior suman 11 millones 649, 991.
México tiene ciudadanos en edad de votar en Haití, Omán, Jordania, Sudáfrica y obviamente los Estados Unidos de Norteamérica.
Finalmente, los mexicanos en el exterior, deberán haber enviado su voto antes de 30 de junio próximo, para ser contabilizado.
En el proceso electoral del 2006, entre 6,000 y 7,000 paquetes nunca llegaron a México, en tanto el IFE envió 40, 876 paquetes electorales, de los cuales recibió 33,111. ¿Usted qué opina?.
*CORRUPCION AQUÍ
Y EN QUIMIXTLAN.
El fantasma de la corrupción lo mismo se da en Quimixtlan, que en Xalapa y ahora incluye también a Chilchota.
Poco se dice que el agua que beben los xalapeños, viene de los manantiales de dos poblados específicamente establecidos en la vecina entidad de Puebla de los Angeles.
Pero poco también se ha advertido, que para conseguir el vital líquido, uno de los bienes patrimoniales de la nación que no debieran ser por ningún concepto satanizados ni condicionados en su entrega, hay que estar pagando chantajes a los angelinos de la frontera con el estado de Veracruz.
O al menos así se entendió, luego de que alguien dijera o sugiriera que el ayuntamiento municipal de Xalapa, está en posibilidad de denunciar penalmente a quienes cierran las válvulas-así le dicen ahora a los cortes- del vital líquido y que se almacena en los tanques del Hutizilapan.
Cada tres años los alcaldes anuncian obras millonarias y por ende, necesariamente los costos a pagar, se los endosan a los recibos que mensualmente tienen que pagar los consumidores.
Inclusive, con singular garbo se anuncia o se insiste en que Xalapa no sufrirá la escasez del agua en sus tanques y tinacos, solo que a precios más elevados, porque la tubería y la obra hidráulica, toda se refiere cuesta millones de pesos.
El vital líquido, no pertenece a los veracruzanos ni a los xalapeños, es de los poblanos, quienes condicionan su entrega, utilizando el chantaje, en el cual participan dos actores principales, el que brinda la atención y el que cae en la cuenta de ser igualmente un extorsionador. Porque de otra suerte, si a los poblanos no les cumplen, en Quimixtlán, simplemente lo niegan, como si el agua fuera de su propiedad.
Lo que tampoco nunca la autoridad local ha aclarado, cual ha sido el destino de las tantas obras de carácter hidráulico, que aquí se anuncian con bombo y platillo, debido a sus costos millonarios, que ahora viene el alcalde de Quimixtlan, y se atreve a denunciar que le adeudan a su municipalidad 60 millones de pesos bajo el rubro de obras públicas.
Cuántas a ciencia cierta de estas construcciones, han sido pagadas con el dinero de los xalapeños, nadie lo ha dicho, pero el programa de saneamiento integral de la ciudad y las obras que se anuncian cada tres años, dónde están, porque lo peor, es que se sepa que los manantiales afluentes que acarrean líquido potable a Xalapa, son foráneas, porque nosotros no las tenemos, así de simple.
EfACICO 