Por Raúl González Rivera
El futuro de la televisión mexicana no es lo halagüeño que quisieran los propietarios del duopolio que por años ha podido explotar la imagen bonita ofertando una programación repetitiva, pobre culturalmente y con noticiarios que el buen entendedor no encuentra precisamente con los contenidos esperados.
Hay una enorme duda sobre la calidad, eficiencia y veracidad de cuanto se difunde a través de los programas de noticias, las telenovelas y la constante de la publicidad que no cambia y sí, en cambio, se agolpa de tal manera que hace aburrida muchas veces su programación para el público televidente.
De autorizarse otras televisoras, una vez abierta la convocatoria para ser aprovechada por nuevos concesionarios, los cuales no pasarán de dos más, y quizá el anuncio velado finalmente se funde en un sólo inversionista, coadyuvará, sí, a rendir o brindar un platillo de ofertas más amplio, pero igualmente más pobre y deficiente.
La televisión mexicana ha dejado de tener la penetración que tenía en años anteriores.
Sus telenovelas habían podido captar una clientela muy amplia, ya que incluía a los señores jefes de familia y los jóvenes. Hoy estos últimos ven menos televisión y no hay programación que les satisfaga plenamente.
La programación para los menores es verdaderamente lamentable, pobre, muy grosera, y a aquéllos llama menos la atención, prefieren el internet y las tantas películas a través de la mini-pantalla de la computadora.
Los anunciantes son los mismos de siempre, cosa que no va a cambiar con nuevas televisoras. Por el contrario, la publicidad tendrán que dividirla entre tres o cuatro empresas, lo que empobrecerá sin duda sus contenidos.
Y en ese tenor, la pobreza intelectual será igualmente compartida, teniendo en la mira hacia un porvenir seguramente un sólo patrocinador, el cual será finalmente el gobierno y, en ese sentido, ya podrá usted imaginar cuál libertad de expresión y riqueza en su programación intelectual, cultural y pedagógicamente.
* PERREDISTAS Y PANISTAS,
EN LA ÚLTIMA CAMPANADA
En realidad, para los socios perredistas y panistas se podría advertir que están atendiendo la última campanada, pues aunque este país lo habitan 118 millones de mexicanos, vea usted que los primeros buscan afanosamente que un personaje, el único al que le ven posibilidades de salvar el barco, sea un hombre de casi 80 años de edad, y por cuanto a los segundos, sólo existen dos tiradores con alguna garantía de que la podrían hacer de altos mandos del partido conservador albiazul.
El PRD a todas luces se encuentra corriendo sin tener ninguna brújula.
Finalmente, el camino que adoptaron los creyentes de la izquierda de hace cuando menos veinte años a la fecha, se encuentran ante el reto mayor de sus vidas políticas y no descarte usted que es el único como membrete partidario para poder sobrevivir. No hay el candidato confiable ni reconocido por la sociedad mexicana, de pensamiento liberal.
Mafias, grupúsculos de poder, las tantas familias que forman las tribus y los encopetados que creyeron que podrían navegar sin el salvavidas que les dio durante doce años curules, alcaldías y escaños en el senado, que en este caso es Andrés Manuel López Obrador, ahora se percatan que es menos que imposible afirmar al PRD como la segunda fuerza política del país.
Así que han eliminado a todos los tiradores que han surgido en la trinchera perredista, porque en ninguno avistan las condiciones que les permitan ascender al juego que exige el país en este momento. Carlos Navarrete, Jesús Ortega, el propio Marcelo Ebrard han renunciado siquiera a buscar el liderazgo en una campaña que sin duda se la llevaría el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, toda una personalidad, sapiencia, conocimiento de la ciencia política y las cuestiones partidarias, pero algo más, con el carisma que no tiene ninguno otro de los precandidatos al timón de mando del PRD.
Empero, el ingeniero Cárdenas acepta el reto, pero puso sus condiciones, haciendo la observación de que tal cargo lo aceptaría siempre y cuando vayan todos los socios del perredismo, porque no quiere confrontaciones ni choques con sus iguales. Y es que el momento es o representa tanto, que los socios del partido del sol azteca, en casi 120 millones de habitantes en este país, únicamente un hombre es el elegido de entre cientos de miles, lo cual evidencia, igualmente, el tamaño que tiene también la corrupción en México.
Al otro lado de la esquina de este cuadrilátero de la política partidaria, aparecen los panistas que parecieran niños desheredados tras de perder la presidencia de la república, demasiado pronto. En los registros albiazules dicen contar con cientos de miles de militantes y algunos más como simpatizantes.
En ese camino se encuentra también el panismo, su partido enfrenta una fatal encrucijada, según cuentan sesudos del partido albiazul, ya que legir al candidato que dirigirá al partido en los próximos cuatro años, muchos creen en esas filas que o bien puede hundir o salvar al membrete partidario.
De antemano, los reaccionarios y malinchistas, que también los hay en filas panistas, le cerraron las puertas a una mujer, que en este caso sería Josefina Vázquez Mota, así que la contienda se volvió altamente cerrada y más lo será en los próximos días porque, igual, Gustavo Madero y Ernesto Cordero están enfrascados en una batalla hacia los interiores del PAN, en donde se valen de todo y pareciera que van en contra de todos.
En ambos frentes de perredistas y panistas, la desesperación amaga con dejarlos tendidos sobre el terreno del juego partidario, primero porque el PRI recuperó Los Pinos y Morena, ya reconocido como partido político, tirios y troyanos aseguran que AMLO será la segunda fuerza política del país, antes de que concluya gestiones el actual régimen de gobierno tricolor. Al tiempo.
* DÍA Y NOCHE BAJO
VIGILANCIA POLICÍACA
Hay algo que en la ciudad no cuadra con lo dicho en el mensaje elevado por los políticos en el sentido de que la tranquilidad social existe, en sus declaraciones a los chicos de la prensa.
Si así fuera, qué bueno.
Día y noche, es impresionante el ulular de las patrullas policiacas y de los motociclistas que, a semejanza de Robocop, el churro de las proyecciones estadunidenses, muestra al agente Murphy luciendo un impresionante uniforme de lata de color gris oscuro y armamento increíble, como los elementos que de negro visten y las 24 horas recorren la ciudad.
En este hándicap por saber quiénes realmente protegen a la ciudad, se cuentan también los uniformados de la policía vial, de uniforme y metralleta en la espalda.
Sin embargo, la ciudadanía muestra temor, y las mujeres de avanzada edad traen el Jesús en sus labios, recorren sus rosarios, porque esta nota de la violencia no la conocieron nunca en una capital como la nuestra. La nota roja de los periódicos sigue reseñando una ejecución diaria en alguna de las colonias de la localidad y no hay culpables ni responsables detenidos.
Convivir con la violencia, enmedio de decenas de policías y patrullas corriendo las calles con sus molestas luces de colores encendidas, para nadie es grato.
Difícilmente alguien se convence de que estén a la caza de los malos y que vigilen y den la protección debida a la ciudadanía. Hay prepotencia en no pocos de esos elementos y las patrullas y motociclistas violentan el 1×1, se pasan el rojo de los semáforos en donde los hay y con la gente simplemente muestra su camuflaje todopoderoso con mirada y actitudes temerarias.
Aparatoso resulta avistar el blindaje de que gozan algunos funcionarios públicos, a quienes nadie vería si recorren con sus automóviles las calles de la ciudad, sin un comando acompañándoles, que se integra de 30 ó 40 elementos, con pertrechos propios de los que exhiben los soldados iraquíes en la defensa de su país.
Empero, lo que la gente quisiera saber es de cuántos elementos se forman estas legiones de policías de azul oscuro, policías viales y qué cuidan, qué vigilan, por qué esos recorridos de día y de noche, porque la población se alerta y le sobrecoge un miedo-pánico de los mil demonios, como lo hacen saber en esta mesa de trabajo, amén de que sus jefes y demás superiores expliquen cuánto cuesta todo este pertrecho de seguridad que en los últimos cien años Xalapa no había ostentado con las singulares notas de este momento, siendo la capital, asiento de los tres poderes, casa del mayor número de escuelas de estudios superiores y por ende de la afluencia estudiantil como en ninguna otra parte del estado veracruzano.
EfACICO 