* PRÓXIMOS EDILES,
POR ENRIQUECIMIENTO
Quien lo dice es Tomás Montoya Pereyra, quien ya fue alcalde de su natal Catemaco, la tierra de los caciques que todos conocen y lo sabe bien, que los aspirantes o muchos de ellos a las alcaldías municipales del próximo año 2013 lo hacen presumiendo en que se harán ricos, que comprarán propiedades, construirán fastuosas residencias y le darán amplio juego a sus vicios y adicciones y hasta sus desviaciones personales.
La frivolidad es fiel compañera de los muchos alcaldes de estreno, que olvidan para qué fueron elegidos.
Las superficialidades suelen incurrir en la personalidad de la mayoría de estos ediles. Los cuales, cuando ingresan a los palacios municipales, olvidan promesas y compromisos contraídos con sus electores, en sus recorridos preelectorales para dar rienda suelta a sus ambiciones personales, de sus familiares y los bandoleros políticos enlistados en sus pandillas.
Olvidan estos alcaldes de estreno, que fueron elegidos para servir, y no servirse de los cargos que ostentan.
La mayor parte de los aspirantes a alcaldes, jamás ofertan un plan de trabajo, un proyecto que salve a las municipalidades que quieren gobernar y menos, se ocupan de presumir, que la honestidad va a ser el sello que impondrán a sus quehaceres consistentes en servir a los demás. Inmediatamente, soslayan el trabajo que tienen comprometido con sus electores y simpatizantes.
Tomás Montoya Pereyra sabe lo que dice. Hoy es diputado ante la cámara local de padres conscriptos, y conoce de sobra a los pillos que suspiran por una alcaldía con el solo afán de robarle a sus congéneres los recursos que se deben aplicar en beneficio material, social y económico de las comunidades hoy por hoy, hundidas en la desesperanza, en el olvido y el rezago en todos sus órdenes.
Empero, lo mismo ocurre cada tres años y que se sepa jamás ha ido más allá, que en el llamado de atención, la amonestación grosera exhibiendo con voces tronantes de los diputados, sobre la persona de alcaldes ladrones, empero, a la postre aquí nada pasa y todo pasa. Los alcaldes que entren en 2013, por mayoría son iguales que los que se encuentran de turno y los que ya se fueron. Bueno sería saberlo.
* LIDERES PARA
LA ETERNIDAD
Nadie entiende a este país, que clama y se bambolea diciéndose que su máxima aspiración es convivir en la democracia.
Cómo no darle la razón al escritor Mario Vargas Llosa, cuando definió al sistema político mexicano de ser una dictadura perfecta. No la regó, dijo una verdad que los personajes del viejo régimen, tuvieron que atragantarse, pero jamás siquiera mostraron algún estertor que los pusiera en riesgo de perder la salud o la propia vida.
La dictadura mencionada por Vargas Llosa, se sustentaba obviamente en que México al igual que los demócratas yanquis o parisinos, tenían su administración pública con los tres poderes estatales y un sistema de partidos políticos, con un juego político que alcanzaría hasta los dirigentes gremiales, representados por los campesinos, los obreros y los hombres del sector popular.
Una trama perfecta, ciertamente a la que difundían todas sus loas los medios informativos de rigor, pero los televisivos, haciéndola de educadores y patrones de la sociedad azteca.
Sin embargo, a la distancia de los 71 años bajo el régimen priista y doce años más correspondientes al panismo, la cuestión sindical continúa navegando en medio de la opacidad, la no transparencia ni democracia sindical, no obstante que teniendo su conducción Fidel Velázquez y los siete lobitos, el gremio de trabajadores no obstaculizó, si ayudó a la causa del gobierno.
Sin embargo, el poderío de los gremios magisterial y el petrolero, ha sido confirmado con la elección de Elba Esther Gordillo y Carlos Romero Deschamps, a los cuales la sociedad primeramente no acepta, los detesta, más aún, porque han liquidado las sanas aspiraciones de trabajadores, por una limpia en la educación por un lado y que el rico filón que representa la explotación del oro negro, sea, como lo pregonan los políticos, una industria de los mexicanos, no de las siglas y menos aún de los amos, dueños o regenteadores, como usted los quiera llamar.
La eternización de líderes, con un gran poder real en sus bolsillos, se confirma de esta forma, aquí las cosas se hacen como siempre o igual que hace más de cincuenta años.
Cierto, por un lado, pese a quien le pese, Elba Esther y Carlos Romero son los dos poderosos soportes en los que igual, descansa y ha descansado el viejo y nuevo régimen, amén de que la maestra Elba Esther ya mandó su misiva al presidente electo, cuando le dice que «aquí no va a entrar nadie más que yo», en clara alusión a la sigla de propiedad del SNTE.
* ¿REENCARPETADO
O RELLENO DE BACHES?
Hay los expertos que sugieren el reencarpetado completo, pero ya sobre la avenida Lázaro Cárdenas y el Circuito Presidentes, para empezar las dos arterias pública alternas, pero de ninguna forma, que se haga como se viene haciendo tapando baches, que con la caída de la más ligera lluvia, vuelven a aflorar en detrimento de los neumáticos de los automóviles y los caminantes, a tener que enfrentar una fractura, o simplemente un accidente que los lastime en sus tobillos, rodillas o piernas.
La declaración federal de la SCT, por voz de Basilio de la Vega, hizo ya el anuncio consistente en que a la rúa de Lázaro Cárdenas, construida durante el sexenio del gobernador Agustín Acosta Lagunes, se pavimentará con cemento hidráulico y que ya no será sometida a la grava con chapapote.
Lo cierto es que la arteria pública en mención, afronta un estado físico desastroso.
Todos los días, automovilistas hay que tienen que enfrentar el ponche de sus neumáticos, los golpes a la suspensión de automóviles y los daños que sufren en sus costados y portezuelas, al caer involuntariamente en los enormes y profundos baches, que existen a lo largo de la avenida mencionada que inicia en el vecino poblado de Banderilla y concluye en la congregación de Las Trancas.
El Circuito Presidentes, igual, enfrenta peligrosos baches y montículos de chapapote utilizado en la arteria pública, cuando se dio su edificación, ésta en el régimen de Dante Delgado Rannauro. Obviamente, en el resto de la ciudad, salvo tres o cuatro calles, los materiales utilizados en el asfaltado y pavimentación de sus calles, se han ido por la borda.
Avecindados en un centenar de avenidas y colonias que integran la ciudad, insisten en que los males que están padeciendo son mayúsculos, al grado de sugerir, que por encima del regalo de viandas con víveres, tejas, ventanas, sarapes y otros enseres de uso doméstico a los colonos, supuestamente pobres, los recursos habría que emplearlos de fondo a darle a la ciudad una imagen diferente.
Es menos que insoportable lo que está sucediendo a nuestra ciudad, fenómeno o imagen que se nutre con la cantidad de basuras regadas a los cuatro costados de la capital, el abandono con su recolección, los jardines convertidos en un cochinero y las calles sin alumbrado eléctrico.
Y si a ello le suma usted lo grotesco que resultan los operativos anti-borrachos de cada semana mediante el alcoholímetro, aseguran los católicos y feligreses a ultranza, que todos se encomienden a la Virgen de Guadalupe, porque las autoridades están difícilmente resueltas a concl
EfACICO 