Por Francisco Blanco Calderón
En Veracruz, no solo ríos, arrecifes e islas han sido sujeto de la privatización devastadora que azota al país, ahora también el servicio de saneamiento del agua.
“Aunque en 2012 se estableció en la Constitución Mexicana el derecho humano al agua, la privatización del servicio se relanzó a través del Programa para la Modernización de Organismos Operadores de Agua (Promagua); en la entidad el primero en dar este paso sería el Sistema de Saneamiento (SAS) de Veracruz-Boca del Río-Medellín, con ello las empresas podrán fijar tarifas y embargar a morosos, además, esto sería parte de la “irresponsabilidad de los alcaldes y corrupción de políticos” (JORNADA Veracruz).
EL SAS padece una crónica y prolongada crisis financiera principalmente a cuatro fenómenos: uno, actos de corrupción interna en sus últimas administraciones; dos, al exceso de proteccionismo de las autoridades estatales, que coadyuvan en el saqueo de sus arcas y mantienen impunes a los responsables; tres, al abuso de los morosos, por su ausencia de pagos del servicio en grandes hoteles, restaurantes, antros y residencias de los acaudalados porteños; y cuatro, los altísimos salarios, la nómina sumamente “engordada” y los aviadores que aterrizan en las oficinas gubernamentales. Y ello es responsabilidad directa de los alcaldes y los gobiernos estatales, principalmente, desde la fidelidad hasta su actual heredero.
Rafael Arias Hernández, investigador de la UV, es puntual en su denuncia “si los alcaldes están dispuestos a privatizar los servicios hay que privatizarlos a ellos, simple y sencillamente hay que buscar su revocación”.
Privatizar el servicio de agua será consecuencia directa de la corrupción, del saqueo y de la impunidad. No hay de otra. Los ahora más de mil millones de pesos faltantes, según ellos, son parte de administraciones fraudulentas, más lo que se acumule.
La ganadería en crisis
Ahora se festina el crecimiento de la ganadería, se jactan de un exagerado hato de tres millones de reses, cuando en la entidad desde antes de Hernández Ochoa hasta Miguel Alemán se superaba. A principios de la década de los sesenta, la ganadería tuvo un impulso inusitado, explicado por un lado por la Revolución cubana y por el otro el programa de respaldo al sector de la Alianza para el Progreso, de John F Kennedy, en donde los muy altos créditos, a tasas de interés sumamente bajas y con largos periodos de gracia, apoyaron como nunca al sector.
La fidelidad la desplomó, hasta reducirla casi a la mitad de bovinos, ello sumado al fenómeno del “crimen organizado” que ha afectado seriamente al sector. Antes si éramos primer lugar nacional, hoy nos supera Chihuahua, Sonora, y Coahuila. Para ello se anunció el año pasado un programa para repoblar el inventario ganadero.
“El inventario ganadero nacional se vio afectado por efectos climáticos adversos como prolongadas sequías en la región norte y centro del país, y por inundaciones en algunas zonas específicas del sur y sureste. Ante estos fenómenos, además de las pérdidas por muerte del ganado, existen otro tipo de pérdidas que, en definitiva, repercuten de forma negativa en la economía de los ganaderos y, si no se toman las medidas adecuadas y oportunas, pueden reflejarse en menor disponibilidad de alimentos de origen animal para la población.
Por citar algunas, los pastizales, praderas y agostaderos -fuente importante de forraje para la alimentación del ganado- pierden parte de su cobertura vegetal, que requerirá de tiempo, dinero y esfuerzo, para recuperarse” (Ganadería.com.mx).
Pero las causas reales, en Veracruz, han sido el descuido casi absoluto de las instancias federales, estatales y las Uniones ganaderas. Dichas Uniones encargadas más a la foto con sombrero texano, a sonreír junto al gobernante para satisfacer sus aspiraciones políticas a fin de incrustarse en la burocracia legislativa o formar parte de los cuerpos edilicios.
El deterioro del campo ha sido criminal, consciente y racionalmente criminal que hoy en día se suma la absurda reforma hacendaria que ahorcara aún más al pequeño productor. En Veracruz ganaderos de más de 500 has y de 3 a 5 mil reses no llegan ni al 3% del total de los productores en la entidad. Esta está poblada principalmente por ganaderos de una a cien hectáreas, contando con una o setenta reses máximo por cada uno. Ellos representan más del 95% del total de los realmente productores.
La disminución ha sido afectada por las contingencias climatológicas, sequías y desastres naturales, pero sobre todo por la desprotección del campo veracruzano, la ausencia de estímulos, el encarecimiento de los insumos, la excesiva importación de carne y leche del extranjero, el control del mercado doméstico por la trasnacional Nextle y el acaparamiento de la carne importada en centros comerciales como Wal Mart, Soriana, Mega, Chedraui. Todo ello sumado a la constante caída del crecimiento económico del país, con la inmediata consecuencia de la migración creciente de la mano de obra joven del agro nacional.
Paradójicamente hoy en día el ejido y los ejidatarios sobreviven gracias a las remesas del migrante en el extranjero. Los programas asistenciales como Procampo apoyan más a los grandes productores, como los casos del extitular de Agricultura, Ganadería, Desarrollo rural, pesca y alimentación, Javier Usabiaga y en Veracruz las esposas, hijos, hermanos de los Ruiz.
Las noticias
La buena, México crecerá. La mala, Carstens dijo entre 3.3 y 2.3%, Videgaray, optimista entre 3.7 y 2.7, INEGI no rebasará el 2% del PIB nacional. La mentirosa, el país crecerá gracias a las reformas estructurales. La que nadie cree: las leyes secundarias se discutirán después del mundial de futbol.
La mediatizada: México logrará finales del mundial. La enloquecedora, El acoso escolar (también conocido como hostigamiento escolar, matonaje escolar, matoneo escolar o en inglés bullying) es cualquier forma de maltrato. Es violencia escolar.
La esperada, dos nuevos antros en Martí ahora gracias al nuevo Poo.
EfACICO 