VERACRUZ NO ES EL PRIMER AYUNTAMIENTO DE LA AMÉRICA CONTINENTAL, SEGÚN MANUEL B. TRENS


ayuntamiento
por Mario Jesús Gaspar Cobarruvias.

Una producción de Mario Jesús Gaspar Cobarrubias, egresado de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana
Una producción de Mario Jesús Gaspar Cobarrubias, egresado de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana

A mediados de la década de 1980, el Ayuntamiento de Veracruz concibió la falacia de que esta ciudad, fundada en el año de 1600, es el primer ayuntamiento de la América Continental. Se trata de una afirmación que carece por completo de fundamento histórico, arqueológico y de reconocimiento internacional por España y otros países latinoamericanos, cuyos territorios fueron partícipes de la primera etapa de la conquista española entre 1492 y 1519 (Colombia, Panamá, Cuba, República Dominicana, etc.).

Lamentablemente, esta mentira histórica ha seguido propagándose hasta la actualidad, a veces de buena fe y a veces irresponsablemente, englobando no solo a la ciudad de Veracruz sino también al vecino municipio de La Antigua y la ciudad de Tepeaca en el Estado de Puebla. En un afán por glorificar innecesariamente la historia local y gastar recursos económicos en festejos y pedir reconocimientos que deberían ser examinados y confirmados históricamente antes de efectuarse, por respeto a la misma población que confía en la seriedad de quienes difunden su misma historia, cuya versión falsa y deformada se pretende continuamente imponer.

Sin contar el ridículo y descrédito internacional al que se expone a las poblaciones, instituciones y sus autores en esta época en que las nuevas tecnologías de información han puesto al alcance del usuario promedio las fuentes historiográficas para nutrir responsablemente sus afirmaciones y publicaciones, e investigar no es ya un gusto, sino un deber profesional. Cuanto más que si la versión mal o nada fundamentada parte de grupos particulares y estos involucran a las autoridades, debe señalarse que estas representan y se deben a todos los ciudadanos, no a los intereses de unos cuantos por más importantes que puedan ser. Por lo que están obligadas a verificar y corregir si es necesario, la historia que difunden o tratan de imponer bajo la forma de reconocimientos, decretos, eventos o publicaciones masivas.

Además de las repetidas veces que el Instituto Nacional de Arqueología e Historia (INAH) ha emitido su aclaración sobre estos temas a las autoridades municipales, empeñadas en continuar por este sendero equivocado, como es el caso del municipio veracruzano amonestado por el investigador Daniel Nahmad, ex director del INAH Veracruz, el 7 de mayo de 2009, quien mencionaba -apoyado por una extensa documentación histórica- que el alcalde Jon Rementería Sempé «institucionalizaba la mentira» al convertir la frase, «Veracruz, primer municipio de América», en lema de su gobierno.

Y sin olvidar que en la actualidad, no hay carencia en el Estado de Veracruz de historiadores, arqueólogos e investigadores a quienes delegar esta tarea, por su formación tanto académica como por su experiencia en el trabajo de campo.

El seguimiento de las expediciones españolas señala claramente que el primer ayuntamiento en el continente americano estuvo en la Villa de la Isabela fundada en 1494 y cuyo primer alcalde fue el contino don Antonio de Torres. Y el primer ayuntamiento en tierra continental fue el de la ciudad de Santa María de La Antigua del Darién fundada en 1510 y cuyos primeros alcaldes fueron Vasco Núñez de Balboa y Juan Zamudio. Estos asentamientos fueron ratificados por los reyes españoles en 1494 y 1515, mucho antes de la llegada de la expedición de Hernán Cortés a la costa veracruzana en 1519.

Por la parte arqueológica, fueron confirmados antes y después de 1992, año en que se celebró el Quinto Centenario del Encuentro de Dos Mundos, por expediciones españolas y de la Universidad Nacional de Colombia. Por la parte bibliográfica, hay que destacar que los nombres y ubicación de estas dos poblaciones nunca fueron secretos ni escapaban al conocimiento de los historiadores desde siglos antes. Uno de los mejores ejemplos, lo da precisamente Manuel B. Trens en el tomo II de su obra sobre Veracruz al detallar cronológica y geográficamente el proceso de conquista y afirmar, en consonancia con las evidencias historiográficas que décadas después, han sido confirmadas por la arqueología: Veracruz no es más que el primer ayuntamiento de la Nueva España, cuya extensión territorial abarcaba en 1821, al país hoy conocido como México. Y ese ayuntamiento estuvo asentado en la Villa Rica de la Vera Cruz, hoy llamada La Antigua, desde 1525 hasta su extinción entre 1782 y 1786, cuando las reformas borbónicas del rey Carlos III suprimen las alcaldías mayores (como la de La Antigua) y establecen subdelegaciones y las 12 intendencias de la Nueva España.

Manuel Bartolomé Trens Marentes nació el año de 1895 y falleció en la Ciudad de México en 1963. Fue médico, historiador, periodista, jefe de Investigaciones Históricas en Veracruz y director del Archivo General de la Nación, cargo que ocupaba al morir. Fue uno de los historiadores más destacados de su generación, en la década de 1940 y escribió las historias estatales de los estados de Chiapas y Veracruz. Esta última titulada HISTORIA DE LA CIUDAD DE VERACRUZ Y DE SU AYUNTAMIENTO publicada en 1955, ha sido una de las fuentes bibliográficas más consultadas por historiadores e investigadores de la historia veracruzana, dado el gran acopio de documentos que logró el autor para redactar esta colección de casi 10 tomos.

Declarado contrario al oficialismo de la historia que se construye sobre héroes y villanos satánicos, idealizando o deformando personajes históricos, ocultando o inventando hechos para complacer y favorecer los intereses del gobierno y grupos de particulares, labor en la que no pocos historiadores se hacen serviles y ayudan a construir la «verdad oficial», Manuel B. Trens consideraba que la historia debía apegarse a la realidad y si bien, debía ser escrita con imaginación, esta no debía convertirse en fantasía.

Dejó escrita una frase todavía muy apropiada para estos años del siglo XXI en relación a quienes, con diferentes grados de preparación y motivaciones personales, escriben, investigan y hacen difusión de la historia:

«La historia no es leyenda ni es novela, en las que se inventa lo que no se sabe. Yo soy admirador de la fecunda imaginación de Brasseur de Bourbourg [autor del Viaje al Istmo de Tehuantepec, 1859-1860] pero me cuido mucho de imitar sus brillantes fantasías»

BIBLIOGRAFÍA:

Trens Marentes, Manuel Bartolomé. HISTORIA DE VERACRUZ, TOMO II, LA DOMINACIÓN ESPAÑOLA 1519-1808, Pág. 21-24. Reeditada, Secretaría de Educación y Cultura, Gobierno del Estado de Veracruz, Xalapa-Enríquez, Ver. México, 1992.

FUENTES ELECTRÓNICAS:

LA CONSTRUCCIÓN DE LA MEMORIA: MANUEL B, TRENS Y SUS HISTORIAS ESTATALES, José Ronzón León, Universidad Autónoma Metropolitana Azcapotzalco, Departamento de Humanidades, junio de 2000: http://zaloamati.azc.uam.mx/…/la_construccion_de_la_memoria…

1 comentario

  1. Fua demasiado pedante este tío y pues valga la redundancia le da demasiadas vueltas que espero alguien le haya dado una hostia a este gilipollas

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