Por Primitivo López Herrera
El gélido clima en Ciudad Victoria contrastó con el “calor político” que imperó, este domingo, en el Polyforum en donde se efectuó el Tercer Informe del Gobernador Egidio Torre Cantú.
Políticos de alto nivel e invitados especiales, por doquier.
Claro, todos en sala Vip.
El mensaje del Primer mandatario refirió a lo hecho no solo en el último año sino más bien un balance de los tres de los seis de su sexenio.
Este es el parte aguas de su mandato, pues.
La “hora de la verdad”.
En video dio cuenta de las principales acciones de gobierno en su peregrinar por todo el territorio tamaulipeco, lo que evitó que algunos asistentes del respetable se quedaran dormidos.
Luego ya en su mensaje, que duró unos quince minutos, Torre Cantú sentenció que “llegó la hora” de que los tamaulipecos emprendan una nueva y mejor vida.
De que todo “va bien” pero que “nos va a ir mejor”.
Este fue su frase: “vamos bien y nos va a ir mejor porque los tamaulipecos trabajamos todos los días para alcanzar el horizonte de prosperidad que merecemos, vamos bien y nos va a ir mejor”.
Y este fue argumento: “a Tamaulipas le va a ir mejor porque la refundación de las instituciones de seguridad es una realidad porque ahora sí hay una coordinación efectiva con el gobierno federal. “Nos va a ir mejor porque los empresarios confían en nosotros y están invirtiendo cada vez más en nuestro estado”.
Y agregó: “al estado le va a ir mejor porque hay claridad de rumbo y porque Tamaulipas cuenta con el apoyo del Presidente Enrique Peña Nieto a quien le reiteró su apoyo a la reforma energética por ser de especial importancia para el estado”.
Y en su pieza oratoria, Torre Cantú evocó a su hermano, Rodolfo, el mal logrado político tamaulipeco a tres años de su partida.
La emoción traicionó el férreo carácter de ETC.
Y luego hizo un llamado a todos los tamaulipecos para cerrar filas en el segundo tramo de su sexenio en donde ya los proyectos, ideas y planes tienen que ser una realidad.
Dijimos, en este espacio, que prácticamente son dos años de trabajo efectivo del gobernador porque el tercero es ya electoral y los reflectores cambian de objetivo.
El reto es grande pero también lo es el interés y el esfuerzo por lograr un mejor nivel de vida para los tamaulipecos.
Algunos invitados especiales, como el Jefe del D.F., Doctor Miguel Angel Mancera Espinosa, ya no escucharon a ETC porque prefirieron regresar, por eso del mal tiempo que limita y pone en peligro el vuelo de los aviones.
Por cierto que se extrañó la asistencia del gobernador de Veracruz Javier Duarte de Ochoa, vecino de Tamaulipas.
Pero sobre el tercer Informe de ETC han mucho más por comentar.
CANTU ROSAS.- El Alcalde neolaredense Carlos Cantú Rosas Villarreal fue el más asediado por los reporteros no sólo de Ciudad Victoria sino de todo el estado y los corresponsales y enviados nacionales. A su arribo al Polyforum fue interceptado, cuando menos en tres ocasiones por los representantes de los medios para la entrevista. CCR atendió a todos. Sobre dos temas habló: seguridad y obra pública en Nuevo Laredo, sin entrar en detalles. Y ya cumplido su cometido, tomó de la mano a su esposa Belinda, y se escabulló de los reporteros. Como dos chamacos huyendo del papá-suegro. Lo que es cierto, dicen los colegas tamaulipecos., es que Carlos Cantú Rosas es, hoy por hoy, el Alcalde mejor posicionado en Tamaulipas porque el resto de los 42 debutantes no “han dado color”. Y resulta atractivo por ser de oposición (PAN) en un Municipio de histórica trayectoria priista. Sobre él están los ojos del estado para su futuro político. Por cierto funcionarios de primer nivel y del Cabildo que acudieron al informe del Gober se transportaron, como aquí lo adelantamos, en un democrático autobús. Allí también viajó el joven Jefe de prensa del Municipio, Marco Antonio Martínez, quien en todo momento estuvo atento y pendiente a las entrevistas que le hicieron a su Alcalde. El mismo tomaba las fotos con su teléfono, ya que no llevó “equipo de prensa”. Por cierto que este año no hubo autobús para los chicos de la prensa de Nuevo Laredo. El jefe Juan José Zárate Quezada tuvo que viajar de “mosca” con dos periodistas radiofónicos de Nuevo Laredo. Así o más jodido el asunto.
GEÑO.- Otro personaje que acaparó los reflectores, por su repentina aparición pública, fue el ex gobernador Eugenio Hernández Flores quien, dijo, acudió al informe de “su amigo el gobernador Egidio Torre Cantú”. De hecho regresa a la palestra de la política. En breve entrevista, allá en el Congreso tamaulipeco, aseguró que está tranquilo, que la PGR hizo su trabajo y salió “limpio” de las imputaciones que le indilgó la otrora Procuradora Maricela Morales durante el sexenio de Felipe de Jesús Calderón Hinojosa. Y no quiso hablar más porque la estrella del evento era, sin duda, el gobernador Egidio Torre Cantú. Hace unos días Geño se reunió con Torre Cantú y dieron la sensación de que nada había pasado. Fuero tres años en que Geño se mantuvo al margen de la vida pública. Su caso es ahora con el del “Ave Félix”. O aquel pasaje bíblico de “Lázaro, levántate y anda”. Hay algunos políticos y periodistas que ubican a Geño en senda Secretaría de Estado o en el equipo de Enrique Peña Nieto con quien mantiene una entrañable amistad. Debe recordarse que el “Cónclave” en donde se definió la candidatura de Peña Nieto a la Presidencia de la República fue en el rancho de Geño, cercano a Ciudad Victoria. “Se la debe”, Peña Nieto, aseguran los enterados. Quien estaba feliz y contento era nada más y nada menos que Ramón Garza Barrios, ex alcalde de Nuevo Laredo y casi, casi el “hijo putativo”, políticamente hablando, de Eugenio Hernández Flores. Ya se ve como Diputado Federal por Nuevo Laredo. Al tiempo. Por lo pronto nos dio gusto la reaparición del amigo Geño. Y Punto…
(Distribuida por Laredo Press)
EfACICO 