* PESA EL HARTAZGO
AL CANDIDATO EPN
* Un sentido pésame por el
Viaje sin retorno de Raúl
Aguilar Maraboto.
En realidad, al candidato priista Enrique Peña Nieto, toca cargar con el hartazgo que existe en la sociedad mexicana de manera generalizada y los síntomas de esta descomposición, se aprecian por doquiera.
El abanderado priista, quizá no sea directamente el responsable de la debacle que ha amagado con hundirlo todo en este país, pero la losa que carga en esta cruzada por el voto, así lo pareciera y ni modo.
Sin embargo, todo pareciera que se le viene encima al ex gobernador mexiquense, sobre todo, cuando la campaña presidencial podría advertirse que empieza a cerrar en poco más del 50 por ciento de su recorrido por el país.
Es fácil de entenderlo, difícil aceptarlo.
El viejo sistema pareciera estar resucitando, con la fila de candidatos y colaboradores dinosáuricos del candidato presidencial. Los jóvenes aparecen pegando propaganda en la calle, cargando con espectaculares y arengando a las masas, que se reúnan en torno de EPN, pero nada trascendente.
Los candidatos en mayoría del partido tricolor, no pueden sentir nada sobre el lema en boga de los tricolores, consistente en que México necesita un rumbo nuevo, cuando una mayoría aplastante, son precisamente los viejos que se surtieron de las mieles del poder ejercido, con los colores del instituto tricolor.
Las golpizas a los muchachos en Córdoba, durante la visita de Peña Nieto, en gira proselitista; el desaguisado ocurrido en la Iberoamericana, donde los estudiantes hicieron uso de su libertad de expresión, si acaso, es otra manifestación de enojo e irritación, que el pueblo de México arrastra de hace 71 años, junto con los doce más, que incluye el régimen panista.
Los» ninis», bajo protesta permanente porque no tienen trabajo ni van a la escuela, ninguna opinión ha arrancado de los candidatos.
Total, el enojo y molestia sociales, se deben, ni duda a un viejo régimen, que trata de refundarse y cínicamente anuncia que «México necesita un rumbo nuevo», pero con los rostros y candidatos de siempre.
Por favor, hacía dónde deben virar los mexicanos, que hoy más que nunca, no se dejan engañar, como fuera en otros tiempos.
* NACIONES UNIDAS
Y LOS PERIODISTAS
Hace tiempo que el ejercicio periodístico se volvió peligroso y sus principales adversarios y hasta enemigos, están en la esfera pública, son funcionarios públicos y esto lo sabe cualquiera.
Atrapar a culpables de quienes se convierten en sus víctimas mortales, o sufren la desaparición o son encarcelados, bajo el mínimo sonrojo, nunca se ha dado, desde que Ignacio Morales Lechuga, en su papel de fiscal del país, aprehendió al francotirador que asesinó al periodista Manuel Buendía Téllez Girón en la ciudad de México.
Esta fue una de las razones de peso, para que vinieran enviados observadores de las Naciones Unidas, especializados en materia de derechos humanos, violación de los mismos y particularmente, expertos en lo que hace a las afectaciones que afronta la libertad de expresión.
La prensa ya no es lo que fue, es decir, la búsqueda de la verdad lleva a los profesionales de la pluma a escribir lo que ven y escuchan de la gente y los involucrados en las diversas problemáticas sociales.
Pero igualmente, los medios experimentan un largo trecho entre quienes informan lo que hacen los funcionarios públicos y los periodistas, que difunden lo que escuchan.
La tarea dejó de ser lo atractiva que era, sobre todo cuando el reportaje, la crónica, la entrevista y nota de color provocaban un deleite en el lector.
Las escuelas de periodismo y de ciencias de la comunicación lo saben, los espacios se reducen para difundir lo que ocurre en la sociedad a través de las trincheras e la información social, pero igual, las adversidades aparecen con singular oposición para que aquello ocurra.
La premisa de don Francisco Gutiérrez y González, profesor de la ex facultad de periodismo en los años 60-70 de escribir, con sencillez, claridad y concisión, en mucho no lo es, porque los medios se han convertido en no poco trincheras para la difusión de los monólogos, que todos los días, dictan de igual forma y contenido la mayoría de servidores públicos.
Candidatos en campaña hacen lo mismo, por eso, el aburrimiento que propician a los lectores, extensos boletines de prensa, que honor a la verdad, sólo leen sus interesados.
Investigadores de la ONU, así lo han podido captar de sus indagatorias. Esperemos.
* ANDANADA
VS EX ALCALDES
En las últimas semanas ediles y funcionarios menores del ayuntamiento, pero ligados al área de obras públicas han enderezado baterías en contra de ex alcaldes, por aquellos servicios que no cumplieron dejando en total indefensión a los mismos, pero en los ciudadanos de Xalapa, provoca desaliento y enojos.
Primero Enrique Salmerón, culpa que en Xalapa la cultura o sus diversas manifestaciones se han visto reducidas a menos, porque la afluencia de lectores de libros, por caso, son menos y el resto de actividades quedan cortas, sin los asiduos ni asistentes, como pudiera esperarse en los teatros y recintos para la buena música.
Enseguida, regidores relacionados al ramo de la obra pública acusan que anteriores administraciones olvidaron los servicios públicos relevantes, para dar paso a la obra suntuosa o simplemente cambiar el uso de suelo y no se construyeron puentes, caminos ni pavimentos, que habrían salvado a la capital de inundaciones y otros problemas materiales.
Tampoco aceptan ediles, el chantaje de los habitantes de Quimixtlán, estado de Puebla, y que a decir del alcalde de aquella municipalidad, la comuna de Xalapa les viene adeudando 60 millones de pesos, desde hace años, porque según el alcalde poblano en su momento todos los ex alcaldes convinieron en que otorgarían recursos y obras a cambio de recibir los xalapeños suficiente agua, propósitos o compromisos, que siguen sin cumplirse. Obvio, Elizabeth Morales, justifica que otros quedaron a deber, no ella.
Pero a los xalapeños no faltará el agua potable, por más que sus adversarios digan que tampoco saben dónde están los tanques almacenadores del vital líquido, amén de que se cuestione seriamente, hasta cuándo Xalapa tendrá sus propias afluentes y que le sirvan realmente con el flujo del vital líquido a todos los hogares capitalinos, sin que la autoridad tenga que imponer más pretextos y señalamientos a ex alcaldes.
Obviamente, hay quienes en Palacio Municipal, aseguran que existen rezagos ancestrales y que se deben a ex ediles de hace 20 y 30 años cuando menos. Y es que finalmente, ninguno, cubrió la ruta completa de sus ofrecimientos hechos en campaña, a propósito de giras electorales y algo más. Ahora salen a relucir los trapitos al sol, de ex munícipes, que en sus informes dijeron que hicieron, pero una comuna más emite severos cuestionamientos, por lo incumplido que4 pasaron por las trincheras del poder municipal.
EfACICO 