por MARÍA GUADALUPE RICO MARTÍNEZ
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en la Ciudad de México a través de su dirigente José Luis Beato invitará con el hashtag # NOVotespor Chapulines a no elegirlos, dirigido a los ciudadanos para que se abstengan de optar por políticos que brincan de un puesto a otro. La Arquidiócesis de México a cargo Norberto Rivera Carrera, también criticó sobre «las limitaciones y lagunas del marco electoral (mexicano)», que permite a políticos vayan saltando de cargos, sin rendir cuentas.
El chapulín es un insecto servido en la mesa de los mexicas, zapotecas y mixtecas y en otras culturas mesoamericanas. La venta persiste en los mercados de Oaxaca, la Merced, Xochimilco, Cuernavaca y en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Aportan significativas cantidades de vitaminas, hasta un 78% de proteínas debido a la alimentación basada en maíz, frijol, trigo, alfalfa o pastos silvestres; minerales como el zinc, magnesio o calcio. Los acrídidos conocidos como langostas, saltamontes, o chapulines son una familia de insectos caracterizados por su gran facilidad para migrar de un sitio a otro y, en determinadas circunstancias, reproducirse muy rápidamente llegando a formar devastadoras plagas.
Que los precandidatos sean “chapulines” es lo de menos. Que sean arribistas, advenedizos, trepadores, etc. ¿Tendrán el deseo irrefrenable de servir? El ciudadano tiene la última palabra. Al pueblo interesa que quienes gobiernen sea tan trabajadores como hormigas o tan inteligentes como los loros, traducido a encauzar sus pasos a mermar lastres endémicos en la canasta mexicana: corrupción, impunidad, pobreza, analfabetismo, contaminación… ¡Lo demás es cuestión de estilos!
DAVOS.-Ante líderes del mundo reunidos en Suiza la ONG Oxfam en el informe “Riqueza: Tenerlo todo y querer más” denunció que el 1% de la población del orbe poseerá la mitad del total de la riqueza, en 2016 y que ello está impidiendo la lucha contra la pobreza a nivel mundial.
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