por Paul Martínez

A inicios de la década de los 90 era gobernador del estado Dante Delgado y yo producía un programa dedicado a tema de comunicación en el canal 4.
+En esa época lo más novedoso que había, en términos de comunicación inmediata, eran el telefax, no existían los teléfonos móviles ni mucho menos las redes sociales, nuestra mejor fuente de información inmediata era la prensa escrita y los medíos electrónicos.
En un periódico local leí que estaban filmado una película en la selva de los Tuxtlas, protagonizada por Sean Connery de inmediato se lo hice saber a mi director y estuvo de acuerdo en que fuéramos a la región para tratar de entrevistar al famoso 007. ¡Ilusos!
A los pocos días, como acostumbran decir ahora, “el universo conspiro a mi favor” (que mamada) invitaron al entonces secretario de Desarrollo Económico del estado a ser testigo de la filmación de “El Curandero de la Selva” (Medicine Man) del director John McTiernan, cineasta que los cinéfilos ya seguíamos pues había sido el creador de la primera cinta de “Duro de Matar” y de “Depredador”
De inmediato mi jefe gestiono para que pudiéramos acompañar al poco agradable y mal encarado “secre” y ahí vamos un pequeño equipo de producción de TV hasta los Tuxtlas.
La cinta se filmaba en la reserva de Nanciyaga y la historia se desarrolla en la selva del Amazonas. Una de las productoras Anna Roth, fue la única que pude entrevistar, nos platicó todo lo que tuvieron que hacer para que la producción se hiciera en Veracruz.

Desde la remodelación de hoteles, incluido llevar agua y clima a todas las habitaciones, hasta ambientar la selva mediante la “plantación” de árboles y plantas nativos de Brasil para hacer más creíble la locación.
Había anécdotas interesantes de la producción., desde accidentes con las cámaras hasta las dificultades para trasladar el material filmado, con máxima seguridad, por carretera hasta el aeropuerto de Veracruz y de ahí a los Ángeles.
Sir Connery se bajaba de su camioneta y un grupo de guaruras lo rodeaba, evitando todo contacto con los mortales, hasta el set de filmación. Ni siquiera un saludo con la mano nos regaló.
La producción nos dio instrucciones de dónde emplazar nuestra cámara y de ahí no pudimos movernos.Fuimos testigos de la filmación de una escena donde el personaje rescata a la actriz del borde del precipicio, la magia del cine, al verla en pantalla no corresponde a lo que nos tocó ver.
Al finalizar una escena, la actriz principal Lorraine Bracco, quien nos había enamorado por su fuerte papel en “Buenos Muchachos”, se fue a su área de descanso y empezó a desnudarse, no a la vista de todos, pero sí de la nuestra, pues por la indicación recibida se había ubicado la cámara exactamente arriba de su camerino, el cual no tenía techo.
A los pocos minutos un grupo de personajes de la producción arribo a nuestro emplazamiento y sin cuidar las formas, pidió revisar el material grabado. Afortunadamente, cuando me percaté de lo que la actriz hacía, pedí a mis compañeros retirarnos y apagar el equipo, sin embargo, la cámara se deslizo hacía abajo y se pensó que habíamos incurrido en una indiscreción.
Al final solo nos quedamos con unas cuantas imágenes y la experiencia de haber sido testigos de la filmación de una cinta de gran presupuesto. Mr. Bond, ni siquiera se percató de nuestra presencia, mucho menos nos dio la entrevista.
La película en cuestión es bastante mala y no tuvo buena aceptación en taquilla. Poco tiempo después leí lo que el actor había comentado de la locación y no eran buenas palabras.
