Abriendo Brecha: La Tormenta Perfecta

Por Héctor Saldierna Martínez

La Tormenta Perfecta es el título de una película norteamericana que se exhibió exitosamente en el año 2000 y que narra las peripecias de un barco pesquero llamado Andrea Gail, el cual se encontraba en el lugar exacto en donde se produce un huracán y el encuentro coincidente de dos frentes tormentosos.

Esta historia parece que la está viviendo ahora el gobierno federal, que todavía a inicios del mes de septiembre festejaba con bombo y platillos el remache de sus reformas estructurales, las que impulsadas por vía del Congreso, pintarían un panorama propicio para lograr el despegue económico del país.

Sin embargo de pronto apareció un huracán, como a los protagonistas de la película George Clooney y Diana Lane en pleno altamar, a través de la desaparición de 43 normalistas de la escuela Isidro Burgos de Ayotzinapa, en cuya acción se le atribuye al alcalde de Iguala, José Luis Abarca y su esposa María de los Angeles Pineda, ahora detenidos pero sin conocerse aún su versión directa de los hechos.

A partir de esa fecha aciaga los reclamos han ido en forma ascendente, sobre todo por la falta de respuestas oficiales y las que ha habido, en un momento dado, han sido absolutamente insuficientes para satisfacer los reclamos de los adoloridos padres de los normalistas que han señalado que así como ellos sufren, también así han arrodillado al gobierno.

Cada día las manifestaciones han incrementado el número de participantes, por lo que el 20 de noviembre y el 1 de diciembre, miles de personas salieron a las calles para demandar el esclarecimiento de esta situación, pero sobre todo exigiendo la aparición de los 43 estudiantes desaparecidos

Sí bien las protestas más visibles han ocurrido en la capital del país, donde miles de estudiantes y ciudadanos han tomado las calles, este conflicto ha tenido un extraordinario eco en diversas ciudades del país y en varias naciones del orbe.

La próxima marcha programada para el día 6 de diciembre contará con el adicional de miles de campesinos que se sumarán a los padres de los normalistas y en cuyos argumentos no solamente es el ¡Vivos los queremos!, sino también ha sido insistente la petición de renuncia de Peña Nieto y, lo que más llama la atención desde la perspectiva del ícono y del símbolo, fue la quema de una efigie gigante del presidente en pleno Zócalo capitalino.

Por más que el gobierno ha intentado frenar esta inédita ola de irritación social y de hartazgo, se han sumado otros factores que podrían insinuar que el oleaje todavía no llega a su cresta máxima. El conflicto de interés de la primera dama, Angélica Rivera, en relación a la Casa Blanca de Las Lomas, le agregó la dosis de tormenta violenta al de por sí huracán del descontento social que priva actualmente en el país.

Y las cosas no terminan ahí en medio de este mar alebrestado como nunca antes, porque la caída del precio del petróleo a 62.26 dólares por barril, en contra de 79 dólares presupuestados por el gobierno central y el coletazo de agua al peso que ha llegado a 14.43 pesos en relación al dólar, lo sitúa en una delicada situación.

El gobierno priísta se encuentra evidentemente preocupado. El fantasma de una devaluación sería de efectos catastróficos no deseados, sobre todo porque sí ellos mismos se han autocalificado que “sí saben gobernar”, tendrán que esconder la arrogancia ante el odioso comparativo que los panistas “que no sabían gobernar” tuvieron la capacidad de no devaluar la moneda en 12 años, salvo el golpetazo que recibió Felipe Calderón en 2008 que afectó sensiblemente al peso en relación al dólar, luego de una crisis iniciada en Estados Unidos por el asunto inmobiliario.

Luego entonces, nos encontramos en medio del proceloso mar. que no sólo enfrenta al huracán, sino que ahí han convergido otros frentes tormentosos de tal furia que amenazan hundir la embarcación y que solamente un fuerte golpe de timón, con intuición e inteligencia, podría evitar que la nave zozobrara.

Mientras tanto continúan las marchas y las manifestaciones sociales sin límites y sin miedo a la represión como lo han constatado los estudiantes detenidos el 20 de noviembre y que volvieron a marchar el 1 de diciembre. Estos son ejemplos que arrastran y que podrían catapultar la protesta a niveles insospechados, no obstante que en el Congreso de la Unión, el PRI, PAN y y PVEM hicieron modificaciones a los artículos 11 y 73 de la Constitución para criminalizar la protesta social.

UN FUNCIONARIO QUE
HABLO CON LA VERDAD

En estos tiempos que los políticos tienen la más pobre de las percepciones ciudadanas, también deben destacarse las partes positivas cuando las haya. En este contexto y en la víspera de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, el Lic. Carlos Sosa Ahumada, presidente del Comité, dijo en una reunión ante Rotarios, parafraseando la Prueba Cuádruple, que es un legado moral: “¿Es la verdad?. La verdad es que los Juegos Centroamericanos y del Caribe se llevarán a cabo en tiempo y forma.

¿Es equitativo para todos los interesados?. Así es. Todos los que participemos seremos beneficiados por el éxito de estos juegos.

¿Creará buena voluntad y mejores amistades?. Tomado en cuenta que participarán deportistas de 31 países en 36 disciplinas en las principales ciudades del Estado, evidentemente crearán buenas voluntades y se multiplicarán las amistades.

¿Será beneficioso para todos los interesados?. Por consecuencia así será, porque serán los mejores juegos organizados en su historia, tomando en consideración además que México ha sido sede de estas actividades en 1920, 1954 y en 1990.

Carlos Sosa habló, pues, con la verdad y cumplió en el sentido que serían los mejores Juegos Centroamericanos y del Caribe de la historia. Así fue.

Y sobre este mismo tema, el Master y Lic. Juan Escudero Campos, funcionario que despacha en la Oficina de Hacienda del Estado en este puerto, destaca por su amabilidad y gentiliza con la que atiende a toda persona que acude en la busca de orientación. Además, Escudero Campos, no conforme con su formación, estudia actualmente el tercer semestre del Doctorado en Administración Pública en el Instituto de Administración Pública de Veracruz y que tiene su sede en Xalapa.

Y hasta la próxima.