Paradigmas: Ciclones, inundaciones y cambio climático


 por María Guadalupe Rico Martínez, egresada de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana (Desde Tampico, Tamaulipas)
por María Guadalupe Rico Martínez, egresada de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana (Desde Tampico, Tamaulipas)

(Por María Guadalupe Rico Martínez) El uso de combustibles fósiles marcó el desarrollo de las industrias metalúrgica y química, además de la mecanización de la agricultura, uso de fertilizantes sintéticos y extracción del agua, con ello también dar demanda al creciente número de habitantes algo así como 600 millones de personas sobre la tierra. Hoy en día el carbón, petróleo y gas suministran 80 % de las necesidades energéticas, para 7 mil millones de individuos.
El requerimiento de energía aumentará casi 50% para el año 2030 y por ende incremento simultáneo de emisiones de gases de efecto invernadero, a menos de que las medidas consideradas al respecto sean drásticas, pero de esto nada nos dicen los gobiernos de la mayoría de los países desarrollados, quienes anteponen sus intereses económicos al del bienestar humano. Ahí tenemos a China con problemas de aguda contaminación de aire pero tratándose de ubicar como líder económico mundial.
El Panel Intergubernamental de expertos para el Cambio climático (IPCC) de la ONU en su último informe señala que “… muy probablemente aumentará la frecuencia de los valores extremos cálidos, de las olas de calor y precipitaciones intensas, posible ampliación de la magnitud de los ciclones tropicales; habrá pérdida de un 30% mundial de los humedales costeros y padecimiento de inundaciones costeras cada año”. En casi todos los escenarios vaticina que la temperatura suba más de dos grados al final de este siglo (hasta 4,8) y la escala prevista del nivel del mar es de entre 29 y 82 centímetros.
En México desde 1960 la mayor parte de la población vive en ciudades, existe un crecimiento desproporcionado en las zonas urbanas, políticas públicas inadecuadas: construcción de viviendas en zonas bajas, rúas mal edificadas, tala inmoderada, etc. todo esto cobra factura al menor embate. Y después de Manuel están pronosticados ocho ciclones en la parte nororiental y 12 después de Ingrid en el Atlántico, Golfo de México y Mar Caribe.
Vulnerables, como siempre los más pobres, mañana quién sabe.
lupitarico@hotmail.com
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