
Piense por un momento qué podría comprar con 1.25 dólar al día. Bueno, pues en los alimentos que Usted imaginó son los que podría comprar una persona en pobreza extrema habitante de cualquier país de la África Subsahariana o Haití. Pero no hay que espantarnos; aquí en México también hay comunidades en donde tal vez no se hagan galletas de arcilla pero si la situación es muy similar a la de aquellas zonas del mundo.
Pese a los recursos públicos invertidos para combatir la pobreza de los mexicanos en circunstancia extrema crecieron de 11.7 millones en 2010 a 13 millones en 2012, de acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Población (Conapo)
Las poblaciones con mayor pobreza extrema están en Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Tabasco y Durango y que condensan superior cuota de indígenas También Tamaulipas suma a la cuenta 185 mil (SEDESOL). Triste panorama, observar como engrosó la cifra de personas que recorren las colonias husmeando en los basureros por desechos que les sirva, ya no solo cartón o vidrio para vender, sino así mismo escudriñando en busca de comida.
El Banco Mundial promueve para poder eliminar la pobreza extrema: inversión en agricultura, ampliación de las redes de protección social, aumento de los programas de nutrición orientados a niños menores de 2 años, otorgamiento del acceso universal a la educación, promoción de la igualdad de género. Infortunado, México en donde para comenzar la agricultura ha ido perdiéndose.
¿De los 6 billones de pesos invertidos en el sexenio pasado, cómo se distribuyó el dinero en los programas Oportunidades, Apoyo alimentario y 70 y más, que no fueron suficientes para lejos de disminuir los índices de pobreza extrema los dejaron incrementados?
En fin, borrón y cuenta nueva. Hoy el Presidente Enrique Peña Nieto, anuncia sus estrategias y seguramente vendrán más créditos del Banco Mundial. ¡Espera lo mejor! reza el eslogan del actual gobierno.
Periodista y Docente de Desarrollo Sustentable
