* ENTRE PRECAMPAÑAS,
ALCALDES CON ADEUDOS
Será el ORFIS quien vaya a poner en manos de autoridades judiciales a los alcaldes que no puedan aún rendir cuentas claras, según cuentan los padres conscriptos que siguen sus causas y gobiernos al frente de numerosas de las municipalidades veracruzanas.
La comisión de vigilancia y seguimiento al trabajo público de los ediles, en lo que va del trienio, ha encontrado numerosas irregularidades.
No todo ha sido miel sobre hojuelas. Entre lo dicho por alcaldes y lo que hacen en muchos casos existen diferencias abismales y otras, que posiblemente puedan salvar los diles, colocados contra la pared.
Empero, la hora de las aclaraciones sigue pendiente de cuanto vaya a presumir en que hayan incurrido los alcaldes.
Se podrá advertir, que este cantar es de cada tres años y así es y ha sido.
Sin embargo, el sistema continúa solapando a los ediles que por ignorancia o demasiado conocimiento caen en la cuenta de ejercer el poder con una burda administración de los bienes públicos colocados en sus manos. Y por otro lado, la opacidad en el manejo del dinero que no es suyo, como la ausencia de transparencia, al no hacer la explicación de rigor a la falta de probidad con que han conducido sus naves respectivas políticas.
Rosario de problemas financieros y administrativos, que los alcaldes de turno, no han podido zanjar ni mucho menos avistarles la expectativa de una respuesta que satisfaga a sus gobernados, como también a los órganos fiscalizadores, que están a la espera de poder llamarlos a rendir cuentas.
Diputados locales, de paso andan en campaña y a la vez anunciando medidas coercitivas en detrimento de los muchos alcaldes veracruzanos que fallaron irremediablemente a sus representados, pero a los que finalmente nadie castigará ni hará algo, porque se justificará que las ineficacias, están ligadas al cuerpo de servidores públicos que los auxiliaron, especificarán el por qué del fracaso en el manejo de los recursos financieros depositados en sus arcas y no en sus bolsillos personales.
* OBAMA O ROMNEY,
ES LO DE MENOS
Es lo de menos quien vaya a ganar la presidencia de los Estados Unidos de Norteamérica.
Lo verdaderamente trascendente, es haber concurrido los ojos de todo el orbe a una elección diferente a las que está acostumbrada la sociedad humana, pero sobre todo la azteca, por cuanto al entusiasmo puesto en cada mitin, plantón y movilización de los candidatos; el discurso que encuentra credibilidad en los gringos güeros, negros y latinoamericanos; por supuesto, el jolgorio, la fiesta que entraña un proceso semejante solo sobre tierras estadunidenses.
Un conductor televisivo, de los que ya nadie quiere ver después del papel que jugó en la elección presidencial en turno, inclusive se atrevió a advertir que a diferencia del mexicano, el sistema de selección de presidente yanqui, es mucho menos confiable, que el azteca.
A contrario sensu, como dicen los abogados nadie que sepa duda que el proceso yanqui jamás ha sido objeto de ningún señalamiento, menos de que pueda darse la compra de votos, el fraude, la falta de credibilidad en su ejecución y que los muertos salgan de sus mausoleos y sufraguen en las ánforas preñadas.
La elección presidencial yanqui -nos guste o no-, es una lección que dura ya 200 años y ha podido mantener el sistema de vida público sólido, poderoso y por añadidura influyente en todo el planeta por espacio ya de dos centurias, permaneciendo inalterable. Lo debates se dieron con la máxima concurrencia. El discurso para lucir también fue la nota que distinguió a los expositores Romney el conservador y Obama el demócrata.
El remate de Obama, fue genial: venga quien venga, no importa su nombre; no importa su apellido, no importa quien sea, pero que llegue a América, puede aquí realizar su sueño. Y enseguida el aplauso de miles de palmas y el alarido de los estadunidenses de todos los colores y hasta de los latinoamericanos y particularmente los mexicanos, que ilegales o no, también se sumaron a esta fiesta la más importante para los yanquis, de cada cuatro años.
Y conste que ninguno de los dos tiradores a la Casa Blanca, Obama ni Romney expresaron en sus estruendosas campañas algo acerca de lo que harían para favorecer a México y los países enclavados en la América Latina, siendo el tío Sam el faro, la guía, que ha de dirigir en mucho sus futuras acciones, obedeciendo a los dictados de los poderes gringos. O acaso, ¿alguien lo pone en duda?
Empero, gane o pierda cualquiera de los dos, ante la panorámica mundial que exhibe el proceso en cuestión, y de que las cosas del imperio y su influencia no vayan a variar ni un ápice en su relación con el resto del orbe, como quiera, la nominación del huésped principal de la Casa Blanca, es todo un espectáculo de alegría, fiesta y democracia, porque sigue siendo la práctica norteamericana, la más apegada a los capítulos de la teoría política, que dictaron a la humanidad, sin duda, los padres del sistema, los filósofos griegos.
* HOSPITALES
SIN MÉDICOS
De nueva cuenta, el Hospital Civil «Dr. Luis F. Nachón», por voz de sus empleados encargados de dar entrada a los pacientes y enfermos para su hospitalización, asegura que no tiene los suficientes médicos y especialistas, y que debido a lo anterior se forman las colas diarias de solicitantes de atención, la que de negarse, en algunos ejemplos, puede colocarlos inclusive al borde de la muerte.
Margarito, es el nombre de un paciente sin mayores recursos en sus bolsillos fue llevado hace dos noches al nosocomio en mención, para pedirle su intervención inmediata.
Los dolores le acosaban ferozmente –advertía-, pero en la recepción del hospital, un empleado con rostro de pocos amigos, le espetaría textualmente que no había especialista para verle su problema del «estómago».
Tampoco le daban entrada, porque no cuenta con seguro ni con ISSSTE y la medicina del seguro popular allí no se le da a todos los que tocan a sus puertas. Obviamente, debía pagar una cuota -le llaman de recuperación- y al cabo de horas y horas de espera, su pareja, pudo conseguirla y hacer su depósito en el nosocomio.
Sin embargo, persistía como casi toda la noche con las decenas de pacientes que arriban y duermen en las afueras del Hospital Civil, para que las puertas se abran y les permitan la orientación del médico inexistente, o el especialista que tampoco lo hay y los sustitutos tampoco están.
Vale la pena que usted se dé una vueltecita por el entorno al Hospital Civil, para poder percatarse de la realidad que guardan esta clase de establecimientos, no obstante que la administración de gobierno en turno, asegura que dio todo para escuchar y ver por las instalaciones hospitalarias del país, al grado de que se luzca el régimen diciendo que no quedará ningún mexicano sin los servicios de médico y medicamentos.
Acaban de cesar a su director y de sancionar con días de descuentos salariales a quince médicos especialistas, así como de transferir a otra institución a don Félix, un galeno con quince años de ser jefe de una de las áreas que mayor atención merecen, pero de esto no dice algo la Secretaría de Salud.
El enredo y total desorganización en que se encuentra el nosocomio en cuestión, no concluye. Pero también por vez primera, aseguran subalternos de su organigrama, que el culpable no es Pablo Anaya, sino de quienes lo administran en la trinchera burocrática que representa el Sector Salud.
Dicho de otra forma, el grupo de poder en el SS, es el mismo que no paga sus percepciones salariales a los galenos y especialistas, que dejan de ser obedientes con sus acosos o simplemente, quienes se van al no encontrar ninguna expectativa de nada en el desarrollo de sus actividades profesionales, dentro de la actividad hospitalaria dependiente del mencionado Sector Salud.
EfACICO 