Por José Luis Pérez Cruz, egresado de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana
Los crímenes del pastor Claudio Martínez, del periodista Gregorio Jiménez y el plagio de la menor Karime Cruz y su tía, han evidenciado la pésima política de comunicación social del gobierno de Veracruz, además de exponer ineptitud en el manejo de situaciones de crisis.
Sólo por identificar tres casos ocurridos en la ciudad de Coatzacoalcos, sin olvidar otros más que se han presentado en el estado.
En esta trilogía de ilícitos ha permeado la opacidad en las investigaciones, ha existido un grave silencio informativo y peor aún, ha mostrado la incompetencia de una autoridad en la aplicación de justicia. Aún con detenidos, no terminan de convencer en su actuar.
Tropiezo tras tropiezo, el gobierno de Javier Duarte de Ochoa tiene como estigma la falta de credibilidad, producto de desaseos en sus diversas áreas.
En las finanzas, la operación política, en seguridad y en la procuración de justicia existe un terrible saldo rojo que difícilmente se solventará al final del sexenio.
Los teóricos en manejo de crisis afirman lo siguiente:
“Los líderes lideran con su ejemplo y con los valores que demuestran… La confianza es pues fundamental en el proceso de construcción de marca de cualquier institución, bien sea privada o pública, así como también la de personas. Una marca respaldada en la confianza del público es el principal capital político con que se puede contar…”
Duarte de Ochoa no ha podido ser ejemplo en esto.
Por todos es conocido que una crisis mal manejada puede ser devastadora para un gobierno.
CON UNA CORTE DE ADULADORES
El consultor José Penso asegura que “el principal factor de impacto negativo en la reputación institucional es la falta de interés de las instituciones en los problemas de sus públicos”.
Es pocas palabras es “colocarse en los zapatos del otro, comprender lo que el otro piensa, sentir lo que el otro siente”.
Y ese ha sido uno de los grandes problemas del gobierno de Duarte.
Blindado por aduladores de ‘a peso’, el gobernador camina con una ‘corte’ donde para ellos todo está bien.
Se asumen actitudes de intolerancia, se busca irremediablemente el silencio de la información o incluso se cae en la ironía del ‘no es para tanto’.
No hay cercanía con la población. Sólo se llega a la fotografía posada aquella que por petición expresa llegará a las portadas, no toma importancia por un genuino interés público y por ende periodístico.
A esto se suma un discurso oficial que contrasta con la realidad. Si Veracruz no es un infierno, poco le falta.
La semana pasada el gobierno de Veracruz vivió ‘la gloria mediática’ con la plenaria de senadores priistas, con el arribo del Secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, con la presencia de la Secretaria de Sedesol, Rosario Robles, sólo por mencionar algunos.
En cambio en el caso del plagio de la pequeña Karime y su tía, el procurador arriba a Coatzacoalcos en la clandestinidad, sólo da detalles de su llegada a sus ‘lame botas’ en los medios de comunicación. Anda ‘a salto de mata’ en la ciudad y evita dar información.
Recientemente los padres de la pequeña plagiada se quejaban que ya Luis Ángel Bravo no les tomaba la llamada.
“Se busca no entorpecer la investigación” seguramente dirá, una indagatoria que por cierto empezó tarde y dejó de hacerse a las cuatro semanas de no conocer el paradero de las plagiadas.
Arturo Bermúdez Zurita confesó a los presentes en la mesa de seguridad en el Terranova que hay vinculación de familiares en el plagio. ¿Por qué diablos no decirlo con todas sus palabras en público?
Que la familia ocultó información, también se escuchó ahí.
NADIE REPROCHA CALLAR
En su libro ‘La información del silencio’, el periodista español Alex Grielmo afirma que hoy en día hay manipulaciones informativas basadas en lo que no se publica.
“La principal manipulación informativa está en el silencio y no en decir mentiras u ofrecer datos falsos. Y con el silencio hay que tener cuidado porque tiende a llenarse de significado, es información”.
Y va más allá al asegurar que antes era más fácil mentir; ahora mentir es más difícil pero callar es muy fácil y nadie lo reprocha.
Ese es el tema de la comunicación duartiana. La manipulación del silencio.
Para Penso, consultor y conferencista internacional en las áreas de Branding, Comunicaciones Estratégicas y Mercadeo, la “primera regla para proteger la marca durante una crisis, consiste en afrontarlas de manera pronta. El ciudadano espera que el gobierno realice eficazmente el trabajo para el cual fue elegido y que demuestre su intención de resolver la situación”.
Al menos en los tres casos arriba descritos esto no existió.
Se buscó, incluso ocultar información.
Ni hablar de otros valores importantes en un gobierno como lo son la “eficiencia, efectividad, competitividad, justicia, austeridad, independencia, liderazgo, seguridad, honestidad o trabajo”. En estos hay un déficit enorme en la administración estatal.
Lo peor de todo es que aún faltan poco más de dos años.
ALIANZA CON TIBURONES
Luego de varias semanas de diálogo, ayer en el puerto de Veracruz, Roberto Chagra Nacif, Presidente del Club Delfines Atlético Coatzacoalcos y Fidel Kuri Grajales, Presidente del Club Tiburones Rojos, signaron un acuerdo, al menos verbal, para establecer una alianza deportiva entre ambos equipos de futbol.
La unión pretende impulsar la creación de acuerdos que generen una dinámica de retroalimentación de estrategias deportivas para el crecimiento de ambos clubes.
Los empresarios buscan que la entidad, tenga en equipos en toda las categorías de ascenso y que Delfines de Coatzacoalcos funcione como filial del club jarocho.
Por lo pronto el miércoles El Tiburones, aprovechando que es fecha FIFA, se presentará aquí para jugar un amistoso con el equipo local. La cita es a las siete de la noche en el Hernández Ochoa.
Por acá estará el hijo de Fidel Kuri, jugadores y los entrenadores Cristóbal Ortega y en una de esas hasta el maestro Carlos Reinoso.
Bien por Chagra, parece que va en serio el desarrollo del futbol profesional en Coatzacoalcos.
Testigo de honor del acuerdo fue Víctor Kidnie.
AL OÍDO
Si el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso dijo en días pasados que la entidad ha sido beneficiada con un exceso de recursos de participaciones federales, la pregunta es:
¿En dónde está el dinero de Veracruz?
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