
Es el carnaval eterno que llevamos todos los porteños, un carnaval permanente, una fiesta, un bullicio, una forma de estar en contra de la tristeza, de la melancolía; se trata de sentirse vivo”.
Esa cita fue la que me llevó a bautizar a nuestro amigo Néstor Andrade como “El pintor del carnaval”. Lean por favor una de las tantas entrevistas que le hice. Quedémonos con sus reflexiones sobre el arte para empujar el rumbo que él visualizaba. (QEPD.) COMPARTE HISTORIA, ARTE Y CULTURA(Indira Domínguez)



