El reporte del cóndor: + ¿Será el próximo Secretario de la Defensa, el general Salvador Cienfuegos Zapata? Freno a los acelerados priistas que ya se ven en puestos de Enrique Peña Nieto + Mientras la morralla se aglutina para defender la democracia, los coordinadores del PRD ya negocian acuerdos parlamentarios+ La sucesión por la presidencia municipal en Xalapa, manejada a la antiguita+ El corporativismo que ya no debe prohijar el PRI

• 

  ¿Será el próximo Secretario de la Defensa, el general Salvador Cienfuegos Zapata?

• Freno a los acelerados priistas que ya se ven en puestos de Enrique Peña Nieto
• Mientras la morralla se aglutina para defender la democracia, los coordinadores del PRD ya negocian acuerdos parlamentarios
• La sucesión por la presidencia municipal en Xalapa, manejada a la antiguita
• El corporativismo que ya no debe prohijar el PRI

Se comienza a manejar con insistencia el nombre del general Salvador Cienfuegos Zapata como el más viable candidato a ocupar la Secretaría de la Defensa Nacional en el próximo gabinete presidencial de Enrique Peña Nieto. La cercanía al mexiquense, forjada durante el gobierno del hombre de Atlacomulco, y su estilo tradicional, severo y discreto, quizás excesiva y rigurosamente discreto según dice la experta en militares, Isabel Arvide, son factores que pueden inclinar la decisión hacia su persona. Se habla incluso de que ya cumple algunas encomiendas especiales para tal fin, en las operaciones de toma de mandos que ya muchos futuros secretarios de estado están aplicando en las primeras tareas del peñismo en México.

Otro peso a su favor puede ser la recomendación que pudiera hacer a su favor, con base a su hoja de servicio intachable, el ex procurador general de la república y ex Secretario de Seguridad Pública, Eduardo Medina Mora, de quien se dice tiene cercanía con Peña Nieto, ya que precisamente durante el inicio de l sexenio calderonista mandó a investigar al general Cienfuegos respecto a sus nexos con el narcotráfico, obteniendo informaciones de la DEA de que  no había tales ni sospecha alguna respecto al militar.

En la terna de aspirantes al más alto cargo militar del país, también se mencionan los nombres de los generales Carlos Demetrio Gaytán Ochoa, quien sin embargo tendría fuerte oposición de los militares resentidos con lo acontecido durante la gestión del actual Secretario de Defensa, Gral. Guillermo Galván, puesto que Gaytán Ochoa es considerado su hombre fuerte. Sin embargo, cabe señalar que Salvador Cienfuegos también aparece como uno de los militares ubicados en las cercanías del general Galván, aunque se afirma que por otras razones llegó ahí.

Otro aspirante a la Secretaría de la Defensa es el general Augusto Moisés García Ochoa, a quien los rumores le atribuyen la filtración de la compra costosísima de equipo de espionaje y telecomunicaciones y que fue noticia fuerte en meses pasados. Este militar tiene ascendencia sobre gran parte de la clase militar, incluidos los tradicionales en pugna con la actual política panista militar.

También está el general  Luis Arturo Oliver Cen, quien es otro de los hombre fuertes del general Galván, que tiene a su favor un amplio conocimiento de la guerra contra el narcotráfico. No es, sin embargo, del agrado del bando militar disidente del actual mandato militar. Otro conocedor de la guerra contra el narcotáfico que se menciona también para la Defensa Nacional, es el General Marco Antonio González  Barrera.

La extraña mención del general Roberto Miranda como otro aspirante a la Secretaría de Defensa no deja de llamar la atención, dada sus aparentes escasas posibilidades de llegar al cargo, por ser ya un militar retirado.  ¿Quién está filtrando su nombre y por qué si tiene escasas posibilidades por tener condición de ser civil, en estos momentos? En realidad se abona a la confusión con la homonimia  con el otro Roberto Miranda, figura clave en el entorno de Peña Nieto.

Freno a los acelerados priistas que ya se ven en puestos de Enrique Peña Nieto

Desde el núcleo central del peñismo se lanzan ya señales de lo que será el estilo de gobierno de Enrique Peña Nieto, según algunos analistas, que cuentan como le dieron ya estáte quieto a Ivonne Ortega que se veía ya en la Secretaría de Desarrollo Social, para el cual simplemente otro nombre que ahi irá asignado, y no la política yucateca.

Caso semejante de muchos gobernadores priistas que se dicen amigos de Enrique Peña Nieto, sin haberlo demostrado en los hechos electorales. que filtran por ahí un llamado que, si se da, no será sin duda alguna a ningún puesto de alto nivel en el gabinete, es más ni a un segundo nivel, ni tercero, quizás a un cuarto, si no es que a ninguno.

Mientras la morralla se aglutina para defender la democracia, los coordinadores del PRD ya negocian acuerdos parlamentarios

Cabe señalar que el mismo día, ayer, que se aglutinaban manifestantes en las afueras del Tribunal que desechó la demanda de nulidad  de elecciones propuesta por  la coalición de izquierdas, en el aristocrático centro de convites en la La Hacienda de Los Morales de Polanco, se reunieron para preparar acuerdos parlamentarios, todos los coordinadores de las bancadas del PRI, PRD y PAN en el Senado y en la Cámara de Diputados, Emilio Gamboa y Manlio Fabio Beltrones; Miguel Barbosa y Silvano Aureoles así como Ernesto Cordero y Alberto Villarreal, en una charla que duró tres horas.

Ahí, los coordinadores de las bancadas parlamentarias del PRD, según comentan fuentes periodísticas del DF, afirmaron que luego de la experiencia vivida en las cámaras de Senadores y Diputados durante los pasados 6 años, en donde hubo momentos muy graves de violencia y tensión, lo que pretenden ahora es evitar caer en las confrontaciones y caminar hacia la construcción de una izquierda moderna y muy participativa.

Agregaron que los que sigan a López Obrador, en las izquierdas, serán los menos, y que ellos dejan en libertad a quien desee protestar, pero no están en vías de deslindarse de las posibilidades de acuerdo con el nuevo gobierno que entrará en funciones en diciembre de este año.Política a la antiguita, la manera como los priistas veracruzanos se mueven por las alcaldía.

La sucesión por la presidencia municipal en Xalapa, manejada a la antiguita entre los priistas

Al más puro estilo de los años sesentas, los aspirantes priistas a la alcaldía de Xalapa mueven sus corazoncitos a través de la prensa, como si ésta fuera el canal adecuado para dirimir sus ambiciones de estar en el encargo de cuatro años al frente de la capital del estado.

Las filtraciones son sorprendentes, porque incluyen a Reynado Escobar Pérez quien, después de los sucesos del 1 de julio, como que no puede manejar como su principal fuerza el tener contacto con todas las colonias de Xalapa;  otra incluye  a Américo Zúñiga Martinez de quien,  se dice, se la deben porque la candidatura se la arrebató Elizabeth Morales por no se sabe que extrañas artes desconocidas  al negociarlo con Fidel Herrera Beltrán. Él que también abona  para ser visto es Ricardo Ahued que nuevamente se ufana de no ser priista, aunque a la hora de cobrar y levantar el dedo en la cámara lo haya hecho en bloque tricolor como es el caso del aumento al precio de las gasolinas, y de quien se dice sería un candidato fuerte por conocido y poco maleado (????).

Y sorprende que también abone a la prensa,  sea Juan Antonio Nemi, que siendo cordobés, pero avecindado en la capital del estado por muchos años también quiere mojar su plumita en la disputa por la alcaldía.

¿No sería una buena señal de que las cosas en el PRI están cambiando en la nueva era del peñismo el que todos se quitaran la discrecionalidad y contendieran abiertamente por el puesto, haciendo campaña y sometiéndose a una votación directa de asamblea de delegados municipales priistas?

¿Para qué ese disimulo ridículo de quiero pero no quiero porque me disciplino, estoy a la orden pero sólo si me lo ordena el primer priista del estado, no me muevo porque no salgo en la foto?

Hoy más que nunca, al menos en Xalapa, es necesario mucho trabajo e imaginación para ganarse la credibilidad de una gran parte de la población que, al parecer, ya no es mayoritariamente pro prista.

Y ojalá fueran incluyentes porque hasta ahora solo los «divis divis» son mencionados como precandidatos, olvidando a otros que durante años, con trabajo y militancia corroborables, les han dado el portazo en las narices cuando se quieren apuntar para competir, como es el caso del Antropólogo Rafael  Pérez Sánchez, a quien ni siquiera lo dejaron inscribirse en la disputa por la candidatura para la diputación federal , con tal de proteger a Reynaldo Escobar, con los resultados desastrosos ya de todos conocidos.

No cabe duda que urge un buen baño en aguas de la democracia al priismo veracruzano que, viendo la tempestad que viene , no se hinca.  Ahora que han sido dejado al garete por el priismo nacional, es momento de mostrar que al menos son imaginativos, creativos y decididos  a hacer diferentes  los estilos de hacer política en Veracruz.  Quizás así, les levanten el castigo o, al menos,  ganen en la guerra municipal que viene.

El corporativismo que ya no debe prohijar el PRI

Como otra muestra del arcaísmo que debe desaparecer del nuevo PRI que viene, es dejar de apapachar a esos líderes sempiternos de variadas organizaciones con tintes corporativos que no representan más allá del membrete que se ganan con trampas y argucias antidemocráticas. Tal es el caso de esa venerable momia del movimiento ferrocarrilero,  Victor Flores quien hace unos días, tras una asamblea cuasiprista de elección directa y al unísono de levantar los dedos, fue reelecto como líder de los ferrocarrileros por otros seis años más. Imagínese, un sindicato con miembros en extinción que persiste nomás por ambición del mencionado político que desea, con su membrete, volver a ser incluido en cualquier aspiración a puesto de elección popular en el futuro, con todo y que es un carcamán de  los que arrastra el PRI como ominoso pasado.