
*¿Quiénes son los dueños?
*Cinco titulares en SESVER y silencio
PASAMANO: el segundo secretario de Salud de Veracruz, Juan Antonio Nemi Dib, ha anunciado el inicio del fin de la relación con la empresa Finamed, que desde el mes de enero de 2009 ha abastecido de servicios médicos a 11 hospitales públicos de norte a sur de la entidad… Se trata de una medida firme, luego de que, háganos favor, casi cuatro años y medio después han descubierto que Finamed significaba un daño para la vida de los enfermos pobres y menesterosos de la tierra jarocha… Y no obstante, y por alguna razón poderosa, Nemi Dib, el Contralor Iván López y la Secretaría de Finanzas y Planeación se empeñan en el mismo objetivo: seguir ocultando para los casi ocho millones de veracruzanos la identidad de los dueños de Finamed… Y más porque por la relación de Finamed con la SESVER pasaron los secretarios Manuel Lila de Arce, Fernando Antigas Tinoco y Pablo Anaya Rivera, y todos sabían y sabe el nombre de los propietarios, cuya cabeza visible es la representante legal Margarita Campos Castañeda… Peor tantito, en el pasillo de los hospitales, y también en los espacios mediáticos, se ha presumido que entre los dueños están la profesora Elba Esther Gordillo, encarcelada por Enrique Peña Nieto por oponerse a la reforma educativa… Y también, gente allegada al gobernador Fidel Herrera… Incluso, en la última hora alguna mano que mece la cuna ha filtrado que un hijo del góber fogoso es el mero mero… En respuesta, y cuando el dato fuera publicado en la columna periodística “Bajo reserva” de El Universal, el exgobernador envió una aclaración, deslindándose de su participación y/o de su gente… El caso es que la política comunicativa del sexenio próspero ha vuelto más confusa y turbulenta la identidad de Finamed, incluso, la ha llevado al tapete del misterio y. por tanto, de la suspicacia y la perspicacia…
BALAUSTRADAS: veremos hasta dónde llega el asunto, si es que, claro, como se espera, llega… Pero el simple hecho de que atrás de la representante legal que aparece en nombre de Finamed, todo indica que hay grandes intereses políticos y económicos, pues el contrato significaba 11 años ininterrumpidos, hasta el gobernador que asumirá el cargo en el año 2016… Y, caray, de por medio contemplaba el pago de casi 5,500 millones de pesos, todo, con cargo al erario público… Y en consecuencia, tratándose de dinero oficial, captado con el pago del impuesto del contribuyente, y el hecho de que el secretario de Salud siga encubriendo la identidad de los dueños de Finamed, desmerece la gran medida que ha tomado, por supuesto, con autorización del gobernador, pues ni modo que se trate de una medida sin consultar… Además, resulta coincidente que el asunto Finamed haya sido asumido cuando en Veracruz el mapachaje electoral de los recursos federales de la Secretaría de Desarrollo Social, delegación federal, originara que la secretario Rosario Robles Berlanga ordenara el cese de siete funcionarios, encabezados por Ranulfo Márquez Hernández, doctorado en artes electorales en el país y en la tierra jarocha… Quizá, como parece, pudo tratarse de un gran distractor, aun cuando el escándalo ha alcanzado el altiplano donde Rosario Robles en el Senado ha sido categórica: “No tengo por qué renunciar. Yo nunca nombré a los delegados en Veracruz”… Y cuando, de paso, y como observa el politólogo Carlos Ernesto Ronzón Verónica, el Pacto México ha sido puesto en peligro, pues el PAN ya se retiró de la mesa y hasta la reforma fiscal fue detenida, además de que todavía hay pendientes de la reforma educativa, como por ejemplo, el Instituto de Evaluación…
ESCALERAS: con todo, un hecho, una circunstancia, un asunto, significa el caso Finamed, y otro, diferente, el mapachaje de los recursos federales en la SEDESOL Veracruz… Es más, el caso Finamed puede entramparse y salirse de control a la SESVER porque estamos de cara a la elección de alcaldes y diputados locales… Y si se trata con menosprecio y soberbia la rendición de cuentas sobre los dueños, entonces, nada fácil sería que los candidatos de la oposición la tomaran como bandera electoral… Y si el titular de SESVER y compañía evaden y soslayan quitar la máscara, entonces, estarán bajo sospecha de encubrir a alguien poderoso, y en todo caso, a varios magnates económicos, políticos y sociales… Ya de por sí, en el año 2008, el Congreso jarocho, encabezado por Héctor Yunes Landa, ahora senador, con Luz Carolina Gudiño Corro como líder parlamentaria, quedaron bajo sospecha por suscribir fast track el caso Finamed, sin exigir a cambio, y de acuerdo con su trabajo legislativo, cuentas claras… Algo grueso, pues, está atrás de la evasión informativa, del encubrimiento y de la complicidad… Los hilos de Finamed parecen siniestros, atrás del billete fácil, incluido el tráfico de influencias…
