Por Héctor Saldierna Martínez
El 23 de agosto pasado falleció en la ciudad de México el ingeniero Eugenio Méndez Docurro, distinguido veracruzano, académico y político, innovador y creador del Día Nacional del Ingeniero, instituido por decreto presidencial en el año 1974. La figura de Méndez Docurro tal vez no ha sido valorada en toda su dimensión.
Originario de este puerto, donde estudió la primaria y la secundaria, Méndez Docurro se fue a la ciudad de México para estudiar la vocacional y luego ingresó al Instituto Politécnico Nacional donde obtuvo la distinción de formar parte del Cuadro de Honor.
Estudió la maestría en Ciencias en la Universidad de Harvard y practicó en el laboratorio de Electrónica de la Universidad de Paris en Francia, a cuyo regreso se convirtió en el director general del IPN en el año 1959. De ahí, empezaría a fraguar grandes logros, no sólo para la institución, sino para el país a través del desarrollo de la investigación y su difusión.
Así es que nace el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (CINVESTAV), que se convierte en el brazo fundamental de la investigación en México y luego crea la Escuela Nacional de Física y Matemáticas (ENFM) y el Centro Nacional de Cálculo (CeNac).
A la par, también es el creador e impulsor del Canal 11, cuyo objetivo sería la de difusión de las ciencias y del arte, con la capacidad de abrirse hacia todo el país.
Adicionalmente, Eugenio Méndez Docurro es secretario de Comunicaciones y Transportes de 1970 a 1976 y, paralelamente, es el director fundador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, que se convertiría con los años en el rector de la política científica del país. Sólo con estos logros, evidentemente, configura a un personaje de grandes luces, visionario, innovador y que otorgó al país las bases fundamentales de su desarrollo en base al impulso de la investigación y de la tecnología. Era de espíritu liberal y cuando en alguna ocasión estuvo en este puerto, nos dijo: “Hay mexicanos, que por su manera de ser, son extranjeros en su país”, al referirse a las doctrinas neoliberales que han permeado, lamentablemente para la inmensa mayoría de mexicanos, el quehacer gubernamental.
En el año 2013, cuando el IPN le hizo un homenaje, también se refirió a la importancia de los ingenieros mexicanos y la necesidad de retomar su papel clave en el desarrollo de la Ingeniería.
Eugenio Méndez es el creador del Día Nacional del Ingeniero en virtud que en una ceremonia del Día del Abogado, en 1973, expresó que era inconcebible que los ingenieros no tuviesen un día para celebrar, de manera que por decreto presidencial se instituyó en el año 1974 y es en 1989 que se celebra por vez primera en el puerto de Veracruz, siendo la AMIME la que abandera la celebración y siendo presidente el Ing. José Vicente Ramírez Cortés.
Actualmente los ingenieros aglutinados en el Comité de festejos del Día Nacional del Ingeniero en Veracruz poseen la mejor organización de esta actividad en el país en virtud que varios meses del año confeccionan una serie de actividades académicas, conferencias, visitas técnicas, certámenes de emprendedores y de oratoria que reconfiguran todo un movimiento de formación de las futuras generaciones de la Ingeniería, profesión estimada de las más influyentes para el progreso y desarrollo de la nación.
En este comité se encuentran involucradas la Universidad Veracruzana, el Instituto Tecnológico de Veracruz, el Instituto Tecnológico de Boca del Río, la Universidad Cristóbal Colón, los tecnológicos estatales y universidades politécnicas
FINANCIAL TIMES Y PEÑA
El periódico Financial Times acaba de publicar que Enrique Peña Nieto es el presidente menos querido en México en los últimos 20 años. Las buenas intenciones del gobierno priísta se han diluído y a las promesas de la baja de la tarifa de la luz que hizo en 2012, en este mes de septiembre se incrementa en un 9.3 por ciento. Los desatinos y los innumerables casos de corrupción han llevado a este gobierno apenas a un aprobación del 39 por ciento, cifra inédita.
En contraparte, la sociedad guatemalteca ha puesto sobre las cuerdas al presidente Otto Pérez Molina, quien por actos de corrupción, lo han desaforado y es factible que logren su destitución. Lecciones que en México deben aprenderse ante el reiterado hartazgo ciudadano.
Y hasta la próxima.
EfACICO 