Benedicto XVI está preocupado por el daño al planeta. Prueba de ello son los paneles solares instalados en tres zonas del Vaticano. La más importante en extensión es la del tejado del Aula Pablo VI que ocupa 1700 metros cuadrados, produce tres tipos de energía: térmica, eléctrica y frigorífica, es decir sirven tanto para producir luz como para calentar y enfriar. Hoy, el primer Papamóvil eléctrico, creado para los desplazamientos del Papa en su residencia de verano; es de color blanco y muestra el blasón pontificio en las puertas. El vehículo marca Renault mide 4,6 m de longitud y 1,8 m de anchura, propulsado por un motor eléctrico y batería de litio.
Las salinas de la Argentina, Bolivia y Chile, tienen el 85 por ciento de las reservas mundiales del mineral y conforman un triángulo que la revista Forbes denominó la “Arabia Saudita” del litio”. Una nueva revolución industrial en el mundo. El seguro fin de las reservas fósiles por su uso nocivo y el impacto al ambiente Por eso las fuentes alternativas de energía podrían ser sucesoras del petróleo.
Desde pilas y baterías hasta cerámicas y medicina, el mineral está presente en la vida cotidiana, tal como el combustible negro a través de los plásticos. Y aunque todavía no alcanza el techo de sus posibilidades, se anticipa el boom comercial que vivirá de la mano de autos híbridos y eléctricos, que usan baterías de litio.
La Iglesia católica católica piensa en las energías renovables, pero también en sus mensajes sobre la destrucción medioambiental, considera un «insulto a Dios», aunque hay grados: «Tirar una bolsa de basura por la calle es pecado venial, pero quien destruye la Amazonía comete un pecado grave. «Destruir el gran pulmón verde que es la Amazonía es dañar a toda la humanidad y no sólo a las poblaciones autóctonas», explica el Presidente del Pontificio Consejo de Justicia y Paz, cardenal Renato Raffaele Martino.
Periodista y Docente de Desarrollo Sustentable
EfACICO 