“Tiburón”, película de terror, suspenso y aventura estrenada en 1975, narra cómo un enorme animal blanco devorador de hombres ataca a los bañistas en las playas de Amity Island, circunstancia que lleva al jefe de la policía local a emprender la caza del marrajo en compañía de un biólogo marino y un caza-tiburones profesional.
Ocean Ramsey, de 27 años, antes dedicada al modelaje se ha dado a conocer por diferente motivo. La residente de Oahu (Hawái) afronta su cuarto año nadando por el mundo, junto a todo tipo de tiburones. Conservacionista y profesora de buceo, tiene el reto de demostrar que el pez poco tiene que ver con la imagen agresiva que le acompaña desde que Steven Spielberg provocara pesadillas y terror al mar con su película.
Pero referirse a la primera estrella del filme más taquillera de la historia del cine hasta 1977, año en que se estrenó Star Wars, es hablar de las 350 especies que tienen una gama de medidas que van desde el tiburón perro enano al tiburón ballena, mayor pez del mundo con unos 18 metros de longitud; sacrifican animales del mar heridas o enfermas. Sin tiburones los océanos estarían atestados de vertebrados acuáticos muertos o moribundos.
Desde el diseño de los nuevos aeroplanos hasta su impacto en la economía, pasando por la salud los escualos son más útiles de lo que podemos imaginar. Las aletas y la nariz inspiraron la actualización de las alas y los fuselajes de los aviones modernos. Tienen más sensibilidad eléctrica que cualquier otra criatura en la tierra. Debido a la detección de los campos magnéticos pueden ayudar en la navegación y en la orientación. Son estudiados dentro de su cerebro durante periodos de sueños para sustentar los tratamientos de los desórdenes de vigilia en humanos.
Por cada tiburón que hiere a una persona, se matan medio millón de la especie al año bajo diversos fines. Y aunque la película creó un mito de fatalidad, parte de ataques a bañistas es oiginado a la confusión por los trajes de neopreno con su presa habitual.
Es probable que la guapa ex modelo piense que con 400 millones de años de evolución comienza la sabiduría genética por reconocer que los tiburones no nos necesitan pero que nosotros y otras especies si requerimos de ellos.
Periodista y Docente de Desarrollo Sustentable
EfACICO 
Felicidades Lupita,
Ya que tocas el tema de conservacionismo y peces, no está nada mal que le eches una revisada al documental «The Cove» de Luis Psihoyos,sobre la matanza de delfines en Japón.Interesante y revelador documento.
Saludos cordiales,
AG Riande
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