* HOSPITALES Y CLÍNICAS,
PUROS CASCARONES
Lo que se temía acaba de suceder, don Juan Antonio Nemi Dib acaba de anunciar la mayor convocatoria a médicos especialistas del país para que vengan a ocupar las plazas de hospitales de la secretaría de Salud, que en condiciones difíciles dejó precisamente la administración de Pablo Anaya Rivera.
Se trata de poco más de 800 espacios que estarán disponibles en los nosocomios de Xalapa, Veracruz, Boca del Río, Coatzacoalcos y otras partes de la entidad veracruzana.
Con esto, si se hace tal invitación, Veracruz podría pasar al libro de los récords, porque igual, el problema evidencia que la salud pública por vez primera sería un motivo de especial atención.
Los hospitales públicos de Veracruz han adolecido de todas las fallas y necesidades insatisfechas de laboratorios, quirófanos, cuartos, camas suficientes y otras exigencias más, como es el hecho de que hay escasez de médicos especialistas en las diferentes áreas de la propia medicina y cuando han estado, como fue bajo la administración de Pablo Anaya, les dejó de pagar sus percepciones salariales.
La desatención en numerosas ocasiones, que han destinado los nosocomios hacia sus clientelas y pacientes, ha sido lo mismo en el Centro de Especialidades Médicas o en el Hospital Civil, en donde hay pacientes que deben esperar hasta seis meses para ser sometidos a la intervención quirúrgica que los médicos le diagnosticaron.
O como en el caso del Cecan, donde sólo había un neumólogo, con especialidad cursada en España, y quien puso a trabajar el broncoscopio adquirido durante el sexenio de Miguel Alemán Velasco, y pasó en bodegas seis años, que puso a funcionar a favor de centenares de pacientes, pero como el sector no pagaba salarios al médico neumólogo, éste optó por renunciar a sus instalaciones.
Y como en estos ejemplos, la salud pública en Veracruz finalmente arroja que sea primero, nacionalmente, con enfermos de diabetes, sida y tuberculosis. Tan sólo, porque la escasez de especialistas en nuestros nosocomios es una realidad que lacera la sensibilidad de la ciudadanía que paga puntualmente sus contribuciones fiscales.
* PLEITO POR 804
PESOS CON SLIM
En lo que podría ser un pleito a semejanza de los que épicamente representaron David y Goliat, está por caer un reclamo del prestador de servicios telefónicos, los más caros que existen en el mundo, y un consumidor al que pretenden esquilmarle 804 pesos en números redondos.
Bajo el número de expediente PFC.XAL B 3/000333-2013, radicado en oficinas de la Profeco local y que documenta una queja de usuario o consumidor de los servicios telefónicos de la empresa propiedad del hombre más rico del mundo, quien a fuerzas está requiriendo un pago que no adeuda el usuario –lo admite la propia empresa de Carlos Slim–, de 804 pesos y centavos.
Todo comienza, narra en su exposición de motivos la queja del consumidor, en que sin mediar escrito, convenio o contrato, conforme a la norma jurídica, en febrero pasado la empresa del todopoderoso Carlos Slim, que impone en su recibo de consumos mensuales el cobro arbitrario de 800 pesos y centavos, aduciendo que por un «error de la institución bancaria Banamex», esta última hizo un depósito duplicado del pago cubierto por su natural adeudo mensual, el usuario de rigor.
Pero ya transcurrió una primera audiencia y quedó demostrado que una institución bancaria cometió el error al pagar un servicio que nadie contrató con Telmex, pero que insiste esta última firma –propiedad del hombre que percibe algo así como 16 mil millones de pesos mensuales de ganancias, por el centenar de empresas que explota dentro y fuera del país–, en cobrarle al usuario 800 pesos y centavos.
En una segunda audiencia se ratifican las posturas de Carlos Slim y del usuario, además de pedir la representación de la telefónica Telmex que el asunto pase a manos de la Condusef, cosa que legalmente no puede ocurrir, porque está dejando de percibir sus 800 pesos y centavos. El usuario demanda que sea la Profeco quien rinda su fallo en su favor, porque como queda demostrado con los escritos de reconocimiento de Telmex, aquél no adeuda absolutamente ningún peso.
Obviamente, el temor aflora en algunos de los empleados menores de la Profeco, a tener que enfrentar la furia del millonario, así que tratan de librar su nombre tratando de cerrar la instancia a la defensa del consumidor de servicios telefónicos.
El asunto pareciera más un chisme quintopatiero, donde el hombre más rico del planeta tierra, a toda costa quiere 800 pesos que no le adeuda el consumidor, pero que aquél no se atreve a pedírselos a la firma bancaria metida en este mole, porque allí mismo, en la Profeco, alguien dijo que es posible que ese banco también sea de Slim.
La resolución o dictamen que vaya a dictar la Profeco, pareciera ser de pronóstico reservado. Esperemos a que llegue, se dijo, en cuestión de dos semanas. David y Goliat, están a salvar, el primero, que no le quiten injustamente 800 pesos, y Goliat, a querérselos quitar con todo su poder, que seguramente es inmenso; y un tercero, una sigla, que por un acto de corrupción ya vio caer a un procurador, ahora a ver quién sigue.
* ALBERTO POZOS,
ESTÁ TRANQUILO
Acaba de anunciar Orfis que denunciará penalmente a cinco o seis alcaldes municipales por daño patrimonial y desviar recursos públicos hacia rubros que nada tienen que ver con la obra pública y el desarrollo humano y social de la comunidad.
Entre éstos, y de hace algún tiempo a la fecha, al menos para los chicos de la prensa, también Alberto Pozos Guzmán aparece en esa lista negra, porque su problema financiero alcanza algo así como los 80 millones de pesos.
El munícipe de Xico transformó obviamente la imagen citadina del lugar.
No hay viajero del interior del estado o el extranjero que ignore las riquezas naturales, el sabor de sus comidas y el folclore que se refleja en sus vestidos, tradiciones y religiosa asistencia a los eventos que históricamente suscriben la vida diaria de los avecindados en el también llamado pueblo mágico.
Sin embargo, Orfis, desde hace algunos meses viene señalando con singular índice al ayuntamiento que encabeza Pozos Guzmán, de cometer delitos que afectan el patrimonio de la localidad.
Entre las transformaciones conseguidas por el munícipe, está la entrada al poblado con pavimento hidráulico, el remozamiento de fachadas y calles y avenidas de la ciudad, el arreglo del parque del lugar, la apertura de un café-restaurante sobre la explanada del lugar de recreo y sano esparcimiento de la población civil.
La plaza comercial de Wal-Mart le trajo al alcalde un conflicto que tuvo unos meses de duración, pero finalmente demostró que no hace competencia desleal al resto de comerciantes y, por otro lado, le dio el realce de municipalidad con desarrollo económico, ya que arriban al lugar numerosos consumidores de cuando menos una docena de comunidades aledañas a esta región xiqueña.
Por su lado, el alcalde Alberto Pozos Guzmán, que fue primero priista, luego panista, bandera con la que ganó elecciones, siendo que como socio del membrete tricolor jamás obtuvo triunfo alguno en más de 30 años de militar en sus filas.
Tranquilo, como dice estar, cuenta con la papelería y documentos que lo eximen de haber cometido alguna transa con los recursos públicos del ayuntamiento de Xico, empero, por ahora deberá alistarse para responder a los señalamientos del Orfis, que por cierto había guardado silencio mucho tiempo y en el segundo caso, que sabrá comparecer y tratar de salir airoso de esta nueva fase del encono contra ediles, que como es su caso, milita en la oposición al PRI.
EfACICO 