Escenarios: La favorita de Javier Duarte


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Favorita del gobernador Javier Duarte, la diputada Ana Guadalupe Ingram actúa con la soberbia por delante y el riesgo de descarrilar al partido tricolor en la elección de las curules federales

Por Luis Velázquez Rivera

•El PRI, en una encrucijada

•Sin mujeres pa’curul federal

I

Por Luis Velázquez Rivera, egresado de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana
Por Luis Velázquez Rivera, egresado de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana (Desde el puerto de Veracruz)

El PRI, como dice el gobernador, está buscando candidatas a diputadas federales como si un camello siguiera intentando pasar por el ojito de una aguja.
Y si el tricolor enfrenta tales vacíos, peor el resto de partidos políticos.
Claro, hay mujeres priistas; pero muchas demasiado vistas en el escenario político que han caminado, además, en otros cargos públicos y, en algunos casos, han desencantado por su intrascendencia.

Y/o como en el caso de las hermanas Vázquez Saut, de Acayucan, hijas del cacique regional Cirilo Vázquez Lagunes, (QEPD) que han alternado todos los cargos públicos locales y regionales, hasta el agotamiento.

Otras más se mueven en los medios para ver si la amarran como, por ejemplo, la ahijada de Rosa Margarita Borunda de Fidel Herrera, alcaldesa de Paso de Ovejas, Ana Rosa Valdés Salazar, que a cada ratito le ha dado por salir en la tele y en la prensa escrita, mostrando el puño.

Incluso hasta con anuncios publicitarios aprovechando, de paso, el primer informe de lo que llaman labores municipales.

II

En Xalapa, por ejemplo, hay un dueto de mujeres al parecer posicionadas.

La primera, Corintia Cruz Oregón, la diputada local suplente de David Velasco Chedraui, que ha empezado a distribuir sus despensas escolares con su foto en la tarjeta de presentación como si fuera modelo en la pasarela de modas.

Incluso, quienes están cerca de ella aseguran que se cree y siente “en los cuernos de la luna”.

Y la segunda, Érika Ayala, lideresa sindical del COBAEV, Colegio de Bachilleres, de quien se afirmó que en un principio iría, iría, iría por el distrito de Xalapa rural, aun cuando por ahí también aspira Adolfo Mota, secretario de Educación, y Constantino Aguilar, exlíder de la Liga de Comunidades Agrarias.

Ahora, dice su biógrafo, Érika, nacida en Poza Rica, se siente originaria del territorio jarocho y, por tanto, mientras son peras o manzanas, por el distrito que se pueda.

III

Según las versiones, la diputada Ana Guadalupe Ingram, quien utilizara su tráfico de influencias para mudar al nombre de Anilú, ahora estaría de nuevo por cambiarse de nombre, pues el mundo político le llama “Carolinita”.

Y Carolinita, en diminutivo, quizá, acaso, con cariño, para referir su dependencia psicológica y psiquiátrica y política y social de Carolina Gudiño Corro, cuya vida pública ha decidido imitar y reproducir.

Y es que si la Gudiño dejó inconclusos tres cargos públicos, Carolinita iría por el segundo, con la curul local.

Y si la Gudiño sólo estuvo unos meses como diputada federal para irse de candidata a la alcaldía jarocha, Carolinita también, que es su objetivo.

Igual que la Gudiño, Carolinita es una copia (y mala copia) al carbón y, por tanto, el psicólogo social y político ha advertido los siguientes puntos de Aquiles:

Uno. Para caminar con seguridad a las urnas para diputada federal, necesita bajarle a la soberbia, pues como usufructúa la bendición del jefe máximo, se siente parida por los dioses y mira y trata a los demás de arriba para abajo.

Dos. Malagradecida, se está peleando con las mujeres priistas, muchas de los cuales le han apoyado en otro tiempo.

Incluso, según las versiones, las regaña y las putea con groserías.

Todavía peor: las llama traidoras.

Tres. Igual que Carolina, Carolinita ha caído en la exclusión partidista, creyendo que el mundo ha de estar a sus pies.

Y, bueno, si los priistas lo están quizá vivan atemorizados de que los intrigue con el jefe máximo.
Pero pelearse con una mujer es pelearse con 200 hombres al mismo tiempo.

Y si Carolinita se está conflictuando fiel a su estilo, ya podrán los jefes visualizar el resultado.

IV

En tales circunstancias y con el infierno que se vive y padece en Veracruz y en el país, reformas peñistas que al momento han dejado de aterrizar en el bolsillo de la población, con un hartazgo creciente, la soberbia y la petulancia son malas consejeras.

Y más si Carolinita firmó ante un notario público de Alvarado (59 de Israel Ramos Mange) que nunca dejaría inconclusa la curul local y es lo primero que está haciendo.

¡Vaya farsante!

Con priistas así, dueñas del mundo, el partido tricolor se descarrila…

Publicado en: http://www.blog.expediente.mx/nota.php?nId=9752#.VIMsYzSG-So

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