Líderes del comisariado ejidal han puesto en alerta a cuando menos mil 500 habitantes de la congregación de Cerro Gordo con el anuncio de que sus tierras ejidales y de propiedad privada son y no son suyas.
Les dicen que son tierras suyas, porque las habitan y otros las trabajan, que generacionalmente las han venido heredando de abuelos a padres y éstos a sus hijos y sus nietos, pero que hay fallas que se dieron originalmente en sus títulos de propiedad y contratos de cesión de derechos parcelarios y que ahora hay que iniciar nuevos levantamientos catastrales y rediseñar el reparto y distribución de la tierra.
La alarma en cuando mil 500 personas, de origen campesino sobre todo, les ha causado una gran inestabilidad y temores.
De entrada, para «arreglar» lo que está mal les están cobrando seiscientos pesos, pero que se preparen porque deberán cubrir cuotas para las futuras certificaciones y escrituraciones.
El ex alcalde del ayuntamiento con cabecera en Ciudad Cardel, Ricardo Landa Mora, a decir de varios vecinos de esta zona, advierten que les viene anunciando los problemas que enfrentan sobre todo quienes hayan heredado y escriturado a partir del régimen del ex presidente de la república Vicente Fox Quesada.
Sn mostrarles ninguna instrucción, orientación o problemática por escrito a los avecindados en Cerro Gordo, pues todo es de palabra y en asambleas celebradas de manea exprés, les argumentan los miembros del comisariado del lugar que las órdenes para revaluar catastralmente y el origen y propiedad de sus inmuebles, corren a cargo de un señor de apellido Sandoval, quien supuestamente trabaja en la procuraduría agraria.
Lo único cierto es que han logrado inquietar al total de la población, porque de la noche a la mañana les dicen que sus tierras son y no son suyas. Las tienen en posesión, pero que jamás podrán legitimar su uso ni explotación, como quienes la tienen en calidad de viviendas propias, en tanto no se regularice el origen de sus escrituraciones, contratos de donación y otros.
Y culpan de tal irregularidad en la hoja de papel al ex presidente panista Vicente Fox.
Lo grave, que se inquiete a todo un pueblo, porque si en el fondo lo que hay es tratar de generar la inquietud social, ya lo consiguieron, pero su desarrollo y desenlace puede enfrentar consecuencias que a nadie convienen.

* OTRA TERNA, PIDE
CUAUHTÉMOC POLA

Justamente lo que muchos, sobre todo fervientes defensores de los derechos humanos universales, coinciden con el diputado local Cuauhtémoc Pola en el sentido de que si no hay quien convenza de la terna presentada ante el congreso del estado, para elegir al nuevo presidente de la Comisión estatal de derechos humanos, que se presente otra.
Veracruz cuenta con siete millones y pico de habitantes y de entre todos ellos debe haber pruritos en la materia, pero igual, existen los auténticos vigilantes, salvaguardas y auténticos luchadores de los derechos humanos, que no precisamente son los mencionados y puestos sobre la mesa de los debates legislativos.
En esta justa se propone que sean veracruzanos sin ligas con ningún partidarismo ni patrones. Mucho menos que jamás se hayan distinguido por su calidad de ser defensores de quienes hayan sufrido o tenido que afrontar la violación de derechos humanos, dentro y fuera de la esfera del poder público.
El diputado Pola encuentra que la terna propuesta no satisface las expectativas de una mayoría de legisladores locales y entregar la conducción de la CEDH, como ha sido burocráticamente, a un empleado más de las filas dependientes del poder ejecutivo, no es lo que exige una sociedad como la actual. Hace una veintena de años, el rubro francamente podía pasar desapercibido, pero hoy día su problemática entraña la necesidad de contar con defensores que sepan rasgarse la camiseta y dejar de ser simples burócratas, con la intención de sólo ver pasar y no resolver nada.
Al ombudsman hay que exigirle condiciones elementales en su persona y su actuación pasada ante la vida diferente a las que los empleados de gobierno suelen tener, en cualquiera de sus renglones y jerarquías de poder público.
Evidentemente, quien no ha defendido nunca a nadie, huele a burocracia simple y llana, con intenciones de embolsarse los pesos y centavos de un presupuesto, amén de ofertar de su chamba una imagen que no corresponde a la realidad social. Nomás en Veracruz, en los últimos cinco años, han sido ultimadas de manera violenta poco menos de cinco mil personas y la violación de derechos humanos se da todos los días en las esferas del tránsito vehicular, la seguridad pública y el empleo en las distintas trincheras del poder público.
Una mayoría de faltas en este contexto, quedan en la más absoluta impunidad. Y si a ello atribuye usted que el titular de la CEDH sea un burócrata más, que por lo bien pagado que éste sea, rehúya a ver por la problemática de las afectaciones a la ciudadanía veracruzana, en efecto, es justamente exigible una nueva terna, pues Veracruz goza de contar entre su población a verdaderos luchadores por los llamados derechos humanos, con valentía, conocimiento y vocación de servicio.

* BOMBEROS, DE SIEMPRE
VIVEN DE LA CARIDAD PÚBLICA

Siendo el cuerpo de Bomberos una institución de servicio a la comunidad en cualquier parte del país y el mundo, cómo es que no esté incluido su mantenimiento en las partidas del erario público en cualquiera de sus jerarquías burocráticas y políticas.
El comandante Ernesto Flores Tlapa, quien ejerció la administración de los Bomberos por espacio de medio siglo, que vive aún, ha advertido que dicha corporación prácticamente ha vivido y vive de la caridad pública.
Al sacrificado ciudadano y contribuyente del fisco municipal le están pidiendo que de manera espontánea destine diez pesos de sus bolsillos al sostenimiento de la corporación de los traga-fuegos, pero es la hora también de elevar una reflexión al aire de por qué no invitar a los partidos políticos, que se cargan con millonarios presupuestos, destinen un dos, tres y hasta cinco por ciento al sostenimiento de una noble institución como es la de Bomberos.
En efecto, Bomberos está cayéndose debido a lo derruidas que se encuentran sus instalaciones. Carece de espacios adecuados, les faltan unidades automotrices, elementos de trabajo y amenaza con cerrar dos de sus cuarteles, tan sólo porque les resulta imposible a sus actuales administradores ver por más por sus rentas, el pago de salarios y las reparaciones en los inmuebles que ocupan, y que por el uso y paso del tiempo sufren un deterioro descomunal.
Es verdad que los Bomberos demandan una sobrevivencia con dignidad, pues se trata del heroico cuerpo que salva vidas y conserva inmuebles cada que se provoca un siniestro, como es el común de los incendios. Su cuerpo de elementos debe estar en constante capacitación y adecuarse a los requerimientos de una época como la que se vive con grandes y sustanciales exigencias.
Lamentablemente, en otras partes del mundo el cuerpo de Bomberos forma parte de los servicios que el estado brinda a la población y por ende goza de tener una partida presupuestaria para su sostenimiento y operaciones de salvaguarda de la sociedad, que enfrenta el riesgo de tener que enfrentar un incendio de las proporciones que usted quiera.
Por qué no en México, y particularmente en Xalapa, debido a que las condiciones en que desarrollan sus actividades son muy lastimosas. Una cooperación de contribuyentes del predial, si la brindaran todos, aliviará la tensión de dicha institución unos días y semanas, pero y el resto, cómo van a sobrevivir. Es la pregunta de los 64 mil pesos y que la ciudadanía no puede responder accesiblemente, porque ésta se encuentra harta de tener que pagar y más pagar tributaciones por todo.