Oficialmente, la oficina a cargo de Emilio Chuayffet Chemor ha reconocido que Veracruz se encuentra entre las cuatro o cinco entidades del interior del país con el mayor número de adultos que no saben leer ni escribir.
Es decir, que el cardenal de la SEP no vino a hacer anuncios que causen algún impacto, sorpresa o enojo.
La entidad enfrenta desde hace una veintena de años el peor rezago en lo que hace a la formación de educandos, no sólo porque enfrentan una educación deficiente, sino fundamentalmente a que en la entidad donde se abren escuelas de todos los niveles escolares, como abrir tiendas de abarrotes, también se afronta vergonzantemente la mayor suma de mujeres y hombres sin saber leer ni escribir.
Es decir, que un país como el mexicano, con un déficit en los principales rubros de la salud, el empleo, la delincuencia, la inseguridad, igual afronta el reto de una educación deficiente, pero la cual, además, incluye a casi un millón de jóvenes mujeres y hombres, sin tener en su favor el dominio de las primeras letras.
Esto en una entidad, con su universidad pública que no aumenta su matrícula, sino todo lo contrario, la reduce, y a que la inmensa mayoría tiene la imposibilidad de pagarse una enseñanza privada, pese a que se han abierto casas de estudio con tal facilidad como abrir nuevas cantinas, más antros y lupanares, lo que pareciera inconcebible.
Se anuncian programas y más planes con vistas a atacar de raíz un fenómeno que es social, que es económico y de orden académico, pero que, a la hora de la verdad, se oponen los asegunes como es la pobreza, los poblados marginados de todo y los cientos de miles de muchachos que sin ninguna oportunidad ni opción, ante el acoso del hambre y los grupos delincuenciales, deben elegir entre aguantarse todos sus males o enlistarse en las filas que llevan a la debacle social a todo grupo integrado por seres humanos.
Vino el cardenal Emilio Chuayffet y armó el escándalo, que ahora envuelve a Veracruz junto con Oaxaca, Guerrero, Chiapas y Tabasco, como los estados con más iletrados que ninguna otra región del país.
* HAY CAROLINA HASTA
PARA SEPTIEMBRE DE 2015
Sin los tamborazos ni los plantones ni mítines, ni nada que se le parezca a la violencia, la abogada Carolina Viveros García con más vidas políticas que un gato, hará de las suyas por otro añito más desde el Instituto Electoral Veracruzano.
Cuando a Carolina le dijeron que debía dejar junto con su banda de consejeros electorales, la millonaria bolsa que cada año usufructúan a placer con que se mantiene el IEV, la ex bibliotecaria del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Veracruzana, le anunciaron que continuarán chupando por espacio de un año y meses más.
Carolina había amenazado que si la sacaban del IEV, armaría todo un escándalo, porque de siempre, o desde entonces, ha considerado como injusta la aparición del Instituto Nacional Electoral y reprochó abiertamente, con declaraciones a los medios informativos, que ella y su grupo quedaran sin el empleo que les ha permitido amasar una considerable fortuna personal.
Así que, en este año tendría que renunciar a su encargo de presidenta del organismo electoral en cuestión, debido a los ajustes que corresponden a la instalación del INE sobre tierras veracruzanas, la salida de Carolina ocurrirá, si no pasa otra cosa, en el mes de septiembre del año 2015, es decir, un año más del presupuestado para favorecer a la maestra Viveros García.
Razón de peso suficiente para que la dama y su selecto grupo de adictos, estén felices. No contaban con quedarse otro año succionando las ubres del erario destinado a mantener el instituto electoral veracruzano. Inclusive, los funcionarios que se dedicaban a grabar a las funcionarias del IEV en sus baños, han jurado que volverán a hacerlo, porque nadie ni nada les hará capitular en una muestra que gustan llevar a cabo con todos sus pelos y señales.
La resistencia de Carolina y sus huestes a dejar los huesos que les regalaron al iniciar gestiones hace casi diez años en el Instituto en cuestión, les permitirá disfrutar de otro presupuesto millonario por el lapso de un año, el próximo a partir de septiembre de 2014.
Obviamente, hay un marcado descontento en su contra, por parte de partidos políticos, líderes sociales y gente sencilla, que cree todavía en alguna práctica democrática, sobre todo tras de ser informados de que la abogada Carolina rebasará una década cobrando como cardenal, siendo que existe una multitud de veracruzanos honestos, demócratas y con marcadas aspiraciones de promover el cambio que no llega.
* A TEMBLAR DELEGADOS
FEDERALES EN VERACRUZ
Cayó Gonzalo Morgado Huesca.
Así de sencillo fue el mensaje que se transmitió a los medios de comunicación social sobre tierras veracruzanas.
El político que se hizo al amparo de la sombra generosa del gobernador Rafael Hernández Ochoa, tiene un amplio recorrido en las chambas eminentemente políticas. Originario del municipio de Martínez de la Torre, abandonó la tierra para llegar a Xalapa y registrarse como alumno de la facultad de Comercio y Administración de empresas de nuestra máxima casa de estudios.
Sin roce intelectual con ninguna institución pública ni privada, Gonzalo ha sido siempre grillo.
Fue dirigente estudiantil, primero en las aulas de Comercio y luego en el liderazgo de la federación estudiantil veracruzana. De pupilo vivió en casa de pupilos que se localiza sobre la avenida Xalapeños Ilustres, pero ya había impresionado a Rafael Hernández Ochoa aun sin ser orador, ni lector de libros. Simplemente grillo, movilizó masas estudiantiles y de allí su salto al partido revolucionario institucional.
En el sexenio de RHO, alcanzó su máxima posición siendo dirigente estatal del PRI y, sin duda, su galardón más importante fue haber hecho ganar la candidatura del PRI a alcalde municipal a Juan Herrera Marín, del ayuntamiento de Córdoba, ciudad de los 30 caballeros, en contra de Dante Delgado Rannauro, quien perdió en la justa interna del ex partido aplanadora.
Entrevistados ambos, en su natal ciudad de los 30 caballeros, en tanto Herrera Marín nos diría que gobernaría improvisando, Dante enseñó al enviado de este matutino a sus oficinas de campaña, un legajo de apuntes y libros y diagnósticos que le merecieron tiempo de investigación.
Y Juan fue alcalde, Dante perdió.
Gonzalo continuó su carrera exitosa en lo político. Ha sido alcalde de Martínez de la Torre y diputado federal. Nunca ha dejado de pertenecer al ejercicio de los presupuestos oficiales, inclusive ni cuando Dante arribó a la gubernatura estatal. En el anterior sexenio local ocupó cartera en la Sefiplan y muchos supusieron que habría iniciado la retirada de su carrera pública.
Su reaparición ocurrió en la titularidad del IPE y posteriormente fue designado como delegado del Issste sobre tierras veracruzanas. Anteayer fue relevado de su cargo, lo que puso a temblar sobre todo a los demás delegados de dependencias de gobierno federal, con lo cual se asegura que fue pagada la deuda que las instituciones pudieran todavía tener con políticos que prestaron algún servicio a la causa de gobierno.
Como anécdota, seguramente en su carrera de dirigente priista, se recuerda la gesta que encabezó la directiva estatal, al lanzar tomates por la espalda, en un acto evidentemente cobarde, al entonces jerarca nacional del partido oficial, don Jesús Reyes Heroles, politólogo de corte mundial, en su tiempo, el único del partido tricolor, quien tras la agresión, de cara al edificio de Moreno y Ruiz Cortines, dictaría una sentencia, que se cumplió: «El PRI se renueva, o muere».
EfACICO 