Por :Héctor Saldierna Martínez


Las intensas actividades del 21 de abril en el puerto de Veracruz, a propósito del centenario de la invasión estadounidense, arrojaron la importante reflexión sobre la necesidad que los pueblos de América sean capaces de fijar su autonomía y permanezcan alejados de los apetitos y ambiciones de las potencias del orbe.
La celebración de la invasión, que de entrada es un hecho infausto, reveló también la valentía y osadía de un pueblo veracruzano que se defendió con gallardía ante la superioridad técnica y de armamento del enemigo.
Aunque los nombres principales de la defensa están ligados con los hombres de la Escuela Naval Militar, como lo han ratificado los homenajes que se realizaron en la macro plaza del malecón, la realidad es que hay nombres anónimos de valerosos veracruzanos que ofrendaron su vida antes de ser sometidos a la bota opresora de los gringos.
No era la primera ocasión. Antes, en el siglo XIX, Veracruz había sufrido la invasión de los mismos norteamericanos y poco antes habían sido los franceses los que atacaron a Veracruz en virtud de las deudas que reclamaba el gobierno francés al mexicano. En 1825, Veracruz había sufrido también el bombardeo desde San Juan de Ulúa, último bastión español en tierras mexicanas.
Estas experiencias, sumadas todas, hablan del indomable espíritu de heroísmo y resistencia del pueblo veracruzano que en diversas épocas históricas ha sabido enfrentar al enemigo y ha demostrado un orgullo sin par y la evidente valentía en sus hombres y en sus mujeres.
No debemos olvidar tampoco la épica batalla de Camarón, escenificada entre tropas mexicanas y francesas, precisamente en el municipio que lleva ese nombre y muy cerca del puerto de Veracruz. Es otro capítulo heroico, donde las tropas mexicanas se cubrieron de gloria y dio origen a un capítulo de entrega y también de nobleza.
EJEMPLO A
SEGUIR
Estas grandes lecciones de dignidad y de heroísmo deben ser secundadas por las actuales autoridades de gobierno, a cuyo mensaje debe impregnarse la imperante necesidad que un pueblo debe ser libre, por encima de cualquier interés comercial y económico.
No existe nada que vaya en contra de los grandes valores del pueblo mexicano y que de nada sirven los supuestos beneficios económicos que puedan recibirse, sí a cambio se pone en riesgo la vida soberana e independiente de un pueblo. La historia suele cobrarse estas afrentas y tarde o temprano el juicio en contra de quienes obran en perjuicio de su pueblo, lo tendrán que pagar con creces.
MOVILIZACION
MAGISTERIAL
En el marco de la celebración del 21 de abril, ni siquiera las enormes movilizaciones de seguridad que se implementaron en el puerto de Veracruz, jamás registradas en la visita de un presidente de la república, evitó que un grupo de maestros se manifestara en el zócalo de la ciudad, donde finalmente fueron reprimidos por el cuerpo de granaderos de la entidad.
El concepto de la democracia ha quedado pulverizado ante la luz de estos acontecimientos, toda vez que cuando una nación tiene la virtud de la democracia, debe otorgar el permiso a las personas que piensan distinto y que también poseen la necesidad de exponer su ideario.
A la luz de la reflexión, el magisterio ha sido la única organización en el país que se ha mantenido enhiesta y firme ante las determinaciones que se han implementado desde la cúpula del poder federal. Se trata, simplemente, de una manifestación que debe ser libre y ser adoptada con respeto y admiración, toda vez que toda sociedad avanzada debe respetar las diversas corrientes de pensamiento.
Al pensar en forma contraria estaríamos mal. Todo poder siempre debe contar con un contrapeso a efecto que haya equilibro. Cuando no sucede así, entonces puede generarse el autoritarismo y que sea un pequeño grupo desde el poder el que tiene que imponer su criterio y los lineamientos a seguir, lo que no es correcto desde cualquier punto de vista.
La realidad es que también, en muchísimos años, no se había observado el coraje, rabia y determinación de un grupo social que, incluso, a gritos cuestionaba severamente la figura presidencial, hecho inédito en la vida nacional.
LAS PREGUNTAS DE LA
COMUNIDAD UNIVERSITARIA
Con los cambios que se llevaron a efecto hace algunos meses en el seno de la Universidad Veracruzana han surgido algunas preocupaciones y preguntas de la comunidad universitaria. Es evidente que no hay cuestionamientos con nombres y apellidos, pero existen hechos que empiezan a preocupar hondamente.
Para empezar, la desaparición del equipo de Basquetbol Halcones de Xalapa, que sí bien contaba con una abultada nómina, la realidad es que también le había aportado una fuerte dosis de prestigio al conquistar en varias ocasiones el gallardete nacional y sus miembros forman parte de una selección nacional que, por primera vez en muchos años, ha figurado en el ámbito continental del Basquet Bol.
.
Otra preocupación está vinculada con la desaparición prácticamente del Festival Internacional de Jazz, que ya se había posesionado en el medio y, por otro lado, la desaparición de la compañía de Danza, Sangres, que ya tenía un importante cartel a nivel nacional.
Estos hechos, en aparente desvinculación, constituían baluartes básicos de la Universidad Veracruzana. La pregunta que ahora se hacen los reflexivos universitarios es qué sigue, que depara el futuro. No debemos olvidar que la UV no formó parte de la exclusiva lista que se publica de las universidades más prestigiosas del país y ello debe servir de importante reflexión y que no siga acentuándose la caída que podría llegar a niveles extremadamente peligrosos.
Y hasta la próxima.


