por Celia Rosado Romero
En diciembre del 2012 reflexione sobre la promesa de Peña Nieto en su meta de incrementar la calidad y la equidad educativa y que actualmente Nuño retoma con un discurso alegre sobre los beneficios que se han obtenido.
Un cinco del mes en referencia redacté sobre la temática, tanto en cobertura como en calidad, deberá ser desde un marco de compromiso y ética, abanderado por la autoreflexión del quehacer educativo por parte de los protagonistas.
Los discursos tanto del Presidente de la República como del Secretario de Educación deberían de recordar la promesa, para ser autocríticos al reconocer que no se ha cumplido lo que en esa fecha se anunció.
Para ser realistas y que sea el lector el que se convierta en el reflexivo y darle a los dos su respuesta de mi interrogante anterior: Suena a panacea, ¿no lo cree?
Reimprimo lo publicado, con el objeto de no pecar de incrédulo, dejemos que usted lector decida, si cree o no se alcanzaron, las intenciones que se anunciaron para esa meta (calidad y equidad educativa) en el sexenio.
Con la aprobación de algunos estados, entre ellos Veracruz, de la Reforma Educativa, presentada desde principios de diciembre, que reforma y adiciona diversos disposiciones de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, contempla algunos elementos que pueden ser el parteaguas de un antes y después de las estrategias políticas educativas del país para enfrentar el crecimiento en el desarrollo social y económico de la nación.
1.- Escuelas de tiempo completo con jornadas de ocho horas de duración, con alimentos nutritivos, habilidades artísticas y deportivas, para niños y jóvenes.
2.- Escuelas dignas: luz, agua, baños, mobiliario, equipo e instalaciones en buen estado para las escuelas de todas las comunidades indígenas del país.
3.- Alcanzar la cobertura universal en educación media superior.
4.- Otorgar becas educativas y fortalecer los albergues para niñas y jóvenes indígenas para promover su acceso, permanencia y conclusión de todo el ciclo escolar.
5.- Que más jóvenes asistan a la universidad: aumentar a 45% la cobertura en educación superior.
6.- Becas para que los niños y jóvenes no abandonen la escuela por falta de recursos.
7.- Ampliar y actualizar el equipamiento de la Red Nacional de Bibliotecas y la instalación de nuevos instrumentos digitales que faciliten el acceso al conocimiento.
8.- Dotar de Mochila Completa a los niños de escuela primaria pública, con libros de texto y útiles escolares.
9.- Computadora portátil con acceso a internet para los niños de quinto y sexto de primaria.
10.- Seguro de accidentes escolares para alumnos de preescolar, primaria y secundaria.
Es muy fácil prometer, pero que difícil es cumplir.
Ante ello recurrimos, como en otras ocasiones, a la filosofía popular con el refrán: prometer no empobrece, es el dar el que aniquila, lo que significa Las palabras no cumplidas no cuestan nada, pero no siempre se quiere cumplir con la palabra dada.
EfACICO 