
Representante de uno de los partidos de oposición al PRI, el señor Agustín Basilio de la Vega apunta algo terrible cuando dice que es un tanto oneroso que el IEV consuma su presupuesto millonario o la mayor parte de éste en salarios, gratificaciones y compensaciones a los súbditos laborales de la licenciada Carolina Viveros García, titular del órgano electoral en cuestión.
El IEV, desde su surgimiento, trae consigo las dudas acerca de su trabajo como árbitro, pero igual, que su tarea medular consistente en organizar elecciones, celebrar acuerdos con partidos políticos, sea sin inclinaciones partidarias sino todo lo contrario, que permanezca a un lado de esta clase de procesos, lo que finalmente llevó al régimen federal a presumir en la creación del Instituto Nacional Electoral, como la solución más viable al problema en materia de comicios.
Lamentablemente, cuando el niño nace defectuoso, su crecimiento trae consigo el estigma de que algo falló.
En el Instituto Electoral Veracruzano se enlistan en buen número las calamidades que persiguen a las cuestiones que tienen que ver con elecciones y, por supuesto, la vida democrática que no ha sido fácil sobre tierras veracruzanas.
Muy por encima de la celebración de estos eventos, la sociedad civil se ha cuestionado mucho, porque la pobreza en el trabajo del IEV de cara a elecciones, partidos políticos y la gente común y corriente, es una constante.
El IEV, como se sabe, no ha operado democráticamente, ofrece sin proponérselo quizá una doble cara: una, elaborar programas con vistas a celebrar procesos electorales, pero la otra, que constituye un aparato demasiado costoso, lo que le llevó a las viciadas prácticas de corrupción en sus interiores y su personal, entiéndase consejeros o representantes partidarios, se constituye en una mina que difícilmente se arriesgan siquiera evidenciarla.
Por otro lado, de siempre se ha acusado sobre el enriquecimiento personal de su presidenta, la abogada Carolina Viveros, el cual para despejarlo bien valdría la pena que, como lo piden numerosas voces, que se haga un arqueo amplio y efectivo a las finanzas que ha manejado la mencionada dama y, consecuentemente, que se le exonere o ponga a disposición de las autoridades que le dieron la chamba en cuestión.
Sobre todo, cuando está a un corto lapso de que el IEV cierre puertas, porque está por llegar nacionalmente el INE.
* DE VUELTA CON
FIDEL CASTRO RUZ
Atrás quedó la burda expresión de Vicente Fox Quesada, al correr prácticamente del país al comandante Fidel Castro Ruz, con la visita presidencial a La Habana, Cuba, y que tuvo como corolario la histórica entrevista con el barbón ex mandatario, una leyenda viviente, pero sin duda el único ex jefe de estado latinoamericano capaz de provocar la atención absoluta del resto del mundo, incluidos los Estados Unidos de Norteamérica.
México, y particularmente los grandes núcleos de académicos, intelectuales, estudiantes y trabajadores, entre quienes destacan los obreros y campesinos, han sentido los afectos y solidaridad con el pueblo cubano y en especial el reconocimiento para el comandante de la guerrilla que en 1959, tras cinco años de lucha armada en la mencionada isla, consiguió liberar a Cuba del yugo bajo el cual estaba sometida desde el vecino país del Tío Sam.
Siendo presidente de México Luis Echeverría, se afianzaron los lazos amistosos y diplomáticos con la isla, y dos personajes en la vida pública nacional aparecen como principales actores de esa cofradía amistosa, y que fueron don Lázaro Cárdenas del Río y don Fernando Gutiérrez Barrios.
En la isla, sus pobladores aun más pequeños y jovenzuelos, cada que aparece un mexicano le recuerdan que hay tres hombres a los cuales agradecerles su participación en la consolidación de una excelente relación amistosa y diplomática con la isla y que fueron don Benito Juárez, el general Cárdenas y el ex gobernador de Veracruz Gutiérrez Barrios.
Y como ejemplos de lo que nunca debió ocurrir, es decir, agriarse las relaciones bilaterales Cuba-México, Vicente Fox Quesada, quien debido a su voraz servilismo al presidente George Bush Jr., se atrevió a pedirle durante la última de sus visitas que hizo el comandante Fidel Castro a nuestro país, la patética sentencia de «comes y te vas».
Con Felipe Calderón Hinojosa el país mantuvo la distancia que quisieron los serviles del coloso del norte, pero finalmente la vuelta al decoro de las relaciones bilaterales ha tornado con el regreso también del PRI a ocupar la residencia oficial de Los Pinos.
Enhorabuena, porque los mexicanos de siempre han sentido su perenne homenaje a las libertades que conquistó para Cuba el luchador social José Martí, como también de aquella isla, los recuerdos y las demostraciones de reconocimiento a la patria azteca, con reconocimiento de propios y ajenos de ambos países hermanos.
* CUATRO DE CADA CINCO VS
CUATRO REELECCIONES
Cuatro de cada cinco ciudadanos en la ciudad, de un universo de 50 personas, votarían contra la sola idea de acordar una reforma que permita la relección hasta cuatro veces de los señores diputados.
Por suerte, la especie fue mencionada o sugerida por un diputado panista, así que no va a proceder y menos conquistar las simpatías del resto del cuerpo legislativo ante el Congreso veracruzano.
El poder legislativo lejos se encuentra de ser independiente y por encima de todas sus desventuras, su sometimiento a los controles de mando políticos estatales, no encuentra paralelo y se integra a lo que suele ocurrir como una dictadura perfecta, definió el escritor Mario Vargas Llosa.
Sin embargo, hay una parte de la población que no está conforme y, sobre todo, porque encuentra que hay cientos de miles de jóvenes sin expectativa alguna de poder cambiar el estado de cosas actual, primero porque carecen de empleo y muchos cuando lo logran, está lejos de poderlo identificar con sus aspiraciones personales, y en un tercer tramo, debido a que percibe pagos salariales de hambre.
Y por otro lado, suele ocurrir que los diputados son los únicos que en este país son o están obligados a poder cambiar, modificar y afirmar de manera ad-hoc las leyes en o bajo el supuesto de que los ordenamientos jurídicos deberán estar a tono con las exigencias sociales, menos no, porque entonces dejarían de ser auténticos representantes de la gente en la calle y la ciudad.
Empero, una mayoría provoca el hartazgo de la sociedad con sólo tres años de cobrar en las nóminas del poder legislativo, así que saber siquiera que hay alguien que propone su reelección hasta cuatro veces, es para volverse loco cualquiera. Los padres conscriptos, en un país como éste, son en mayoría oscuros personajes, prestos al son que les toque el patrón que paga, pero de ello a ofertar reglas y normas para beneficio de un pueblo desencantado, están lejos de concebirlo.
Imagine usted un legislador de doce ó 16 años ininterrumpidos, en el antro legislativo, seguramente hará que la gente se canse y acabe por echarlo fuera. Todavía ese tiempo no llega a una agitada aldea como es la anchurosa provincia veracruzana. Por favor.

