El Reporte del Cóndor: ¿Quién juega al ajedrez en Veracruz?

Para uno de los analistas mas avezados del estado de Veracruz, hoy en la banca, en los acontecimientos más recientes en cuanto a movimientos y nombramientos en puestos políticos, vinculados al gobierno de Veracruz, no es tan creíble la pretendida explicación de que todo obedece a decisiones tomadas por la alta estima que pudiera tener nuestro gobernante en círculos de alto poder nacional. Si es así, que bueno, pero hay incongruencias o especulaciones posibles que mas cuadran lógicamente en  los movimientos .

Primera. ¿Por qué habría de promover el gobernador Duarte a quienes, en su momento, le pusieron piedritas en su camino a la candidatura a gobernador, hace dos años, como es el caso de Ranulfo Márquez y Antonio Benítez Lucho? ¿Cuál sería el beneficio, fuera de la actitud franciscana de perdonar dando bien por mal, en tales nombramientos como para posicionarlos en puestos claves del futuro porvenir?

Segunda. Si somos sinceros, es más una deferencia a Fidel Herrera Beltrán, quien en su caso parecería tuvo más oportunidad de aportar una opinión favorable o una  propuesta directa ante quien decidió los nombramientos. Pero ello también conlleva a la pregunta:¿Por qué si el fidelismo parecía ser condenado a la marginación en el inicio del nuevo gobierno federal, ahora recibe una oxigenación clave previa al periodo de elecciones? Todo parece indicar que  pesa, en el altiplano, más lo que está relacionado con Fidel que lo que importe al gobernador Javier Duarte.

Tercera. El nombramiento de Fidel Herrera Beltrán como embajador en las antípodas de América confirmará que quien pesa más en el ánimo del altiplano federal es el ex gobernante jarocho, tanto, que lo van a poner a flotar lejos, muy lejos de las próximas contiendas municipales. Pero visto de manera alegórica, todo ello parecen jugadas de ajedrez, o por decir, lo menos, movimientos estratégicos para depurar caminos para alguien.

Cuarta. Tampoco el nombramiento de Héctor Yunes Landa como delegado en Baja California debe soslayarse como parte de estas jugadas de inicio de año. Simplemente lo están apartando de un territorio en el que su activismo lo estaba convirtiendo en pieza protagónica en las aspiraciones de numerosos ciudadanos que quieren ser diputados y alcaldes este año. Y, ahí está más claro, es para irlo apartando de ese sueño guajiro de ser gobernador del estado y quitarle el síndrome mesiánico que hizo posible que Fidel Herrera fuera gobernador, gracias a ese activismo que desplegó entre los años 1999 y 2004, cuando era senador de la república.

Ligados estos 4 hechos con la suposición de que hay una estrategia evidente de limpiar el territorio para lo que viene más adelante, en el año 2016, uno se preguntaría: ¿Es que le están limpiando desde el plano federal el territorio para que no le hagan sombra política a Javier Duarte de Ochoa y pueda así, cómodamente, promover e inclinar la balanza de la selección del candidato tricolor a gobernador a favor de algunos de sus cuates -Alberto Silva, por ejemplo-. ¿De ese tamaño es el giro que da la rueda de la fortuna política y el reconocimiento a su talento que el grupo Atlacomulco evidencia con estas acciones?

¿O para limpiarle el camino a José Yunes Zorrilla, cuyo mérito que le cuelgan es ser muy amigo de Luis Videgaray, el hombre fuerte de la estrategia económica  nacional?  Otro sueño guajiro, porque en la política nacional, que regresa hoy a los tiempos del presidencialismo mas fuerte, es un axioma irrefutable que el mayor mérito de todos para obtener un cargo de alto rango como el de gobernador, es el de ser amigo del presidente de la república, y Luis Videgaray, con todo y su poder, simplemente no lo es.

Aqui en Veracruz se está dando una estrategia de movimientos que ya se estiló en otro sexenio de manera muy clara para poner a los políticos estorbosos más allá de las fronteras nacionales. Es una especie de premio y castigo, aunque también en ese sexenio se estiló otra estrategia: la de crimen y castigo.

Estrategia que no solo se aplica en Veracruz, pues ya Beatriz Paredes fue la la primera defenestrada del nuevo gobierno federal, más como castigo que como premio. En tanto que, si se da,  más como premio que como castigo se va a ir Lázaro Cárdenas Batel rumbo a Cuba. Y, de darse el movimiento en estos días, ni como premio ni como castigo, sino todo lo contrario, se iria Fidel de embajador hacia el sur.

¿Qué mano experta en ese tipo de jugadas está moviendo las piezas en Veracruz? ¿Quién tiene un cuasicandidato a gobernador de Veracruz que le conviene ir limpiando el territorio de otras aspiraciones? Vamos, quien puede ser más diablo que Fidel, como para convencerlo que su lugar está en la diplomacia y no en el rejuego del poder que viene, en las próximas elecciones, donde tendría oportunidad de enfrentarse nuevamente a su archienemigo, Miguel Yunes Linares, y de conservar, si ganara la mayoría de alcaldías y las diputaciones, el poder político soterrado que aún tiene en Veracruz el cuenqueño.

Po cierto, ido Fidel, otro ganón es Miguel Angel Yunes porque llegaría terso a la diputación plurinominal y con varias alcaldías ganadas por el PAN, porque él sería otro diablo contra el que tampoco podrían luchar los duartistas. Solo que este diablo, al igual que el diablo de Fidel, es más seguro que pronto, también   se sometería al diablo mayor que está metiendo las manos en Veracruz.

Y como se trata de un asunto de diablos, ahora si solo agregaríamos la frase  que dice: «quien tenga entendimiento, piense, y podrá recordar el nombre de ese diablo mayor»