por Francisco Blanco Calderón
México vive tragedias cíclicas: “la hipérbola de Enrique Peña Nieto (una subida ascendente y una caída igual de vertiginosa) deja un sentimiento dedéjà vu del gobierno del ex Presidente Carlos Salinas de Gortari, dice la revista Businessweek en un artículo firmado por un conocedor del país:Tim Padgett. Los inversionistas extranjeros huyeron en masa, el peso generó implosión, la economía se derrumbó”. (Imagen del Golfo).
El empresario declaró que “no existe un sitio en el mundo en el que tengan un mayor compromiso de inversión como lo tiene con Veracruz”. Acción compartida por Javier Duarte, quién le abrió puertas a Odebrecht para entregarle el manejo del agua en casi todos los municipios veracruzanos. Venta o regalo que ha dejado en el olvido el saqueo de Ruiz Carmona, pero sobre todo de Yolanda Gutiérrez Carlín, impunidad descarada y cínica.Mientras aquí quedó consumada la entrega del agua en Veracruz y Medellín a la empresa Odebrecht, esa que fue “corrida” de Ecuador, con graves denuncias en Bolivia, Argentina, Brasil, Venezuela y Perú. Esa empresa en la que Peña Nieto eufóricamente “recibió al empresario brasileño Marcelo Odebrecht, cuya intención es la de invertir en nuestro país en los sectores petroquímica, saneamiento y energía hidráulica renovable, producción de etanol, azúcar y energía renovable de biomasa, y en concesiones carreteras” (El Universal). ¿Un nuevo Higa?
La realidad fue la “aplanadora de votos” del PRI y sus cómplices quienes votaron por la privatización “encubierta”, sin embargo los diputados que votaron en abstención fueron Mónica Robles Barajas, Juan René Chiunti, Gabriela Arango y Jorge Vera; los que votaron en contra fueron Ricardo Ahued, Julen Rementería, Ana Cristina Ledezma, Fidel Robles, Cuauhtémoc Pola Estrada, Víctor Román, Jesús Alberto Velázquez, Ana María Condado y Carlos Fuentes. (Notiver).
Entrega consumada y con ello la explotación a los trabajadores, incrementos al consumo del agua, pésimo servicio como sucede en Perú, y sobre todo apoderarse del vital líquido que hoy por hoy representa, junto a los alimentos, la mayor voracidad de las trasnacionales en el tercer mundo.
Con la privatización de los servicios del agua en municipios veracruzanos se brindan facilidades para que se multipliquen los proyectos hidroeléctricos de las empresas trasnacionales con la venia de las autoridades estatales: denunciaron agrupaciones ambientalistas del estado de Veracruz.
El saqueo continúa: Se licitarán en febrero, 20 mil pozos, de los cuales en 11 mil en la Huasteca veracruzana, además de otros 9 mil en la zona sur del estado, se utilizará fracturación hidráulica, reveló La Vida, y eso que unos 297 pozos ya operan en el estado utilizando el fracking. (Imagen del Golfo).
Pero aún hay más: “La aprobación de la mina Caballo Blanco, de Gold Group, pone en riesgo la seguridad nacional de México, ante el deterioro de nuestro patrimonio cultural e histórico y de nuestra riqueza natural, así como la capacidad productiva y la salud de unos 6,000 habitantes de 70 comunidades aledañas”. (Al Calor Político)
Y esto no se acaba: Ante la posibilidad de ampliar o desarrollar un puerto alterno en Veracruz, ambientalistas advirtieron una catástrofe ecológica ante el daño que provocará a más de mil 600 hectáreas de arrecifes coralinos, la SEMARNAT no pudo, o no quiso, impedir el severo daño al segundo arrecife coralino más grande del país” (Plumas Libres).
Pero, ¿cómo se va a terminar? Si con el ejemplo de la federación basta: El Grupo Higa, la empresa que construyó la casa de la esposa de Peña Nieto y la de Videgaray, podrá volver a participar en la licitación para construir el tren de alta velocidad México-Querétaro cancelada en noviembre, al igual que las demás empresas del consorcio. Mientras el titular de la SCT dijo que” en la nueva licitación del tren de alta velocidad México-Querétaro aseguró que la empresa China Railway volverá a participar. (La Jornada).
La entrega de los recursos naturales y la depredación del medio ambiente son las constantes de estos gobiernos neoliberales, ante una corrupción sin freno, que han dejado en la miseria a la nación.
El Gobierno del Estado de Veracruz mantiene adeudos millonarios con empresarios los que acudieron para hacer frente común y exigir les sean cubiertos los pagos pendientes desde hace 4 años, los dirigentes indicaron que les fue impedido el paso en SEFIPLAN. Es humillante el trato, “Si así tratan empresarios de todas las cámaras, seguramente al ciudadano de a pie que acude para un servicio lo han de sacar a patadas”, aseguró Ricardo Ahued – ¡ojo del PRI! – (La Política).
Y así, aquí, en el paraíso de la fidelidad, el IEV dejo de pagar sueldos a sus empleados, adeudos a la UV provocó retrasó nuevamente en el pago a sus académicos y administrativos y el colmo, la propia Secretaría del Trabajo, la de Infraestructura y SEDESOL, dejaron fuera a más de 35 mil trabajadores del estado sin sueldo y prestaciones.
Mientras el caso de Moisés Sánchez, a 15 días, sigue en el limbo de la ciega justicia, pero eso sí, un ex locutor deportivo, a pesar del rechazo de los abogados veracruzanos, tomó protesta como magistrado y ahora amenaza con presidir el Tribunal Superior de Justicia del Estado, a sabiendas que se incrementan los asesinatos a curas y robos a iglesias; que van al alza las desapariciones de niños y jovencitas; que siguen en aumento levantones, secuestros y asaltos a comercios y casas habitación, y a la par se manifiestan con sartenes, ollas y cucharas reclamando apoyos, que nunca llegan, del Gobierno de Veracruz.
Que chulada: realidades impuestas por las nefastas autoridades. Este mes de junio, el voto nulo, en blanco, las boletas cruzadas se multiplicarán por una sociedad asqueada de la corrupción, el saqueo y la impunidad, que tendrán que cobrarse en el proceso electoral que se avecina.
EfACICO 