
* PRD-PAN, EL HUESO ES PRIMERO
Qué importancia han de tener las ideologías, cuando en todas las siglas partidarias se han registrado los chaqueteros y los vende patrias y por el otro lado, la perversidad y las ambiciones estrictamente personales de los políticos, los mueven a aceptar las más descabelladas posiciones y puestos de gobierno, en cualquiera de sus tres niveles burocráticos. Cuando se lee que finalmente los socios perredistas y panistas han coincidido en que sí irán aliados, porque así tendrán la expectativa de ganar alcaldías y curules de diputados, no queda más que aceptar que una gavilla de oportunistas, estarán al asalto de las ubres del erario público, no importa cómo. La burla al electorado es mayúscula, empero para fortuna de ésta, las mayorías suelen mostrarse ajenas a las cuestiones partidarias. En México, no estamos en Brasil, en Venezuela o Bolivia, donde la ideología, están muy claras y sus seguidores, son capaces que en aras de sus colores y formas de pensar, han aceptado por caso ser gobernados por un Hugo Chávez de cartón en Venezuela. En México, el común de los ciudadanos, no cree ni confían en siglas partidarias. Las avista como agencias de colocaciones políticas, muy caras por cierto, pero que no le irradian ni contagian de ningún entusiasmo por militar, simpatizar o sufragar a favor de uno u otro de sus candidatos. Juntar a socios perredistas con panistas, es como meter en una olla de grillos a tarántulas, colibríes y serpientes. Sencillamente es imposible, aunque obviamente, la capacidad de asombro de los mexicanos ha sido plenamente demostrada, que está rebasada. Así que junto con este maridaje que mantuvieron antes PRI y PAN en la sucesión presidencial, ahora pasará de PAN a PRD, no se entiende por qué tanta alharaca y jiribilla entre militantes y políticos del viejo régimen, cuando ellos, de siempre han mantenido un amasiato por caso con el Verde Ecologista de México y nadie objeta ni dice algo. Lo real viene cuando los electores inclinan la balanza, en favor del hombre no la sigla partidaria. Y que en la sucesión de alcaldes y diputados locales, bien podría dar al traste con todo y las alianzas que tantos dolores de cabeza causan desde ahora a connotados priistas, sobre todo. Al tiempo.
* LA ORDUÑA SE ESTÁ MURIENDO
La Orduña es una congregación que alguna vez lució rica, espléndida, donde cientos de miles de trabajadores vivieron y ejercieron sus ocupación laboral con la obtención de dividendos suficientes para hacer familias felices, sin tener necesidad de salir de la comunidad en la que nacieron, al grado de que su vecina ciudad de Coatepec la avistaban lejana, solo para ir los días domingo. Hace cien años, la Orduña generaba una riqueza sin igual en la región. Se cultivaban interminables hectáreas del aromático grano, las frutas como el mango, la naranja china, lo que derivó en la apertura de un consorcio empresarial que se denominó bajo el titulo de Productos Industrializados y la planta elaboradora del refresco misión. También allí se asentaron las oficinas centrales de la compañía productora de leche pasteurizada Nestlé. Y en la carretera de espaldas a la Orduña, se localiza la planta que elabora el famoso refresco de cola, con la aparente producción de siempre, desde que abandonó Xalapa y pasó a Coatepec o la Orduña, para estar más cerca de los caudales de agua del río que bajan por dicha zona. El poblado tiene dos entradas: una partiendo de la carretera nueva entre Coatepec y Xalapa y la otra sobre la carretera que viene de Jalcomulco y un ramal de poblados grandes y chicos, que lindan con Veracruz, yendo por las Trancas o la rúa que lleva a Orizaba y Córdoba, en la zona centro del estado. En su centro, el edificio de La Hacienda, con que nació precisamente la Orduña, donde concluye el recorrido de al menos tres o cuatro kilómetros de terracería, que anteriormente fue una carretera de cemento hidráulico, hoy venida a menos. En el enorme edificio de la Hacienda, la cual habitaron hace poco menos de 50 años tres familias, se cuenta, las cuales contaban con todos los servicios que gozaban precisamente los hacendados. Trabajadores de campo, mozos de la casa grande; los señores y las señoras, las hijas soberbias y los muchachos jugadores en las mesas de billar y los tres pisos cubiertos por una exuberante vegetación, de cuyos rastros todavía quedan algunos vestigios. Se cuenta entre los lugareños, que la Hacienda fue comprada por alguna institución de gobierno, pero no se confirmó, lo que se sabe es que permanece dicha edificación muda, solitaria y en el corazón del poblado. Empero, a sus alrededores queda el recuerdo de las tantas bodegas vacías, que alguna vez almacenaron cantidades industriales de granos de café. Los habitantes del poblado, construyeron una fila de casas de concreto con el paso de los años en torno al parque de recreo y recogimiento familiar los domingos sobre todo, dentro un cuadro de cuatro costados, algunos árboles, banquitas de fierro y el kiosco en su centro. Empero, ahora la pobreza gobierna y la basura aparece por todos lados en costales, bolsas de plástico y cajas de cartón. Los hedores que despiden son pestilentes y millones de moscas hacen su aparición en franco atentado contra la salud humana. La salida por el «puente» de quince metros de largo y construido a base de piedra azul y por debajo corriendo una escasa corriente de agua, que alguna vez subió y rebasó dicha construcción, le lleva a cualquiera al campo de juego del beisbol, que se practica semanalmente y que a su vez, enlaza a la rúa con rumbo a la tierra de la poetisa María Enriqueta.
* OLVIDO DE CALDERÓN, LO VERA OSORIO CHONG
Un país que se precia de ser demócrata, tiene que dar plena satisfacción a sus ciudadanos de cada uno de los renglones que tienen que ver con el habitar y convivencia de los mexicanos, en cualquiera de sus puntos. Se fue Felipe Calderón y hasta consiguió su entrada a la universidad de Harvard, aunque de entrada también hay un severo cuestionamiento en torno a su nombramiento como académico, en una de las casas de estudio más prestigiosas del mundo cultural y académico del mundo. El señor Miguel Angel Osorio Chong, ha estado recibiendo una demanda muy sentida, en el sentido de localizar a los desaparecidos de este país, fenómeno que cobra relevancia en toda la nación azteca, aunque existen las entidades, donde el problema es mayúsculo. México afronta uno de los más severos casos de desaparecidos y de los cuales nadie absolutamente dice algo, siendo que el grueso de la sociedad, tiene respeto a saber dónde está cada uno de los desparecidos, si están muertos, vivos, asesinados, sepultados o como se dice en entidades como Chihuahua y Sinaloa, que hay una trata de blancas que dejó sin hijas a muchos hogares aztecas. El secretario de gobernación ha dicho que gobierno federal buscará a todos los desaparecidos. Enhorabuena y su subsecretaria de asuntos jurídicos y derechos humanos Lía Limón, acaba de anunciar que está en la creación de una línea para atender y atacar de raíz este asunto, el cual, a la distancia, habrá de poner en claro no pocas de las dudas que los mexicanos quedaron sin conocer, porque las instancias del poder público central se cerraron los últimos seis años. No obstante que la criminalidad alcanzó la cifra récord de los ochenta mil muertos de manera violenta, amén de los miles de desaparecidos y de los cuales, el ex presidente Calderón jamás rindió cuenta alguna, como tampoco dejó su régimen, el resultado de las indagatorias en relación al destino que siguieron tales víctimas como fueron los desaparecidos. Inclusive en algunos casos, los avances que se conocen en la investigación de sonados ejemplos, se deben a la participación personal de los familiares de las personas desaparecidas y en muchos casos ejecutadas.
| Raúl González Rivera | |
