La elección presidencial de este 2 de junio, será de tercios y no binaria, como se pretendía ver al principio del proceso electoral.

Por eso, la preocupación por parte de la alianza Fuerza y Corazón por México, con la declinación fallida que no se dio de Jorge Alvarez Máynez del Partido Movimiento Ciudadano, que creció considerablemente con la intención del voto joven.

Sin atender, a las encuestas y sin los intentos de una marcha a modo que busca detonar el hartazgo de muchos de la polarización provocada por AMLO, a los opositores no les da para poderle ganar a Claudia Sheinbaum, candidata morenista.

La democracia a veces es impredecible, y sigue en una lucha que es de ciclos y por lo mismo el segundo piso de la 4T, va por otro sexenio más, aunque hay dudas por una intensa disputa de la oposición.

Pero también, se da como un hecho el cerrado resultado de Rocío Nahle y de Pepe Yunes en la gubernatura de Veracruz, a pesar de la guerra sucia despiadada que invaden a la familia de lado y lado.

Las dudas en el resultado de la elección estatal de Veracruz, es que los expertos suman la baja calificación que se da al gobierno estatal, y la ausencia notoria de operación política, que indica neutralidad o el dejar pasar a lo que se avecina entre Rocío y Pepe, de un resultado incierto.

En la elección veracruzana a pesar de las quejas de los opositores, que son siempre históricamente por los supuestos bloqueos al acarreo electoral en los autobuses para el acompañamiento de los candidatos se han cerrado las encuestas y por lo mismo la duda existe.

Pero, de lo que no hay duda, es de que los opositores van a recibir el respaldo para los cargos legislativos, pero los ciudadanos no cederán la presidencia del país, el gobierno de la ciudad de México, ni la gubernatura de Veracruz.

Este fenómeno que se está viviendo, es una fotografía de los noventa años del PRI, y al político tabasqueño no le han permitido gobernar ni siquiera seis años por los detractores y opositores, que nunca le perdonaron su holgado triunfo con el respaldo de más de 30 millones de mexicanos.

Claudia Sheinbaum, será una auténtica presidenta de transición, que deberá poner en orden todo el tiradero que AMLO, no pudo resolver, y con todos los pendientes que no se han podido solucionar en el corto plazo.

Pero, la óptica de los jóvenes para esta elección, es que se dará el beneplácito a la 4T, y con ello la oportunidad para que Claudia Sheinbaum, más adelante se deslinde del propio Andrés, y que gobierne con sabiduría y experiencia para resolver los múltiples problemas añejos de los noventa años del pasado, imposible de resolver en seis años.

Por eso, que no sueñen los opositores con los cargos ejecutivos, ya que por el voto cruzado se les dará chamba en los cargos legislativos y tan tan. Andale. Así las cosas