CLEMENTINA GUERRERO,
UN ARRIBO OPORTUNO

Académica y autoridad administrativa a la vez por espacio de 35 años cuando menos al servicio de la Universidad Veracruzana, es la CP Clementina Guerrero, oportunamente designada como secretaria de Finanzas y Planeación, en lugar de Antonio Gómez Pelegrín.
Encargada de la mesa de entrega-recepción, Clementina Guerrero tendrá así la oportunidad de saber con antelación a dónde se fueron las montañas de dinero público que los veracruzanos vienen exigiendo al gobierno del estado, que hizo su antecesor, y podría confirmar, antes de iniciar gestiones el nuevo gobierno, que el régimen saliente estaba pagando adeudos de doce años y no de los últimos seis años.
Tula Guerrero, como la identifican mejor sus contemporáneos de la academia y la administración universitaria, atendía la secretaría de finanzas de la máxima casa de estudios y entre sus objetivos del cargo que desempeñaba era precisamente cobrar a Sefiplan los 2 mil 400 millones de pesos que sigue adeudando el estado a la Universidad Veracruzana.
La CP Clementina Guerrero había endurecido en su gestión, para que el gobierno del estado cubriera su viejo adeudo con la casa de estudios. Hoy tendrá la oportunidad de oro para saber en dónde o en qué fueron invertidos los recursos monetarios que vinieron de la Federación y tendrían por destino la caja de caudales de la máxima institución universitaria.
Formada profesionalmente en la facultad de Comercio, de la cual pasó a la administración de la máxima casa de estudios, siendo rector de la misma el extinto Roberto Bravo Garzón, ganó la aceptación de sus titulares y la comunidad universitaria en aras de su vocación de servicio, dedicación y un ejercicio que la hizo distinguirse lo mismo en el rubro de la administración, como de la impartición de la cátedra.
Cuando faltan quince días para el relevo constitucional de gobierno del estado, Clementina Guerrero además de encargarse de la recepción de la secretaría de finanzas por parte del gobernador electo, asumió la titularidad de la dependencia, lo que le permitirá avanzar con mayor celeridad para saber la histórica realidad del affaire de que fue objeto la administración estatal, amén, por supuesto, de que estará en condiciones de evidenciar a los responsables no sólo del sexenio, sino de doce años atrás, del mayúsculo saqueo que tiene el borde de la ingobernabilidad a la entidad toda de Veracruz.
Su designación por parte del gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares, obedece al compromiso de hacer las más importantes designaciones de su equipo de trabajo a egresados de escuelas y facultades de la Universidad Veracruzana.
El acertado nombramiento de Clementina Guerrero, se asegura que tendrá un doble fin, uno, el consistente en saberse con pelos y señales el monto del saqueo que se hizo con las finanzas públicas de Veracruz y, por otro lado, hasta donde sea posible, identificar a los responsables del mismo, así cómo saberse en dónde y hacia qué rumbo fueron aplicados o gastados tanto el presupuesto de Veracruz, como descubrirse de una vez por todas si el bache financiero es de 85 mil millones de pesos, o dicha suma es superior a la cifra que se cita líneas arriba. Al tiempo.
* MÉXICO DEBE ACELERAR
LA APERTURA DE EMPLEOS
En el curso del mismo 20 de enero del próximo año de 2017, las acciones para repatriar a millones de compatriotas se va a dar conforme a los pronósticos que hace el personaje que ocupará la secretaría de la defensa nacional, luego de que el señor Donald Trump asuma los poderes de la nación más influyente del mundo.
La advertencia obedece a la amenaza que Trump difundió todos los días de su campaña preelectoral.
Una cosa es la gira para ganar votos y otra gobernar, bueno, pues el magnate que además dijo que devengará un sólo dólar como salario anual los cuatro años que ejerza la administración de gobierno, igual, anunciaría que una vez que asuma el control del país, echaría fuera a 3 millones de indocumentados sobre todo mexicanos y musulmanes, lo que provocará que México por igual, prepare el terreno para poder brindarles la oportunidad del empleo emergente, porque de otra suerte, se generará un doble contrasentido a cualquiera de las políticas públicas que siga pregonando el régimen federal de turno, consistentes en que hay una excelente vecindad, que los gringos y aztecas se quieren y que los gobernantes tendrán que ver por la tranquilidad y seguridad laboral de ambas sociedades.
La noticia, además de grave, es muy alarmante, porque contra lo predecible en apariencia nada se puede instrumentar que salve el barco de irse a la deriva.
La administración de Barack Obama ha endurecido el éxodo del mayor número de compatriotas en los últimos cuatro años sobre todo, a diferencia de los anteriores gobiernos igual encabezados por mandatarios demócratas que republicanos.
Sin embargo, el ejercicio de una fina diplomacia por parte del demócrata Barack Obama, evitó que las cosas pasaran a mayores y que concluyeran en un escándalo, como es el que está por ventilarse en las calles y ciudades estadounidenses. El presidente de estreno gozará seguramente de contar con la aceptación del 70 por ciento de blancos que sufragaron en favor suyo en las urnas electorales, al anunciar y llevar a la práctica la repatriación masiva de latinos y particularmente mexicanos.
El suceso, se cuenta en todos los corrillos, podría asemejarse a lo que está sucediendo en países del oriente, cuyas masivas migraciones están siendo recibidas a cuentagotas por las naciones de Europa Occidental. Y más atrás, existen quienes comparan el futuro inmediato de legiones de aztecas huyendo de tierras yanquis, como pasó a los seis millones de judíos que fueron atrapados por el führer austriaco-alemán Adolfo Hitler y posteriormente confinados en los campos de concentración nazis, en donde fueron torturados y luego cremados en los hornos construidos con tal fin, por el propio imperio germano de los años 30 del siglo XX.
Lo que ahora se cuenta en Estados Unidos de Norteamérica, mantiene con los cabellos erizados a millones de ilegales que consideran una osadía siquiera imaginar su éxodo y, sobre todo, que deban aceptar la desintegración de sus familias, separando a los jefes de las mismas de sus mujeres e hijos, lo cual sería de consecuencias funestas para todos ellos.
El aislamiento, xenofobia y misoginia que ha desatado el discurso de Donald Trump entre los gringos, no encuentra paralelo. El terror acompaña a propios y ajenos a la nación más poderosa del mundo, lo que nadie en este momento entiende por qué está pasando, debido a que si algo saben los gringos, es la necesidad que tienen de que los mexicanos sigan realizando las tareas que aquellos simplemente son incapaces de promover, no obstante que gocen de contar con las montañas de dólares en sus bolsillos. Por favor.
* MÁS QUE LA INDIGNACIÓN, ES
EL HASTÍO QUE PADECE EL PUEBLO
Más allá de la nota de repudio al secuestro de un sacerdote muy querido por la comunidad, es el hastío provocado de todo un pueblo contra la violencia originada por los caciques regionales, el hartazgo de que sus comunidades no se desarrollan y que la mentira de los políticos pareciera que ha sido siempre.
Consecuentemente, la protesta social explotó a la manera de una olla exprés en pleno desajuste.
Lo ocurrido en Catemaco es apenas la gota que derramó el vaso de agua, en una región que aparentemente permanecía ajena al tránsito de cosas que todos los días suscriben páginas infames para la historia chica de un estado monumental como es el veracruzano.
Es cierto que los representantes de la Iglesia, los hombres de sotana, o muchos de ellos, son el último asidero de que se agarra una sociedad, cuando ha perdido la confianza en los hombres públicos, le cuesta mucho tener fe en el porvenir, no confía ni cree en nadie y el discurso que escucha es el mismo de siempre, así que el rapto de un sacerdote simple y llanamente le provoca a estallar en mil pedazos la escasa tranquilidad y paz social existente ente sus habitantes.
La quema de patrullas policiacas, el incendio y saqueo al palacio municipal, el ataque al alcalde que ha ostentado o chupado el erario público municipal toda su vida, gracias a ser parte del cacicazgo regional, el robo a su domicilio particular, seguramente son demostrativos de que el descontento va más allá del levantón a un sacerdote católico.
El pueblo está harto de la mediocridad en que sobrevive, a la falta de oportunidades y de bienes de consumo y disfrute de los recursos que parecieran estar destinados a los patrones que mandan y roban y matan, en aras de imponer sus órdenes y modelo de sobrevivencia a seguir para sus habitantes, que en esta ocasión, finalmente, se sumaron en una sola persona, salieron a la calle, condenaron el secuestro, pero incurrieron en la absoluta desobediencia civil atacando patrullas policiacas e irrumpiendo en la casa del pueblo, como debe ser seguramente la residencia confortable del alcalde que repite en la explotación de la ubre presupuestaria de Catemaco.
Seguramente lo ocurrido al prelado católico y al pusilánime alcalde del lugar, Jorge González Azamar, hoy fue el pretexto para demostrar todo un pueblo su rebeldía y hartazgo en que lo mantiene la mediocridad del trabajo público y el rezago que alcanza todos los niveles de lo social de los habitantes de la mal llamada «Suiza veracruzana». Es todo.
