* DEBATE ENTRE
CANDIDATOS
Los xalapeños, como el grueso de mexicanos, quieren escuchar de sus políticos no el discurso o la declaración periodística boletinada que nadie lee, así que la invitación que hace Dulce Dauzón a sus contrapartes deben considerarla y llevarla a cabo, por bien del juego democrático y los futuros gobernados de quien obtenga la victoria electoral.
El hartazgo popular no encuentra semejanzas.
Cada tres años se dice lo mismo, los políticos prometen y comprometen, lo que en mucho a la hora de la verdad no cumplen. Cuando concluyen sus gestiones, difícilmente alguien quiere volver a verlos. Se trata de la respuesta ad-hoc con el importa-madrismo, que los aspirantes a cargos públicos denotan cuando de pedirle cuentas se trata.
La abanderada del Movimiento Ciudadano entraña respeto y consideración. Acaba de denunciar la afectación que algunos pillines, metidos en la máscara de la noche, sin vigilancia, para causar daños a su propaganda política.
No importa cuántos vayan a ser los aspirantes a la presidencia municipal de Xalapa, la necesidad popular encuentra puntos de convergencia, en el sentido de saber a ciencia cierta qué harán los políticos una vez que culminen su campaña y ganen la votación que lo encumbre en la silla de presidente municipal.
Y en este sentido, lo más encomiable es que los tiradores a la silla presidencial, Dulce Dauzón, Américo Zúñiga, Cuevas Melo y Marcos Salas, en principio, quienes aparecen en la primera escena como candidatos de partidos políticos consagrados aparentemente, luego entonces, la invitación al debate es un compromiso que más obliga.
Un boletín de prensa, no dice algo. Y en momentos de abundantes contenidos en las redes sociales, al común lo que importa es que les digan de viva voz qué harán los hombres y mujeres si ostentan la estafeta del poder municipal, los próximos tres años.
El diálogo directo, la palabra que va de hueca a realista, la voz y dueño de ésta que mejor programe lo que va a tratar de construir como agenda de su cometido a favor de la capital del estado, tienen una importancia capital, cobran el efecto que los propios políticos pretenden encontrar en esta justa, que nadie duda será a morir, si se lleva a cabo con la transparencia a que se comprometieron los membretes partidarios, al firmar el famoso pacto por la civilidad. Al tiempo.
* CUANDO POLÍTICOS
ROBABAN MÁS
Antes los políticos robaban más y no había contralorías.
Este es el sentir de la sociedad civil, al hacer un balance de cuanto ha ocurrido en las últimas horas allá en Villahermosa, Tabasco, donde su ex gobernador Andrés Granier Melo estaría por enfrentar un serio cuestionamiento de parte de fiscales tanto de la procuración de justicia, como de orden financiero.
Tal es el grado de la barbarie cometida con los fondos públicos en la mencionada entidad, que el gobierno estatal se ha visto comprometido a girar los citatorios de rigor tanto para el ex gobernador, su ex secretario de finanzas y varios colaboradores más, amén de referirse reiterativamente que si hubo montaje, salió perfecto, que el propio Manlio Fabio Beltrones, coordinador de los diputados priistas ante la cámara baja del Congreso de la Unión, pide castigo para dicho saqueo.
Lo cierto es que hoy día, pese a los controles fiscales y de acciones cometidas con los recursos públicos, los políticos del día se las ingenian de manera impresionante para no ser descubiertos, siendo que en gran medida la obra pública se deja de hacer debido al saqueo descomunal que los recursos públicos resienten nacionalmente y de cuyos castigos quedan exentos ex gobernadores como Mario Marín, de Puebla, y Humberto Moreira, de Coahuila.
Conste que anteriormente no había ninguna contraloría que vigilara el gasto público.
Y por botones de muestra, nomás localmente, las residencias de los gobernadores Fernando López Arias, Rafael Hernández Ochoa, Antonio M. Quirasco, Rafael Murillo Vidal, por decir algo, se asemejan a cualquiera de las casas de los veracruzanos de medio pelo, y nada que ver frente a la fastuosidad y enriquecimiento acumulados por ex alcaldes y ex colaboradores menores de gobiernos estatales.
El caso de un pobre como llegó a Xalapa y tras de pagar hasta culpas en el reclusorio de Pacho Viejo, cargado como pocos se fue de la ciudad y del estado, el abogado Porfirio Serrano Amador, hoy poderoso empresario, con residencia en el DF, pero cuántos más como éste y ex munícipes con sus bolsillos repletos, viviendas por docenas, automóviles, cuentas bancarias y la ostentación burda al estilo Granier por delante.
Por eso, cuando se anuncia que un Andrés Granier Melo va a ser citado, propios y ajenos coinciden en que apenas es la punta del iceberg, lo cual no complace ni satisface a nadie, porque se prepararía de antemano un larguísimo juicio, que también para no pocos acabará cuando concluya gestiones el sexenio presidencial de turno y la fila de responsables de hechos similares. ¿Cuándo? Esperemos.
* CLÉRIGOS, TAMBIÉN
DEBEN MANIFESTARSE
La Iglesia católica pocas veces ha tenido que explicar porqué sus integrantes intervienen con declaraciones y puntos de vista acerca de la función pública que realizan los hombres y mujeres en el escenario político nacional y local.
Sin embargo, el arzobispado de la ciudad acaba de aclarar que no tiene porqué callar ya que aborda la problemática que afecta al grueso de la sociedad y, en ese sentido, el interés tiene que ver con el bien común.
El vocero de la iglesia, a cargo del prelado Hipólito Reyes Larios, hizo la observación a través de un escrito publicitado el último domingo.
El arzobispo Reyes Larios jefaturó hace unos días que los candidatos a alcaldes municipales y diputados al congreso estatal, antes que todo deben abordar una temática que está en la agenda y que no se ataca de fondo, como son los secuestros, los asesinatos y la violencia en su más generalizada concepción.
El clero católico supone que la vida fácil que llevan los candidatos, no puede continuar así.
Es decir, que la iglesia asume de alguna forma el papel que los políticos no ignoran, pero soslayan y no enfrentan.
Si usted abre las páginas de los periódicos o lee en las redes sociales, refieren que a aquéllos les gusta hacer anuncios, sin fondo, como el que harán pavimentos, traerán agua a las ciudades y que estarán cerca para escuchar al pueblo en sus exigencias, pero la sustancia, el contenido que debiera mover a la función pública en estos momentos, no la ve esta gran sociedad mexicana y veracruzana, que es el caso.
En escenario, los clérigos han externado su voz de desacuerdo y sólo que no estuvieran en este contexto, podrían clausurar sus puntos de vista. Ellos –los sacerdotes– es obvio que también exponen y algunos han sufrido las consecuencias de la violencia. Entonces, por qué no permitirles que se manifiesten no precisamente a través del púlpito, sino igual, desde su condición de representantes de una parte importante de la sociedad y lo hagan haciendo declaraciones a través de su medio informativo de los días domingos.
Es obvio que también calan sus opiniones, pero en un contexto que trate de encontrar alternativas de solución, pues que lo hagan los curas, cuando tocan un temario que en voz de ningún candidato se ha escuchado, que lo hagan los hombres de sotana, no hay que olvidar que en varios de ellos, igual, hay talento y están también cerca de la gente.
EfACICO 