AL ESTILO “JIRAFALES”
(Por Julio Fabián Martínez Vicente ) Al diputado federal por este distrito Gaudencio Hernández Burgos, nunca se le ve por estos lugares, solamente cuando acude a eventos de tipo social para salir retratado en las fotos de los medios de comunicación.
Después de la exhibida que algunos medios estatales le dieron por su “jugoso” salario como mentor y las amenazas que lanzó contra los maestros que se manifestaron por la reforma educativa, finalmente salió a dar la cara y hablar sobre lo que para él, representa la misma.
Pero lo que llamo la atención del diputado “levanta dedo”, fue cuando expresó: “yo sería incapaz de amenazar a alguien, los maestros me conocen y saben que por mi vocación yo no haría eso”.
Acto seguido, dijo que como servidor público esta expuesto a muchas cosas pero que los medios de comunicación y las redes sociales lo han difamado.
Sin duda que lo dicho al principio es muy cierto, los maestros de la Sección 32 del SNTE, lo conocen y muy bien. Algunos saben y no olvidan que para tener derecho a plaza o hacer meritos tenían que asistir a hacer labor social, es decir “talacha” al flamante rancho El Líder, ubicado en el municipio de Cazones, propiedad del legislador.
Esos maestros si lo conocen y saben que no solo es capaz de lanzar amenazas, sino que Gaudencio Hernández Burgos, se quedo acostumbrado como líder sindical a sobajar a sus agremiados y violentar sus derechos laborales.
Para nadie es secreto que en su momento hasta denuncias se dieron en su contra por venta de plazas y solicitud de favores sexuales a cambios de las mismas, como sucedió con maestras del puerto de Tuxpan.
Si con estos antecedentes Gaudencio Hernández Burgos, cree que los maestros, pero sobre todo la sociedad en general va a creer en su buen proceder, el “diputadito” esta muy equivocado.
Pero lo que más le preocupa a Chencho Hernández es que todo mundo lo identifique con el personaje del Chavo del 8, es decir, el profesor “Jirafales” por aquello de que nunca supo como agarrar un gis.
Y aún con todo y su negro historial, Gaudencio Hernández, todavía se atreve a pregonar que él será uno de los aspirantes más fuertes a buscar la presidencia municipal de Poza Rica, dentro de tres años.
En realidad a Chencho lo que menos le interesa es el gremio del que proviene, o sea los maestros. Ni tampoco si va o no a lesionar los intereses de los trabajadores de la educación la nueva reforma.
Lo que le importa es aprovecharse de la diputación como “trampolín” para alcanzar sus enfermizas ambiciones políticas.
Los maestros no pueden esperar mucho de su ex dirigente sindical y actual diputado federal, mucho menos el pueblo al que solo visitó para pedir el voto y que ahora ni el saludo regreso a darles.
Comentarios: fabianmartinez101@hotmail.com
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