LOS ORIGENES DEL CONFLICTO ISRAEL- PALESTINA
(Segunda Parte)
Por Irene Arceo

Palestina, la tierra que se conoció como Canaán fue poblada por cananeos y filisteos en el 3000 y el 2500 a.C. Y ahí mismo, Los jebuseos, una de las tribus cananeas, levantaron un poblado al que llamaron Urusalim, (Jerusalem), «Ciudad de la Paz».
Hacia el año 2000 a.C. pasó por Palestina otro pueblo semita nómada: los hebreos, conducido por Abraham. Siete siglos más tarde, volvieron, procedentes de Egipto, doce tribus hebreas al mando de Moisés. Se trabaron violentos combates por la posesión de la tierra.
Cuatro siglos después, David unificó el reino judío. Tras la muerte de su hijo Salomón, los hebreos se dividieron en dos reinos, Israel y Judea, que más tarde cayeron en manos de los asirios (721 a.C.) y los caldeos (587 a.C.). En esta última fecha Nabucodonosor destruyó Jerusalem y llevó a los judíos en cautiverio a Babilonia.
Palestina fue conquistada por Alejandro Magno en el 332 a.C y quedó bajo dominio griego. A su muerte retornó al imperio egipcio de los Ptolomeos. Más tarde fue dominada por los seléucidas de Siria. Una rebelión encabezada por Judas Macabeo restableció un estado judío en el año 67 a.C.
En el 63 a.C. Palestina fue incorporada al Imperio Romano que reprimió severamente la resistencia de los macabeos, zelotes y otras tribus judías. Como parte de esa represión fueron crucificados miles de rebeldes, alrededor del año 30 d.C., en los tiempos de Jesús de Nazareth.
En el 70 d. C. el emperador romano Tito destruyó el Templo de Salomón. Años más tarde, en el 135 d.C., los judíos fueron expulsados de Jerusalem y el emperador Adriano construyó una ciudad pagana sobre sus ruinas.
A partir del año 330 Palestina quedó bajo el dominio Bizantino. En el año 638 Omar Al-Khattaab entró en Jerusalem, puso fin a la era bizantina y dio inicio la era árabe-islámica. Según la tradición islámica, en esa ciudad ascendió al cielo el profeta Mohamed (Mahoma), con lo que Jerusalem adquirió carácter sagrado para las tres grandes religiones monoteístas, nacidas de un tronco común.
La fe islámica y el idioma árabe unificaron a los pueblos semitas, excepto los judíos. Con breves intervalos de dominación parcial de los cruzados cristianos y los mongoles, en los siglos XI, XII y XIII Palestina tuvo gobiernos árabes e islámicos durante casi un milenio. En 1516, el Imperio Otomano conquistó Jerusalén y mantuvo allí su hegemonía hasta el fin de la Primera Guerra Mundial.
GRAN BRETAÑA PROPUSO PRIMERO A UGANDA O PATAGONIA COMO NACION JUDIA
Al estallar la Primera Guerra Mundial, Inglaterra había prometido la independencia de las tierras árabes bajo el gobierno otomano, incluyendo Palestina, a cambio de su apoyo contra Turquía, aliado de Alemania. Por aquel entonces los judíos de Europa y, principalmente Rusia, sufrían los pogroms (linchamiento multitudinario, planificado, contra grupos). Había una necesidad imperiosa de tener un lugar donde vivir en paz, sin persecuciones. El mayor anhelo era construir el Estado en la Tierra de Israel, pero teniendo en cuenta este escenario, se planteó la posibilidad de buscar otro lugar de manera alternativa y transitoria. De allí surgen las opciones del Proyecto Uganda y la Patagonia argentino-chilena, lugares que fueron descartados por inviables económicamente y porque la comunidad judía siempre añoro la vuelta a Jerusalem por ser su lugar sagrado desde tiempos bíblicos, donde pequeñas comunidades judías ya estaban allí asentadas.
A partir de 1878 comenzaron a establecerse los primeros asentamientos de judíos en Palestina, impulsados por el movimiento sionista. Alrededor de 25 mil inmigrantes entraron ilegalmente desde el este de Europa. El barón francés de origen judío Edmond Rotschild, apoyaba con dinero las actividades sionistas. En 1895 el total de la población de Palestina ascendía a 500 mil personas: 453 mil eran árabes palestinos y ocupaban 99% de la tierra; 47 mil eran judíos y eran dueños del 5% de la tierra. Entre 1904 y 1914 se produjo la segunda ola migratoria. En 1909 se instaló el primer kibutz (granja colectiva) al norte de Yaffa.
En 1917, la «Declaración Balfour» comprometía los esfuerzos de Inglaterra para la creación de un Hogar Nacional Judío. Los palestinos realizaron su primera conferencia en 1919 y se opusieron, pues aspiraban a la creación de un Estado Palestino Independiente, tal como los británicos habían prometido a cambio de su apoyo durante la guerra.
En 1920 la Conferencia de San Remo garantizó el mandato británico sobre Palestina. Dos años más tarde el Consejo de la Liga de las Naciones promulgó un mandato que promovía el establecimiento en ese territorio de un hogar nacional para el pueblo judío. Durante seis meses los palestinos realizaron huelgas y movilizaciones en protesta por las confiscaciones de tierra y la inmigración ilegal, que tenía por objeto aumentar la escasa población judía y justificar sus aspiraciones territoriales.
Cuando el gobierno inglés intentó restringir la inmigración judía y ofrecer la independencia de Palestina al cabo de 10 años, la resolución fue rechazada por los sionistas, quienes organizaron milicias y lanzaron una campaña sangrienta contra británicos y palestinos. El 9 de abril de 1948, un destacamento de la organización «Irgun», comandado por Menahem Begin, invadió la aldea de Deir Yassin y asesinó a 254 civiles. El terror provocó el éxodo de decenas de miles de palestinos.
Al fin de la Segunda Guerra Mundial, las Naciones Unidas aprobaron la partición de Palestina (Resolución 181). Los palestinos, que constituían el 70% del total de la población y tenían el 92% de la tierra, fueron reducidos al 43% del territorio. El resto fue entregado a los judíos, que representaban el 30% de la población y poseían sólo el 8% de la tierra. Jerusalem se consideró dentro del 1% que quedaría como zona internacional.
El 14 de mayo de 1948 los judíos proclamaron el Estado de Israel que hizo estallar la primera Guerra Árabe-israelí y el conflicto de Oriente Medio. Palestina quedó dividida en tres partes: la que ocupaba Israel; la ribera occidental del Jordán (Cisjordania) que pasó a Jordania, y Gaza, que quedó bajo la administración de Egipto. Unos 700 mil palestinos fueron expulsados de sus hogares, huyeron a los países vecinos y se instalaron en campos de refugiados.
(Continuación)

