por Marco Antonio Aguirre Rodríguez
El triunfador de las elecciones del domingo fue la sociedad de Veracruz, que decidió que quien la gobierne en los próximos dos años sea Miguel Ángel Yunes, de manera indiscutible y por donde quiera que se le vea.
De hecho el conteo de votos, incluso casilla por casilla, así lo va apuntalando.
Esto de abrir las urnas y recontar boleta por boleta les está saliendo contraproducente.
De hecho esta fue una estrategia en donde el tiro les salió por la culata, por que en muchos distritos lo que ocurrió fue que la recuperación de votos se dio para la coalición PAN-PRD.
En contraparte a la coalición del PRI, al Revolucionario Institucional se le han restado votos, porque algunos que fueron emitidos para sus aliados se los contabilizaron.
Por ejemplo, en el distrito XV, después del conteo de la elección para gobernador aparecieron 5,000 votos perdidos, pero que eran de Miguel Ángel Yunes.
En el distrito X, de Xalapa I, después del recuento la modificación de resultados fue de 6 votos para Morena, 5 para la alianza PAN-PRD y 1 para el Partido Cardenista.
No hubo votos perdidos y encontrados para la coalición PRI y aliados.
En Medellín, el conteo también les fue desfavorable, pues la “recuperación” fue para Miguel Ángel Yunes, a quien se le sumaron 2,300 sufragios más.
Así pues, con estos resultados, ¿cómo quieren revertir la elección?.
El PRI quiere abrir todas las casillas, en una acción fuera de la norma, pues el Código electoral menciona que esto se hará sólo cuando la diferencia entre el primero y el segundo lugar sea de menos de 1% del total de la votación emitida.
La diferencia es mucho mayor.
El PREP marca casi 4 puntos de distancia.
Hablaron de 90,000 votos perdidos.
Pero aún con esos, las cuentas no le dan al PRI para alcanzar al candidato ganador, que en el PREP les llevaba 106,433 de diferencia.
Patadas de ahogado, nada más.
Pero además el PRI y sus aliados luchan contra un descrédito fuerte y creciente entre la sociedad, que con su voto y sus reacciones posteriores confirmó que el sufragio a favor de Miguel Ángel Yunes lleva implícito el reclamo de acción legal contra Javier Duarte y sus cercanos.
El video que Javier Duarte emitió donde afirma que “mi gobierno y mi persona fueron objeto de diversos cuestionamientos sin fundamento, a costa del descrédito de las instituciones”, sólo sirvió para confirmar la animadversión contra su persona.
En cada sitio donde el mismo fue colgado, los comentarios en contra llegaron hasta el insulto total.
Por ejemplo, dos posts colocados:
“Y este ya perdió las poquitas neuronas que le quedaban, porque lo que dice no es sentir político, es el sentir de todos los veracruzanos agraviados por el y su pandilla
Ahora resulta…
Cínico..!!”
“Lo felicito señor por su discurso muy bueno se le olvida toda la inseguridad que existen en el estado ya se le olvido la muerte de los periodistas ya se olvido los desaparecidos no señor cree que Veracruz salio a votar el domingo nada más x venganza estamos artos de tanta impunidad se lleno los bolsillos del vuelva lo que se robo y a la cárcel ..”
Lo peor para el PRI es que en este conteo sus aliados no lo están apoyando, porque además ellos se sienten traicionados por la cúpula de este partido.
A todos, absolutamente a todos, les aplicaron la acción de que les pidieron listas de sus posibles votantes y la noche anterior personas que se dijeron enviados desde el PRI les decían a los votantes que la acción para el 5 de junio era que todos sufragarán por el PRI, para no dispersar los votos.
Esto obviamente llevó a que el número de sufragios a favor de cada uno disminuyó.
A esta acción culpan de la perdida del registro que sufrirán 6 de estos partidos y que llevará a que desaparezcan el AVE y el Partido Cardenista.
En Veracruz, los terrenales decidieron por la opción que ofrece perseguir a Javier Duarte y su camarilla, para hacerlos pagar.
Que no le quede duda a los que se siguen considerando los grandes místicos de la entidad.
EL PRI PERDIÓ POR EPN Y POR DUARTE: JM DIEZ. Hay ratas que abandonan el barco cuando ven que se hunde, pero hay hombres que se quedan a rescatarlo.
Juan Manuel Diez Francos, el alcalde de Orizaba, es de los que abandonan el barco.
Este jueves 9 de junio declaró que la derrota del PRI en la zona de Orizaba fue un voto de castigo para este partido por la mala gestión del presidente de la República y del gobernador.
Juan Manuel Diez es parte del fidelato, de los círculos cercanos, de negocios.
Pero ahora dice que su gestión no dependió del gobierno del estado, si no que él obtuvo recursos de la federación.
Juan Manuel Diez es (¿o era) tan cercano al fidelato que esta corriente lo impuso a Héctor Yunes, quien lo anunció como uno de sus probables integrantes de su gabinete.
Pero hoy Juan Manuel Diez quiere romper amarras con esa corriente que lo llevó al poder dos veces y que le dio múltiples oportunidades de negocio.
Ante esto Martín Cabrera Zavaleta, exalcalde de Orizaba de 2001 a 2004 dijo que el voto de castigo en contra del PRI en la zona de Orizaba se dio sobre todo por la mala gestión de Juan Manuel Diez, además del presidente Peña Nieto y el gobernador Javier Duarte.
En Orizaba, Morena arrasó en las elecciones. “Es un voto de castigo contra el alcalde, porque aumenta impuestos y se desconoce que hace con los recursos que ingresan por el Teleférico, Expori y los parquímetros”.
La acción para el 2017 y enfrentar a Morena, la emprende Martín Cabrera organizando un frente con diversos grupos políticos “para quitar al mal gobierno” de Orizaba.
Juan Manuel Diez ya demostró cual es su grado de lealtad al fidelato.
Y eso muestra que tan confiable es.
EfACICO 